Jenni Hermoso, la futbolista a la que el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, agarró la cabeza y le dio un beso en la boca tras el triunfo de la selección española femenina en el mundial de Australia, decidió dejar en manos de su sindicato, Futpro, las acciones que se puedan llevar a cabo contra su máximo jefe. En un comunicado, el sindicato expresó su “firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres”.
“Mi sindicato Futpro, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto”, explicó la propia Hermoso, según el citado texto hecho público por el sindicato a media tarde de este miércoles. La agencia TJM ha publicado otro comunicado en el que asegura que está valorando “las acciones más apropiadas” ante lo ocurrido en Sidney.
En medio de una inédita presión social y política para que Rubiales dimita, Futpro pide a la RFEF “que implemente los protocolos necesarios”, vele “por los derechos” de las jugadoras y “adopte medidas ejemplares”. “Es esencial que nuestra selección, actual campeona del mundo, esté siempre representada por figuras que proyecten valores de igualdad y respeto en todos los ámbitos”, apunta el citado comunicado.
“Es necesario continuar avanzando en la lucha por la igualdad, una lucha que nuestras jugadoras han liderado con determinación, llevándonos a la posición en la que nos encontramos hoy”, añade el sindicato. Además, realiza “un llamado al Consejo Superior de Deportes para que, dentro de sus competencias, apoye y promueva activamente la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo”.
Sin mencionar en ningún momento el nombre de Rubiales, Futpro “rechaza cualquier actitud o conducta que vulnere los derechos de las futbolistas y desde el sindicato estamos trabajando para que actos como los que hemos visto nunca queden impunes, sean sancionados y se adopten las medidas pertinentes que protejan a las futbolistas de acciones que creemos son inaceptables”.
La decisión de Hermoso llega mientras sigue creciendo la presión sobre Rubiales ante sus gestos en la final del mundial de fútbol del domingo. Al reproche de buena parte del país, al convencimiento de muchos juristas de que lo que hizo constituye un delito de agresión sexual y al bochorno internacional se unieron el martes una batería de denuncias (una de Sumar ante el Consejo Superior de Deportes, otra de un afiliado de la federación y una de un exárbitro de Primera División ante la federación).
También la desaprobación de la mayoría de la clase política, con el presidente del Gobierno a la cabeza, la petición de dimisión de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y una información periodística en Relevo que asegura que la RFEF se inventó las declaraciones por las que Hermoso exculpaba a Rubiales.
La denuncia de la Liga F
A todo ello se unió este miércoles la Liga Profesional de Fútbol Femenino (Liga F) que presentó una denuncia contra Rubiales ante el Consejo Superior de Deportes “por los gravísimos hechos y conductas llevadas a cabo” por el presidente de Federación durante la final del Mundial y solicita su inhabilitación. “Una de las mayores gestas de la historia del deporte español se vio ensuciada por el bochornoso comportamiento del máximo representante del fútbol español que, una vez más, y guiado por su continuo y habitual afán de protagonismo, demostró no estar a la altura del cargo que ostenta”, dice en un comunicado la Liga F.
La institución menciona el beso forzado de Luis Rubiales a Jenni Hermoso pero habla en general de “una actitud” que se encuentra, señalan, “muy alejada de los valores de nuestra sociedad” y que, sin embargo, ha tenido trascendencia mundial. “Celebrar el triunfo en el palco de autoridades agarrándose los genitales al lado de S.M. La Reina y Su Alteza Real la Infanta Doña Sofía es inadmisible y repugnante. Que un jefe agarre de la cabeza a su trabajadora y la bese en la boca, sencillamente, no puede tolerarse. Tildar públicamente de 'gilipollas, tontos del culo y pringaos' a aquellos que reprochan tales actitudes es inadmisible y repugnante”, prosiguen. Las disculpas del presidente de la Federación fueron, a ojos de la Liga F, fueron insuficientes e inadecuadas.
Con todo, la RFEF convocó este martes una asamblea general extraordinaria que se celebrará el próximo viernes a partir de las 12.00 horas en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid). La propia federación incluye en su protocolo el “besar a la fuerza” y el “inadecuado acercamiento en el contacto corporal” como situaciones y comportamientos relacionados con la violencia sexual.
Este miércoles el ministro de Cultura y Deportes, Miguel Iceta, ha advertido que en esa reunión extraordinaria de la RFEF se “han de tomar de decisiones”. En declaraciones a la Agencia EFE, el máximo responsable del deporte español ha mostrado su intención explícita de actuar si no hay una respuesta contundente de la Federación de Fútbol, más allá de la supuesta disculpa de Rubiales, que el presidente del Gobierno ya ha calificado como insuficiente e inadecuada. En las últimas horas, también el presidente del Consejo Superior de Deportes, Víctor Francos, ha amenazado con intervenir si no ve reacción en la Federación de Fútbol. “Si no toman las decisiones, lo hará el Consejo General de Deportes”, ha concluido primero Francos y horas después el ministro.