Sergio Massa, a quien Patricia Bullrich tachó del “peor ministro de Economía” por la inflación galopante, propuso este domingo en el debate presidencial la creación de una “moneda digital”, quizá como alternativa que bajo su gestión se deprecia en forma acelerada. Coincidió con la candidata de Juntos por el Cambio (JxC)en criticar que sólo un puñado de países como Zimbabwe, El Salvador y Ecuador adoptaron el dólar como moneda, como sugiere Javier Milei. El libertario se limitó a considerar como “falacia” la descalificación de la dolarización porque sólo pocas naciones la emprendieron. El ministro candidato peronista también disparó contra el bimonetarismo que proponen Bullrich y su asesor económico Carlos Melconian: sostuvo que era el sistema que tienen Venezuela y Cuba. En realidad, lo que sugiere Melconian es un régimen similar a Uruguay y Perú, pero su jefa política fue incapaz de mencionarlo.
“Voy a borrar de cuajo la inflación”, prometió Bullrich. “Voy a poner orden con un programa claro y concreto que solucione todos los problemas, con un equipo económico claro y honesto, con Melconian. Nosotros queremos terminar con la inflación”, agregó la ex ministra de Trabajo de Fernando de la Rúa y de Seguridad de Mauricio Macri, pero no dio más precisiones de cómo. Sólo aclaró que busca terminar con el actual déficit fiscal. “Bullrich no esbozó ninguna medida”, la atacó Milei. Después Massa la chicaneó preguntándole si JxC volverá a echar a Melconian al año de gestión, como Macri en su gobierno, que lo removió de la presidencia del Banco Nación.
Milei abogó por una “reforma del estado, baja drástica del gasto, desregular la economía a fondo, privatizar empresas, abrir economía y cerrar el Banco Central”. Defendió una poda de 14 puntos del PBI en las erogaciones, que ahora ronda el 40%, pero no aclaró cómo hará para ajustar a provincias y municipios, que también están incluidas en esa cifra. Recordó que la Argentina era de las 10 principales economías del mundo a principios del siglo XX y señaló que ahora está de la mitad para abajo, pese a que las estadísticas como el índice de desarrollo humano ubican al país en el puesto 47° sobre 191 naciones. Vaticinó que con él la Argentina se parecerá a Alemania en 20 años y a Estados Unidos, en 35. Opinó que todas los problemas tuvieron origen en el déficit fiscal que se financió con deuda o emisión monetaria. “Con el déficit no me corran, eso a otros, que ustedes endeudaron al país”, le enrostró el libertario a Bullrich. En plan de reducir el rojo de las cuentas públicas, recordó que hace poco cuestionó recientes contrataciones del Gobierno: “Cayó hasta mi ex jefe, ¡miren qué gatito soy!”. Apuntó así al contrato de confección de DNI que le entregaron a Eduardo Eurnekian. Minutos antes, la candidata del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), Myriam Bregman lo había atacado al favorito para las elecciones del 22 de octubre: “No es un león sino un gatito mimoso del poder económico”.
El economista, diputado y candidato de La Libertad Avanza (LLA), que entró en política hace sólo dos años se autodefinió como “especialista en crecimiento económico” y arremetió contra la “casta empobrecedora”. Soltó afirmaciones de dudosa base cuando señaló que la jubilación privada era mayor que la actual cuando se estatizó en 2008, cuando Massa era jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner, pero olvidó decir que entonces sólo el 10% cobraba de las AFJP -administradoras de fondos y jubilaciones privadas, que él propone restaurar- y el 90% ya dependía del Estado. También dijo que YPF -que él quiere privatizar- valía 11 veces más cuando “la bestia de (Axel) Kicillof” la estatizó en 2012. Es verdad que en 2011 cotizaba más, pero no 11 sino cuatro veces más.
Milei preguntó a Massa cómo lograría el equilibrio fiscal que el ministro candidato propone para 2024 dado que ahora aplica un “Plan Platita”. Bullrich también lo increpó al postulante de Unión por la Patria (UP) al recordar que el proyecto oficial de presupuesto 2024 prevé un rojo fiscal que sólo se corregiría si el Congreso aprueba una “separata” que quita exenciones impositivas por 4 puntos del PBI. Le reclamó que especifique cuáles quiere eliminar. El ministro desafió un par de veces a sus rivales a aprobar esa reducción de rebajas impositivas sostenidas por “lobbies de empresas que te roban”. ¿Se referirá a las electrónicas de Tierra del Fuego o a las de economía del conocimiento como Mercado Libre, Globant, Accenture o Despegar? En cambio, aseguró que seguirá bajando impuestos como el IVA a los que menos ganan y el de las Ganancias a los trabajadores que más cobran. Claro que en el presupuesto 2024 no se detalla cómo se compensarán estos descuentos tributarios para llegar al déficit cero.
“Qué lindo suena todo lo que dice, lástima que sin bajar la inflación no lo puede hacer”, arremetió Milei contra Massa. Recordó que este gobierno está dejando una “bomba de Leliq”, las Letras de Liquidez, que son los títulos de deuda del Banco Central, que toman los bancos con el dinero de los ahorristas. Milei le reclamó a Bullrich que explique qué haría con las Leliq, pero ella no le respondió. “Tus economistas chantas no dijeron qué van a hacer, son los mismos que se llevaron puesta la independencia del Banco Central en 2017”, le apuntó. El libertario prometió terminar con la bola de Leliq, pero tampoco aclaró cómo. “Estamos al borde de la hiperinflación”, alertó Milei, pero Massa le contestó que su plan de dolarización alienta la demanda de la moneda norteamericana. El gobernador de Cordoba y candidato presidencial peronista antikirchnerista, Juan Schiaretti, sugirió que la receta de adoptar el dólar traería un híper y negó que se necesite un ajuste tan drástico como el sugerido por el libertario.
“Massa, tu gestión es un desastre”, le enrostró Bullrich al ministro. También apuntó contra Milei: “Transa con lo peor de la política y del sindicalismo mafioso, como (Luis) Barrionuevo, contámelo a mí”, señaló quien se enfrentó al gremialismo como ministra de Trabajo de De la Rúa, cuando el desempleo no paraba de crecer.
El ministro de Economía y candidato de UP recordó el proyecto de ley de blanqueo de capitales que está en el Congreso para que “puedan traer los que tienen plata del exterior” y, al mismo tiempo, subir las penas a los que sigan evadiendo las normas cambiarias y tributarias: “Cárcel a los que fugan”, prometió. “Querés ley penal, llévatelo a (Martín) Insaurralde, andá a buscarlo”, le retrucó Bullrich después del escandoloso viaje en yate por el Mediterráneo de quien hasta el sábado era jefe de Gabinete bonaerense. Massa ni mencionó al renunciado funcionario que ahora deberá rendir cuentas por presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
La aspirante de JxC le recordó al de UP que en el gobierno de Alberto Fernández subieron el dólar y la pobreza. También habían aumentado con Macri, tal como lo señaló Schiaretti. Massa volvió a cargar contra el préstado récord que el gobierno de Cambiemos tomó en 2018 ante el Fondo Monetario Internacional y la ex ministra de Seguridad de esa gestión le respondió que ahora la deuda es la mayor en 40 años de democracia, una afirmación inexacta porque el pasivo en términos nominales es más grande pero en relación al PBI, como debe medirse, fue muy superior cuando estalló la convertibilidad (la atadura del peso con el dólar) en 2002 o levemente más alta en el final de la administración de Macri.
Massa prometió un “modelo de desarrollo” que no se base sólo en materias primas y economía del conocimiento, es decir, con industria. Descalificó a Milei y Bullrich: “Parece que estoy debatiendo con paracaidistas suecos”. Recordó que el libertario fue empleado de las AFJP y que Bullrich no hizo mea culpa por el gobierno de Macri. También que “ella habla de los jubilados pero yo les devolví el 13% que ella les descontó”. Bullrich lo hizo como ministra de Trabajo en 2001 y después Massa se los restituyó como jefe de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) en el gobierno de Néstor Kirchner.
Bregman le recordó al ministro candidato que él impulsó la aprobación parlamentaria del acuerdo con el FMI en 2022 y lo responsabilizó de la reciente devaluación, pese a que él intenta endilgársela al Fondo. Arremetió contra Milei al llamarlo “empleado de Cavallo”. El libertario lo tiene como ídolo, pese a que su gestión terminó en la megacrisis de 2001.
AR