En un contexto en el que la inflación elevada atenta contra las referencias para los consumidores se suma el hecho de que la actualización de los precios de productos básicos no avanza con la misma velocidad en los diferentes canales de comercialización. Según un informe de la consultora Scentia, 2020 cerró con un salto mucho más marcado en las góndolas de los comercios de proximidad que en las cadenas de supermercados.
De acuerdo con el estudio, que analiza el precio de 1.044 productos empaquetados de los rubros alimentos, bebidas, productos de higiene y limpieza, los precios aumentaron 16,8% en cadenas de supermercados entre enero y diciembre de 2020 mientras que la evolución de precios en autoservicios ascendió a 28,5% en autoservicios en el mismo período. Es decir, cerca del doble. En total, el aumento de los productos relevados fue de 23,9% en el año.
La divergencia se explica principalmente por el alcance de los programas nacionales Precios Máximos y Precios Cuidados, que rigen para las cadenas de supermercados y permiten sólo los aumentos autorizados por el Gobierno (muy inferiores a la inflación durante 2020), pero no para los comercios de proximidad.
Este martes el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof lanzó el programa Comprá más Cerca como un complemento para el programa nacional de Precios Cuidados. Consiste en una canasta de 23 productos genéricos (sin marca definida) que deberán estar disponibles en mercados y autoservicios de los 135 municipios bonaerenses a un “precio razonable”.
Según los datos que dieron el gobernador y su ministro de producción Augusto Costa (artífices ambos, durante su paso por el Ministerio de Economía de la Nación, del programa Precios Cuidados), alrededor de 70% de las compras se realizan en pequeños comercios, mientras que el otro 30% se canaliza por supermercados. Además, en las localidades menos pobladas del interior del país la presencia de cadenas de supermercados es muy escasa o incluso inexistente.
De acuerdo con el informe de Scentia, durante el primer trimestre de 2020 la evolución de los precios en supermercados y autoservicios se movió a un ritmo similar, pero a partir de abril (en marzo entró en vigencia el programa Precios Máximos) comenzó a ampliarse la brecha hasta alcanzar casi 12 puntos porcentuales de diferencia en diciembre. La divergencia continuó en 2021: en enero los productos medidos aumentaron 2,6%, pero -si se desagrega- se ve que el avance fue de 2,4% en supermercados y de 2,9% en autoservicios.
MT