Salta se sube al tren del litio y empieza a exportar para competir con Catamarca y Jujuy

Las exportaciones de litio argentino, que tuvieron durante más de veinte años como protagonistas a las provincias de Catamarca y Jujuy, sumaron en febrero a Salta. Eramine Sudamérica, la subsidiaria local de la compañía francesa Eramet, realizó la primera exportación de 40 toneladas de carbonato de litio desde la puna salteña a China. Este año la empresa planea exportar 13.000 toneladas, aportando un crecimiento de 19% al total de exportaciones de litio del país. 

Pasados catorce años y una inversión de U$S800 millones desde la primera exploración, el proyecto Centenario-Ratones –ubicado a 3.800 metros sobre el nivel del mar en la región conocida como la puna salteña, en el departamento de los Andes– marcó un hito para la minería en la provincia. La relevancia del hecho radica en que, tras años de que tanto Jujuy como Catamarca se llevarán los títulos de la producción de litio, la provincia inició un camino que se acelerará cuando comiencen a hacer lo mismo los otros dos proyectos que se inauguraron recientemente: Sal de Oro (de la coreana Posco) y Mariana (de la china Ganfeng Lithium) . 

Cuando los tres se encuentren produciendo a toda su capacidad hacia el 2030 (25.000tn Eramine, 25.000tn Posco y 20.000tn Ganfeng), tendrán el potencial de duplicar la producción actual de litio en Argentina ( 67.000tn según la Bolsa de Comercio de Rosario). 

Desafíos logísticos en la puna salteña: un camino largo y complicado

El primer despacho de carbonato de litio tuvo un trayecto logístico de 1580 km desde el salar Centenario-Ratones hasta el Puerto de Rosario, desde donde se embarcó a China. El paso de Sico, que es la frontera con Chile más cercana, hubiera significado la mitad del kilometraje. Sin embargo, la ruta no se encuentra acondicionada para tal fin, y solo están habilitados los camiones de carga: “Hoy por hoy es más barato exportar por el puerto de Rosario, porque falta infraestructura para pasar por Chile”, aseguran desde la empresa en diálogo con este diario. 

En una visita a proyectos mineros de la puna, elDiarioAR vivió en carne propia la falta de infraestructura y complicaciones logísticas de Salta: un alud provocado por lluvias en el cerro ocasionó una demora de seis horas por tres cortes en la ruta nacional 51, que conecta a la ciudad con todos los proyectos mineros de la puna. 

Y las empresas que operan allí lo tienen contemplado. Desde el área de logística de Eramine informaron a este diario que cuentan con rutas alternativas cuyas distancias pueden ser más largas (bajando por Jujuy, por ejemplo). En cada corte calculan que la demora estimada no sea mayor a los tiempos que se extienden por ir por camino alternativo. 

En diálogo con este diario, desde la propia empresa admitieron haber esperado a publicar el anuncio de la salida del camión hasta que el mismo no estuviese en camino. Febrero es temporada de lluvias en Salta y los cortes son más regla que excepción. 

Con la obra pública parada, el gobierno provincial y las mineras intentan encontrar alguna alternativa para resolverlo. 

Tecnología de extracción directa

Además de tener la particularidad de ser pionero en la comercialización de litio en Salta, el proyecto es el primero en el país que cuenta con un proceso de extracción directa de litio (EDL) a escala industrial. El método de extracción utilizado hasta ahora en el mineral ubicado en salmueras es el evaporítico, que consiste en separar el litio del resto de los minerales a través de sucesivas evaporaciones en piletones especiales, aquellos que ilustran la mayoría de las fotos de los salares en explotación.

La extracción directa no utiliza las piscinas de evaporación para hacer la purificación. En tanto, la salmuera de descarte (la que sobra luego de obtener el litio) puede ser devuelta al salar. Según la propia empresa, este proyecto recuperará el 90 por ciento del litio contenido en la salmuera natural, y tiene un período de procesamiento de 7 días, frente a los 18 meses que lleva el proceso tradicional. Además, aseguran que es más conveniente para el medio ambiente dado que “requiere la mitad del bombeo de salmuera con igual producción y permite reciclar hasta el 60 por ciento del agua insumida, por lo que requiere menos agua que con los métodos convencionales por evaporación”. 

Sin embargo, existen dudas sobre esta tecnología, que se encuentra aprobada pero es incipiente: la única experiencia a escala industrial se encuentra en China, más pequeña que la extensión del proyecto salteño y el resto se aplica a escala piloto. Un estudio publicado por la revista Nature Reviews Earth & Environment destaca que la EDL podría incluso utilizar mayores cantidades de agua que el método actual, comprometiendo su aplicabilidad en lugares áridos. Además, la investigación alerta que algunas tecnologías de extracción directa implican cambios de pH en la salmuera (calentamiento de la salmuera hasta 80ºC), y utilización de productos químicos que deben tenerse en cuenta durante las evaluaciones de impacto ambiental.

Litio en Argentina

Argentina es el segundo país con reservas de litio en salmuera (una de las formas más simples y menos costosas para la explotación) y el cuarto productor de carbonato a nivel mundial, y cuenta con operaciones desde hace treinta años. Estas condiciones, que llevaron al país a estar en la mira mundial durante el auge del precio del mineral en 2022- pasó de comercializarse de U$S20.000 promedio a U$S73.000 la tonelada entre 2021 y 2022-, hoy sirven para amortiguar el freno de inversiones de la producción de mineral, que se observan a nivel mundial a raíz de la vertiginosa caída del precio - que ronda los U$S10.000 la tonelada-.

Los números verifican esta paradoja: las exportaciones argentinas de carbonato de litio cayeron 35% en millones de dólares entre el primer semestre de 2023 y 2024; pero la producción sigue aumentando- –63% en el mismo periodo–.

Actualmente existen seis proyectos en producción en el país: Proyecto Fénix, que opera desde los 90 en el Salar del Hombre Muerto de Catamarca a través de Río Tinto (ex Livent fusionada con Allkem y convertida en Arcadium Lithium). Luego el Salar de Olaroz en Jujuy, que comenzó a producir en 2016 y pertenece a la firma Sales de Jujuy, subsidiaria de Río Tinto (originalmente Allkem) y la estatal Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (JEMSE). El tercero en inaugurarse, también en Jujuy, fue el proyecto Caucharí Olaroz, operado por Minera Exar desde junio del 2023, un consorcio del litio conformado por la canadiense Lithium Argentina (ex Lithium Americas), la china Ganfeng Lithium y JEMSE.

Los últimos tres proyectos puestos en marcha fueron en Salta. El Centenario-Ratones a mediados del año pasado, luego Sal de Oro de la coreana Posco ubicado en la parte norte del Salar del Hombre Muerto, en la zona fronteriza de las provincias de Catamarca y Salta. A principios de febrero se inauguró Mariana en el Salar de Llullaillaco, también en la puna salteña, operado por Litio Minera Argentina, subsidiaria de Gangfeng Lithium. 

Próximamente, se inaugurará el proyecto Salar del Rincón, también en la puna salteña. Está operado por la inglesa Río Tinto y aportará 50.000 toneladas de litio de producción. Finalmente Tres Quebradas se encuentra en el Municipio de Fiambalá, y sería el segundo proyecto en Catamarca. Propiedad de la china Zijing mining group, aportará 25.000 toneladas anuales a la producción de carbonato en el país. 

Aunque el desarrollo de los proyectos mineros continúa avanzando con expectativas, no todos los sectores de la comunidad comparten el mismo entusiasmo. En Salta y Jujuy, algunas comunidades se expresan en contra de la expansión de la minería del litio, preocupadas por los impactos ambientales y sociales. 

Sin embargo, y gracias a la lucha de más de diez años de las comunidades originarias, las empresas cuentan con un departamento especial de relación con las mismas, con las que se comprometen a emplear como proveedoras, y hacer obras de infraestructura que “queden cuando los proyectos se van”, cuenta a este diario el intendente de una de ellas. 

La comunidad próxima a Eramine son 7 familias de puesteros que viven de manera semi nomades y que se mueven entre distintos puntos del salar durante el año en búsqueda de las mejores pasturas. El poblado más cercano es Santa Rosa de Los Pastos Grandes. 

NR/MG