En un mapa regional poco amigable, el gobierno argentino sigue recibiendo señales positivas desde Chile. El gobierno de Piñera aprobó esta semana el regreso del último contingente de argentinos que se encontraba en el país vecino por el cierre de fronteras. En total fueron 500 personas que ingresaron por cinco pasos fronterizos, en una gestión coordinada entre Cancillería que conduce Felipe Solá y la Embajada, a cargo de Rafael Bielsa.
El movimiento forma parte de un cambio de clima en la relación entre Fernandez y Piñera, que no había comenzado bien con la llegada del argentino al cargo, especialmente en los primeros momentos de la pandemia, cuando el presidente referenció a Chile como uno de los ejemplos negativos en la gestión del coronavirus. Hoy la relación aparece más distendida y en los últimos meses hubo acercamientos tangibles entre ambos gobiernos.
La primera señal llegó con el apoyo a la estrategia de abstención, impulsada por Argentina y México, a la candidatura del estadounidense Mauricio Claver-Carone para la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Luego vinieron acuerdos para eliminar el cobro del roaming entre países, avances en el suministro de gas en el paso Neuquén-Concepción y participación conjunta en el cable Transpacífico 5G Santiago-Sidney y otras iniciativas científico-tecnológicas. Otro área en el que ha habido avances es en materia oceánica, donde el horizonte está puesto en un acercamiento en la Antártida. El gobierno apuesta a que pronto haya una base con banderas de ambos países en la plataforma.
“La relación pasa por un muy buen momento. Más allá de las diferencias ideológicas, se trabaja muy bien”, dijeron desde Cancillería a elDiarioAR. Además, fuentes del Ministerio le confirmaron a este diario que el gobierno de Chile invitó a la Argentina a una visita de Estado para los próximos meses. El gobierno de Fernández también acercó una invitación y hay posibilidades de que el encuentro se concrete en el primer semestre del 2021, que será el último año de Piñera en el poder. El gobierno aspira a aprovechar el clima y consolidar el acercamiento antes del cambio de mando.
NZ