La comisión investigadora del Senado sobre la pandemia acusará formalmente con denuncias ante la Justicia al presidente Jair Bolsonaro por 11 delitos, entre ellos el genocidio de los pueblos indígenas, crímenes de lesa humanidad y el desvío de dinero público para comprar remedios sin eficacia contra el Covid-19, anunció este viernes el senador Renan Calheiros.
Calheiros, relator de comisión parlamentaria de investigación (CPI), detalló que el próximo martes presentará su trabajo final con 11 acusaciones contra Bolsonaro además de decenas de funcionarios, ex funcionarios y aliados del Gobierno que según el participaron en el manejo legal e ilegal de las políticas públicas contra la pandemia.
“Estas acusaciones significan que el presidente no cumplió con su deber legal de evitar la muerte de miles de brasileños durante la pandemia. Por ejemplo, no hay dudas de que hubo un genocidio contra los indígenas en el manejo de la pandemia”, dijo Calheiros a la radio CBN.
Los cargos contra el presidente deben ser elevados al Procurador General de la República y al Supremo Tribunal Federal mientras que personas sin fueros deberán ser acusadas por el Senado -que tiene poder de policía investigador- ante la justicia federal de primera instancia.
La comisión reveló -en base a testimonios públicos- un plan de un gabinete paralelo sanitario colmado de médicos negacionistas, que apoyaban a los médicos para que prescriban hidroxicloroquina y otros remedios supuestamente preventivos sin eficacia contra el Covid-19 con el objetivo de combatir las cuarentenas y mantener la economía funcionando.
El general Eduardo Pazuelo, exministro de Salud y asesor presidencial, será también acusado por su rol en Manaos, estado de Amazonas, enviando estos remedios sin eficacia en diciembre y enero, cuando colapso el sistema por la falta de oxígeno en los hospitales, causando muertes de pacientes por asfixia.
Brasil llegó el viernes pasado a los 600.000 muertos por la pandemia y se encuentra en los niveles más bajos, con actividades siendo retomadas a raíz del avance de la vacunación, que ha inmunizado al 46% de la población con el esquema completo y más del 70% con la primera dosis.
El miércoles, Bolsonaro dijo que no se vacunará contra el coronavirus argumentando -falsamente según los médicos- que está inmunizado por los anticuerpos que posee tras haber sido víctima de la pandemia en agosto de 2020.
El mandatario firmó un decreto para mantener por secreto durante 100 años su cartilla de vacunación personal.
Según Calheiros, los delitos de Bolsonaro que deberá presentar la CPI son: crimen de epidemia con resultado de muerte, crimen de infracción a las medidas sanitarias preventivas (luchar contra el barbijo y aglomerar), empleo irregular de dinero público, incitación al delito, falsificación de documentos, charlatanismo, prevaricato, genocidio de indígenas, crimen contra la humanidad, crimen de responsabilidad del cargo y crimen por homicidio por omisión durante el enfrentamiento a la pandemia.
El martes el informe deberá ser leído en el Senado luego de casi cinco meses de investigación de la comisión, que el miércoles deberá votarlo.
Con información de Télam.
IG