Estados Unidos anunció hoy que reactivará las sanciones al sector del petróleo y gas de Venezuela luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) del país latinoamericano mantuviera la inhabilitación política de la opositora María Corina Machado. “Estados Unidos no renovará la licencia” informó el vocero del Departamento de Estado, Matthew Miller, en un comunicado oficial, en referencia a la medida que brinda alivio al sector petrolero y gasolero que expira el próximo 18 de abril.
La medida adoptada por el gobierno de Joe Biden responde a la “falta de avances” en materia de diálogo entre Maduro y sus representantes y la oposición rumbo a los comicios que deberían celebrarse en el segundo semestre del 2024. Según la administración norteamericana, persisten obstáculos para “permitir que todos los candidatos presidenciales compitan en las elecciones de este año”.
Además, el anuncio se dio conocer horas después de que la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro diera de plazo hasta el 13 de febrero para “liquidar cualquier transacción” pendiente con Minerven, la minera estatal de extracción de oro de Venezuela. Ahora, entonces, Washington reimpuso las sanciones al petróleo, gas y oro en Venezuela, un paso con el que ya había amenazado el pasado sábado.
El año pasado, el Gobierno y la oposición del país latinoamericano habían firmado un acuerdo en Barbados y, en octubre, Estados Unidos accedió a aliviar las sanciones contra Venezuela. Sin embargo, condicionó la continuidad de dicha medida a la liberación de prisioneros bajo el régimen de Maduro, entre los que hay estadounidenses “detenidos injustamente”, y la celebración de elecciones libres.
El línea con las condiciones impuestas por el gobierno de Biden, a fines del 2023 se logró un canje de presos. En diciembre, Venezuela liberó a más de 20 de sus propios ciudadanos y a 10 estadounidenses a cambio de la libertad de un funcionario de Maduro y la extradición de un empresario malayo buscado por Estados Unidos.
Pese a esta negociación, la situación continúa siendo insuficiente para Estados Unidos. Por un lado, la decisión judicial contra Machado ─que se suma también a otra contra el excandidato Henrique Capriles─ alentaron la reimposición de las sanciones. Por otro lado, en los últimos días, 36 personas fueron detenidas, entre civiles y militares, luego de que las autoridades venezolanas las acusaran de estar vinculados con cinco “conspiraciones” para asesinar a Maduro. Entre los arrestados, había tres colaboradores de Machado.
“Las acciones de Nicolás Maduro y sus representantes en Venezuela, incluido el arresto de miembros de la oposición democrática y la prohibición de que candidatos compitan en las elecciones presidenciales de este año, son inconsistentes con los acuerdos firmados en Barbados”, se quejó Miller, informó la agencia de noticias AFP.
El TSJ, de línea oficialista, selló una inhabilitación política por 15 años contra Machado, que ganó con comodidad las elecciones primarias de la principal alianza opositora. “Maduro no va a escoger el candidato de la gente, porque la gente ya escogió su candidato”, respondió ella luego de que se conociera la resolución.
Para Washington, el acuerdo de Barbados “sigue siendo el mecanismo más viable para resolver la crisis política, económica y humanitaria de larga duración de Venezuela y celebrar elecciones competitivas e inclusivas en Venezuela”.
Pero esto requiere que “Maduro y sus representantes respeten los principios de la hoja de ruta y garanticen que los actores políticos de la oposición tengan el derecho a elegir libremente a sus candidatos para las elecciones presidenciales de 2024”, que deberían celebrarse durante la segunda mitad del año, añadió el vocero del Departamento de Estado estadounidense.
El Ejecutivo de Maduro rechazó la reimposición de las sanciones y las consideró un “grosero e indebido chantaje y ultimátum” de parte de la administración demócrata. “Si dan el paso en falso de intensificar la agresión económica contra Venezuela, a pedido de los extremistas lacayos en el país, a partir del 13 de febrero quedarían revocados de manera inmediata los vuelos de repatriación de migrantes venezolanos”, advirtió la vicepresidenta Delcy Rodríguez en un mensaje en su cuenta de la red X (ex Twitter).
Además de la liberación de presos, Washington y Caracas acordaron en octubre pasado la repatriación de venezolanos. Desde entonces 15 vuelos salieron desde territorio estadounidense hacia Venezuela, en el marco del plan “Vuelta a la patria”.
“Venezuela, inspirada en su gloria y dignidad histórica, seguirá su empeño por recuperar la economía venezolana con esfuerzo propio en unión nacional”, agregó la segunda de Maduro.
ACM con información de Télam