El presidente Alberto Fernández solicitó ante la cumbre de Jefes de Estado de los Brics que la Argentina sea “miembro pleno” del grupo que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, y convocó al “cese de hostilidades” en Ucrania.
“Aspiramos a ser miembros plenos de este grupo de naciones que ya representa el 42% de la población mundial y el 24% del producto bruto global”, planteó este viernes el mandatario argentino en la XIV Cumbre de los Brics.
En ese sentido, expuso las razones: “Somos proveedores seguros y responsables de alimentos, reconocidos en el ámbito de la biotecnología y en tecnología logística aplicada. Esto significa que no solo somos capaces de producir y exportar alimentos. También sabemos suministrar servicios y formar especialistas para que otros países hagan crecer su eficiencia productiva y mejoren así la calidad de vida de sus habitantes”.
“Todo esto lo hacemos lidiando con las dificultades propias de un país en desarrollo signado por una pesada deuda”, apuntó Alberto Fernández contra la gestión de Mauricio Macri por la deuda contraída con el FMI, pero reconoció: “Necesitamos mejorar nuestra infraestructura, diversificar nuestra matriz productiva, aprovechar las nuevas industrias como generadores de nuevos empleos y aumentar así nuestras exportaciones”.
A su vez, subrayó: “Quiero acabar con la pobreza extrema en mi país que es parte de un continente, que hoy tristemente se exhibe como el continente más desigual del mundo”
En esa línea, el jefe de Estado indicó que “ni el trigo ni los alimentos pueden convertirse en un arma de guerra” y sostuvo que “la paz es urgente porque es urgente hacer un mundo más igualitario”.
“Quiero alzar mi voz para que el mundo entero entienda que aunque la guerra se libre en Europa, sus consecuencias trágicas repercuten en América Latina y el Caribe, en África y en todo el hemisferio sur. Somos la periferia que padece”, expresó en su exposición virtual de cinco minutos.
De esta manera, pidió que “cesen las hostilidades” en Ucrania: “Queremos ser parte en la búsqueda de una solución que acerque a todos los involucrados, para lograr una paz duradera que deje definitivamente atrás la dinámica desatada por la escalada bélica”.
Por último, solicitó “concentrar esfuerzos en el diseño de una arquitectura financiera mundial que tenga en cuenta las necesidades del crecimiento, del comercio, de la inversión y fundamentalmente, del bienestar que la humanidad reclama”. También planteó la necesidad de crear una Agencia Calificadora del Riesgo Internacional, que “ponga en manos públicas lo que hoy está en manos de intereses privados”, y poner “en debate las pautas que determinan la asignación general de Derechos Especiales de Giro del FMI”.
“El desarrollo debe ser el nuevo nombre de la paz. Y la paz debe ser hoy el nuevo nombre del desarrollo”, concluyó Alberto Fernández.
DL