Poco después de que el fiscal Diego Luciani pidiera 12 años de prisión al considerarla jefa de una asociación ilícita, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner hizo su descargo en su cuenta de Twitter y aseguró que está frente a un “pelotón de fusilamiento mediático-judicial”.
“Si algo faltaba para confirmar que no estoy ante un tribunal de la Constitución, sino ante un pelotón de fusilamiento mediático-judicial, es impedirme el ejercicio del derecho de defensa ante cuestiones que nunca figuraron en el acto de acusación del fiscal al que asistí durante 5 días en mayo de 2019”, dijo la vicepresidenta al referirse a la actuación de Luciani en la causa en que es investigada por la adjudicación de obra pública a la empresa de Lázaro Báez.
Fernández de Kirchner adelantó que mañana a las 11, también en sus redes sociales, va a “demostrar por qué me están prohibiendo hablar en el juicio después del obsceno guión que montaron los fiscales”.
Se refería así a la decisión del Tribunal Oral Federal 2 de rechazar su pedido de ampliar la declaración indagatoria. Según los jueces, esa posibilidad sólo es posible antes que comiencen los alegatos.
Además del pedido de prisión, Luciani reclamó la inhabilitación perpetua para ejercer cargos público e investigar la participación de su hijo Máximo en la supuesta asociación ilícita.