Aliado con La Cámpora y la UCR, Weretilneck ganó en Río Negro y se despegó de la Casa Rosada

Alberto Weretilneck ratificó su poderío en Río Negro y este domingo volvió a la gobernación tras cuatro años como senador nacional. Ganó las elecciones provinciales como líder de una alianza de fuerte tinte local que contó con el apoyo explícito tanto del kirchnerismo como del radicalismo.

Flamante mandatario electo, se despegó de la Casa Rosada y del derrotero del Frente de Todos, pese a que tenía a su lado al también senador Martín Doñate, referente de Cristina Fernández de Kirchner en la provincia patagónica y de La Cámpora. “A nivel nacional cada uno tiene sus propias ideas. Nuestro proyecto provincial no está supeditado a lo nacional”, dijo en su primera conferencia la noche del domingo en Cipolletti, ciudad de donde es oriundo.

“Hoy no tenemos ninguna definición sobre el caso nacional. Martín sí es integrante y tendrá su propia definición, igual con los amigos del radicalismo”, abundó el todavía legislador, que en la Cámara alta aportó más de una vez a que la vicepresidenta consiguiera el quórum para avanzar con leyes de su interés.

Al tomar el micrófono, Doñate fue más que explícito sobre su pertenencia política: “Quiero agradecer, en mi caso particular, a mi conducción nacional: a Cristina Fernández de Kirchner, a 'Wado' de Pedro y a Máximo Kirchner, que tuvieron una generosidad muy grande y por supuesto siempre han dejado un mensaje de acuerdo a este compromiso que asumimos con los rionegrinos y las rionegrinas”.

Con casi el 80 por ciento de las mesas escrutadas, Weretilneck sumaba 40,33% de los votos, superando por casi veinte puntos al cambiemita Anibal Tortoriello. El diputado macrista recolectaba 24,24% de los votos con el armado local de Juntos por el Cambio, pero sin el sello de la UCR. Tercera se ubicaba Silvia Horne, dirigente del Movimiento Evita de Emilio Pérsico, con 10,95 puntos.

'Hoy no tenemos ninguna definición sobre el caso nacional. Martín (Doñate) sí es integrante y tendrá su propia definición, igual con los amigos del radicalismo'

La fuerza de Weretilneck ganó en todos los municipios rionegrinos donde hubo definiciones para las intendencias. Gracias al acople con el kirchnerismo incluso ganó en General Roca, otra de las ciudades importantes de la provincia y terruño de los Soria. De hecho, allí fue reelecta meses atrás María Emilia Soria, quien en marzo pasado se mostró junto al presidente Alberto Fernández.

El arrollador triunfo del oficialismo rionegrino contrastó con un tibio festejo en Bariloche, la localidad más grande de la provincia, que tendrá comicios locales recién en septiembre. La emblemática ciudad turística es también cuna de la actual gobernadora Arabela Carreras. La mandataria llegó al frente de la provincia de la mano de Weretilneck pero que últimamente quedó relegada de su círculo de confianza.

La ausencia de la mandataria apenas llamó la atención en el local partidario de Juntos Somos Río Negro en Bariloche. En un espacio propio muy próximo al Centro Cívico, se celebró el regreso de Weretilneck al poder con música y globos y guirnaldas del característico color verde partidario.

“La gobernadora tiene la responsabilidad de gobernar hasta el 10 de diciembre. No vamos a involucrarnos en ninguna toma de decisiones. Obviamente si somos consultados daremos nuestra opinión”, avisó el ahora gobernador electo.

Desde hace tiempo la provincia atraviesa múltiples crisis sin resolución. Hay conflictos salariales abiertos con los docentes y los policías, y sigue latente la problemática por algunos territorios que reclama la comunidad mapuche. A principio de año se abrió una mesa de diálogo con el Gobierno tras un operativo represivo del Comando Unificado en Villa Mascardi –localidad cercana a Bariloche–, que terminó con la detención de siete mujeres y varios de sus hijos. Será uno de los temas de la próxima agenda de Weretilneck como gobernador.

Ahora de salida en el cargo, Carreras sintió como un balance de su gestión el veredicto de las urnas. “La gente nos ratifica y pone a nuestro líder, Alberto Weretilneck, nuevamente en la gobernación”, afirmó. “Weretilneck tiene la oportunidad de gobernar mejorando lo que no hemos logrado hacer y proponiendo hacia el futuro”, completó.

Weretilneck retorna así al cargo que ocupó entre 2012 y 2019, aunque en los últimos cuatro años siguió siendo el jefe político de la provincia, según recogió elDiarioAR en contacto con sus contrincantes. El senador llegó al poder siendo el vice de Carlos Soria, quien murió apenas semanas después de asumir el 10 de diciembre de 2011 por un disparo por parte de su esposa. Encabezaba el primer gobierno no radical en la provincia desde 1983. Con su tercer mandato, el legislador va a completar 16 años en el poder.

MC