El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, felicitó esta noche a Cristina Fernández de Kirchner por su proclamación como presidenta del Partido Justicialista (PJ). Lo hizo a través de un tuit: “Felicito a @CFKArgentina y a todos los compañeros y compañeras de la lista de Primero la Patria por este nuevo desafío al frente del Partido Justicialista”. Cristina asumirá formalmente el cargo el 17 de noviembre y reemplazará en la conducción del partido a Alberto Fernández, quien renunció como consecuencia de la denuncia por violencia de género que presentó en su contra su expareja Fabiola Yáñez.
Este sucinto tuit de Kicillof fue su primera alusión del gobernador a la interna partidaria, de la que había permanecido prescindente tras haberse enterado, sin que le avisaran, de la candidatura de CFK a presidenta del PJ, el mes pasado.
Hasta entonces, a Kicillof se le atribuyó apoyo al rival fallido de Cristina, el gobernador riojano, Ricardo Quintela. El cristinismo, por eso, venía reclamándole a viva voz al gobernador bonaerense —ministro de Economía de CFK y uno de de los referentes nacionales del kirchnerismo, pero ahora enfrentado con el núcleo duro de CFK, La Cámpora, y su líder, Máximo Kirchner— que apoyara públicamente a la expresidenta en su disputa interna contra Quintela. Kicillof nunca lo hizo. Pero esta noche, horas después de que CFK fuera proclamada por la junta electoral partidaria, finalmente decidió salir con un breve tuit de salutación.
El tuit de Kicillof llegó varias horas después de que Cristina le mojara la oreja al visitar Avellaneda para reunirse con representantes de pequeñas y medianas empresas de la provincia de Buenos Aires. La elección del municipio no fue casual, ya que es gobernado por Jorge Ferraresi, principal impulsor del salto nacional de Kicillof. Ferraresi y Cristina están actualmente enemistados, y esta es la segunda visita de la exmandataria a Avellaneda en menos de un mes.
Kicillof, por su parte, buscó concentrarse en la gestión y lanzó una convocatoria a intendentes opositores para firmar un reclamo conjunto a la Casa Rosada por obras y recursos demorados.
La visita de Cristina a Avellaneda y su proclamación como presidenta del PJ no resuelven el conflicto político del peronismo. Según una fuente cercana a Kicillof, la visita de Cristina busca “enderezar” y “reordenar” al espacio, pero muchos ya no responden a su conducción. De hecho, excluido de la disputa por la presidencia del PJ, Quintela avisó que formará una línea interna en el partido, Federales, que se opondrá al peronismo kirchnerista.
JJD