Macri, en Rosario: “La Argentina necesita un shock de orden”

–Macri, ¿va a ser candidato?

–Hoy no he venido a hablar de eso acá.

Mauricio Macri respondió serio cuando escuchó la primera pregunta en la conferencia de prensa. Acababa de bajarse del escenario en el salón Metropolitano en Rosario para presentar su libro “Para qué”. Aunque su narrativa fue de campaña, evitó cualquier mención explícita sobre su futuro electoral, luego de una larga gira por Europa.

“Cuando ganemos en diciembre…”, fue tal vez una de las pistas que dio en su exposición, aunque su frase se interrumpió cuando el público lo cortó con  aplausos en el evento organizado por la Fundación Libertad, que tiene como exponente global al Nobel Mario Vargas Llosa. Si no es candidato, Macri oficiará al menos un rol de “ordenador”. En Rosario se enfocó en marcar algunos lineamientos sobre cómo tendría que ser un hipotético gobierno de Juntos por el Cambio y cuestionó muy fuerte al kirchnerismo.

“La Argentina necesita un shock de orden. Y todos tenemos que entender que hay una ley, y que no se puede sacar ventajas”, dijo Macri al exponer sobre su segundo libro, en diálogo con el periodista Marcelo Fernández y el titular de la Fundación Libertad, Gerardo Bongiovanni, que lo presentó como “presidente” y “amigo”.  “En JxC estamos mucho mejor que en 2015. Fue una cosa aluvional, nos juntamos un minuto antes de la elección”, admitió, para luego recordar su frustrado intento de reelección. “Nos llevó mucho tiempo de convivencia interna y perdimos potencia para el cambio. Y la sociedad no estaba preparada para eso”, aseguró. “Nos tiraron 14 toneladas de piedras. Tiren más, vamos a ir para allá. Y no pararemos hasta que este país cambie profundamente”, arengó Macri al público, intentando demostrar que si la oposición llega a la Casa Rosada su actitud será distinta a la de su gestión.

Frente a él lo escuchaban los referentes cambiemitas locales, como el diputado de PRO Federico Angelini –que organizó su visita-, y los legisladores radicales Maximiliano Pullaro y Carolina Losada. Macri llegó a Rosario acompañado por el diputado Cristian Ritondo y su ex funcionario Fernando de Andreis. Con ellos mantuvo una reunión clave antes de su presentación, donde el anfitrión fue el intendente socialista Pablo Javkin. El PRO, la UCR y el PS están en pleno armado de un “frente de frentes” para disputarle las elecciones al peronista Omar Perotti en un acuerdo opositor que Elisa Carrió dinamitó durante el fin de semana, luego de acusar al socialismo de ser cómplice del narcotráfico. “Ella es una militante de la política y podrá explicar ella misma lo que hizo”, se refirió sobre sus dichos en la conferencia de prensa.

Macri también cuestionó al “círculo rojo”: dijo que “está contaminado” y poco “dispuesto a competir”. “Piensa que su capacidad es ir a 'lobbyar' por los pasillos de los ministerios”, le recriminó a los grandes empresarios. “Desde el sector público tenemos que poner las reglas y que ellos crean e innovan y generen trabajo”, les tendió una mano luego.

En una ciudad gravemente afectada por la violencia narco, Macri recordó que durante su gestión Patricia Bullrich envió 3.000 gendarmes a la ciudad, tal vez el único guiño que dio hacia la interna abierta en el PRO entre la ex ministra y Horacio Rodríguez Larreta. “Pusimos al narcotráfico en retroceso”, aseveró. “Vinimos con Patricia y la Gendarmería. Y llevamos los presos a las cárceles de Buenos Aires. Dejamos estas estupideces de que la fuerza de seguridad es la culpable. Gracias por cuidarnos gendarmes”, agregó.

Luego la arremetió contra el kirchnerismo. Habló de “populismo”: “Seremos los primeros en sacarnos el populismo de encima. No nos tragamos más estos progres falsificados que dicen qué es lo políticamente correcto”, apuntó, y entonces acusó a Cristina Fernández de Kirchner de confundir a la sociedad: “¿Hay proscripción o no hay proscripción? Por repetir logran un nivel de confusión tremenda. Se pelean con información científica y destruyen la información, y genera un daño enorme”.

“Ellos creen que son los dueños de la Argentina y de nuestras vidas. Pero no transamos más y no les tenemos miedo”, abundó sobre el Gobierno. Y en ese marco hizo un pedido que sonó puertas adentro: “Los dirigentes tienen que tener los huevos que hay que tener para animarse a destrabar estas mafias que nos han atrapado”.

MC