Los “porqué no” a la suma fija y la triple agenda de Alberto y Massa
Antes de salir de Buenos Aires, el presidente Alberto Fernández firmó el decreto para operativizar el bono para indigentes y archivó, en sintonía con el ministro de Economía, Sergio Massa, el reclamo de la Vicepresidenta de un plus salarial parar trabajadores. Amplió sesiones ordinarias para que se traten tres proyectos del Ejecutivo.
El reclamo de Cristina Kirchner para que Alberto Fernández disponga, por decreto, una suma fija para todos los empleados registrados parece condenado al naufragio.
No es una decisión autónoma, el Presidente lo consensuó con el ministro de Economía, Sergio Massa, de quien tomó, de hecho, uno de los argumentos para el no: que aplicar esa medida podría poner en crisis a gran parte de los municipios del país.
Ese expediente fue uno de los que estuvo en el temario de la reunión que el lunes mantuvieron en Casa Rosada, Fernández, Massa y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, con intendentes del conurbano. El encuentro lo acordó Martín Insaurralde, jefe de Gabinete bonaerense, directamente con el Presidente.
La advertencia de los alcaldes resultó, hasta acá, más determinante que el planteo de Cristina que sostiene que el atraso salarial requiere una intervención del Gobierno. En su discurso en el plenario de la UOM, en Pilar, Cristina usó como fundamento la comparación entre la evolución de la productividad de las empresas y del empleo. La primera creció mucho más que la segunda.
Los porqué
“El 70% de los trabajadores que cobran menos de 100 mil pesos son trabajadores municipales que tienen salarios bajos, poner una suma fija sería impagable para muchos municipios”, explicó una fuente oficial. Ese dato aparece entre los porqué no de una suma fija.
Pero no es el único: argumentan, además, la objeción de los gremios que dicen que una suma fija “desordena” las paritarias. Y agregan también la cuestión del hipotético recalentamiento de la Economía producto de inyectar más dinero al consumo, factor que presionaría sobre la inflación.
En sectores del Frente de Todos apareció la propuesta de una suma fija solo para trabajadores privados. No hubo, por lo pronto, avance con eso tampoco.
“Hay sectores de Diputados que piden cambios específicos y de ese modo podría avanzar”, explicó una fuente oficial. Señaló, en particular, al bloque provincial que comparten cordobeses, lavagnistas y socialistas, y que estarían dispuestos a acompañar en la medida que la renta extraordinaria se aplique, como en algunos países europeos, para sectores específicos como alimenticias y energéticas.
Desde que se presentó, la propuesta de Guzmán casi no tuvo impulso, quizá porque, como dijo una fuente oficial, “era un proyecto de Guzmán”. El ex ministro estaba en la mira crítica de Cristina y de Massa.
Ahora, se afirma, están alineados los planetas para que el FDT lo promueva.
Para que haya tiempo para esos debates, antes de volar a Francia, el presidente firmó el decreto para ampliar hasta el 30 de diciembre las sesiones ordinarias del Congreso. Tiempo habrá: lo que no está claro es si habrá clima y votos.
Aunque, a priori, Fernández no tiene pautado incluir el tema renta inesperada en los discursos que dará durante la gira, no parece improbable que aparezca en alguna ronda porque Fernández fue uno de los presidentes que en distintas cumbres internacionales defendió ese tipo de normas.
PI/MG
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