Como antesala de lo que será la marcha del próximo 23 de abril en defensa de las universidades públicas, médicos, estudiantes, docentes y pacientes realizaron este jueves un “abrazo solidario” frente a las puertas del Hospital de Clínicas que depende de la Universidad de Buenos Aires. Hoy, su director, Marcelo Melo, detalló la situación del centro de salud: “Bajamos el funcionamiento del hospital al 30 o al 40%” y que las cirugías se redujeron a afecciones relacionadas con fracturas, infecciones y enfermedades oncológicas.
La protesta comenzó a las 10 de la mañana en sobre la Avenida Córdoba al 2300. Allí estuvo también el rector de la UBA, Ricardo Gelpi, quien también explicó la situación de los hospitales universitarios: “En enero y febrero se había pagado (partidas), pero a valores históricos. Este año nuestros hospitales no han recibido ningún recurso económico por parte del Gobierno nacional”. Y agregó: “Hay partidas asignadas pero no fueron depositadas”,
Gelpi reiteró cual es la situación presupuestaria de las universidades que pone en riesgo su funcionamiento: “En marzo asignaron el 70% de aumento para gastos de funcionamiento cuando la inflación interanual fue de aproximadamente, podemos discutir el número de 270%”
En diálogo con Radio Mitre, el director del Clínicas dijo esta mañana: “Tenemos el presupuesto congelado con una inflación del INDEC del 270%, pero la inflación de los medicamentos es del 1.000%. Nosotros el año pasado hacíamos licitaciones cuatrimestrales para comprar los medicamentos y se gastaban 4 o 5 mil millones de pesos para un cuatrimestre. Ahora eso aumentó el 1.000%”.
Como consecuencia del ajuste en las partidas destinadas al sistema educativo ordenado por el gobierno de Javier Milei, la gran mayoría de las universidades públicas del país se encuentran en una situación de emergencia financiera que pone en riesgo la continuidad de su funcionamiento a partir del segundo cuatrimestre de cursada. Es que el Gobierno decidió prorrogar para este año el presupuesto 2023 sin contemplar que la inflación interanual, tomando en cuenta la medición oficial de febrero último, superó el 270%.
Desde que comenzó el año lectivo las protestas no dejan de sucederse. Ayer por la noche, un masiva asamblea frente a la facultad de Psicología de la UBA, cortó la avenida Independencia al 3000. Allí, docentes, no docentes y estudiantes votaron participar de la marcha que se realizará el próximo 23 de abril.
En La Plata, ayer también se realizó un abrazo a las facultades de Psicología y de Humanidades y Ciencias de la Educación.
Pero las protestas tuvieron hoy también su repercusión en el ámbito privado. El centro de estudiantes de la Unión Argentina de la Empresa (UADE) llamó a movilizarse en defensa de la educación pública. En sus redes sociales difundieron un comunicado en el que señalan: “El martes 23 de abril el Movimiento Nacional Universitario se organiza para luchar en todo el país en defensa de la educación pública, laica y de calidad. Como estudiantes universitarios entendemos la preocupación que miles de compañeros sufren tras la amenaza de quedarse con sus estudios a mitad de camino en caso de que muchas facultades se vean en la necesidad de cerrar sus puertas”, Los estudiantes agregaron: “Lamentamos este momento histórico y si bien entendemos que no compartimos esta problemática, empatizamos y nos solidarizamos frente a la causa.
Pero mientras las expresiones en apoyo a la universidad pública se suceden –en estos días se conoció un video de apoyo en el que aparecen desde Juan Minujin hasta Fabiana Cantilo y Felipe Pigna–, el presidente Milei redobló este jueves su apuesta y habló de “lavado de cerebro” y “disonancia cognitiva” en una nueva crítica a la educación pública.
Tras la publicación del dato que revela que el 43,5% de los asalariados trabajan en la informalidad, el mandatario culpó a la educación pública de haber generado “disonancia cognitiva”, término que hace alusión a la tensión de ideas y creencias de una persona que tiene al mismo tiempo dos pensamientos en conflicto.
“Pero después uno intenta modernizar la legislación laboral y se ponen como locos... La disonancia cognitiva que generó el lavado de cerebro en la educación pública es tremendo...”, arremetió Milei a través de su cuenta de X. En la misma línea, agregó: “Es más, aún con el éxito rotundo que fue eliminar la ley alquileres siguen negando el resultado...”.