No quiere decir que ya no esté entre nosotros. Pero según el informe de un consorcio de científicos argentinos la nueva cepa del coronavirus descubierta en el Reino Unido “hasta octubre pasado no estaba en la Argentina”.
El estudio del Proyecto PAIS (Proyecto Argentino Interinstitucional de Genómica de SARS-CoV-2), consorcio interdisciplinario apoyado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología, analizó 512 secuencias de SARS-CoV-2 entre marzo y octubre.
A partir de este análisis de individuos pertenecientes a la Ciudad de Buenos Aires, gran Buenos Aires, Chaco, Córdoba, Río Negro, Neuquén, La Pampa, y Tierra del Fuego, “no se evidenció circulación de la variante B.1.1.7 en Argentina”, según el reporte difundido por la cartera científica.
Mariana Viegas, del del Laboratorio de Virología Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez , indicó que “hasta octubre de este año, de lo que hemos secuenciado, no hemos detectado esa variante en nuestra población” pero esto “no quiere decir que en un futuro cercano esta variante pueda ser detectada. Estamos trabajando sobre esto”.
La científica destacó que “no se demostró que (la nueva variante) tenga mayor capacidad de multiplicación o mayor virulencia. Se está estudiando si esta variante se encuentra presente en otras localizaciones y si estos cambios individuales o en conjunto afectan el fenotipo viral”.
Además de Reino Unido, esta variante del virus Sars CoV-2 fue detectada en Dinamarca, Países Bajos, Australia, Bélgica, Italia e Islandia, auqnue no se descarta que este presente en otros países.
La variante hallada pertenece al linaje B.1.1.7 y tiene como característica genética distintiva la presencia de mutaciones y deleciones, de acuerdo al análisis del consorcio.
Precisó que respecto a lo epidemiológico, “se observa un incremento en su proporción en la población. Algunos de esos cambios o deleciones se encuentran en sitios de la proteína S que pueden tener importancia en la transmisión o infección del virus”.
“Son mutaciones en la proteína, la mayor cantidad se vio asociada a la proteína Spike, que utiliza el virus para unirse a su receptor en la célula huésped. Este cambio no está demostrado in vitro, se está estudiando”, señaló Viegas sobre lo que se conoce sobre este virus y las falsas expectativas que despiertan en la población.
Ante esta nueva mutación, “es imprescindible reforzar las recomendaciones de distanciamiento físico y medidas de protección para limitar la propagación viral hasta la instauración de la vacunación masiva”, aseguró el reporte.
Y agrega que la emergencia de variantes virales “es un proceso natural de la evolución de los virus y su oportunidad de detección aumenta en cuanto se aumenta la vigilancia activa”.
Por lo que concluye en la necesidad de “aumentar los esfuerzos en la vigilancia molecular del SARS-CoV-2 en nuestro país”.
Destaca además la importancia del estudio “continuo de esta y otras variantes que pueden emerger en las poblaciones con consecuencias inciertas, especialmente relevantes ante la instauración de las campañas de vacunación inminentes.”
Con información de la agencia de noticias Télam