La escuela Carlos Pellegrini se sumó a las tomas de colegios en la ciudad de Buenos Aires y de esta manera ya son 12 los establecimientos afectados por las protestas de estudiantes. Se trata de la primera institución que no depende del gobierno porteño que es tomada por los alumnos.
Los estudiantes reclaman viandas, mejor infraestructura edilicia y se manifiestan en contra de las prácticas laborales en empresas. El gobierno porteño denunció penalmente el lunes a los padres de los chicos que mantienen la medida de fuerza y les reclamará $1,5 millón por cada día de protesta.
Entre los colegios tomados están el Lenguas Vivas “Sofía Esther Broquen de Spangenberg”, la escuela Federico García Lorca, Cerámica 1, el Osvaldo Pugliese, el Mariano Moreno y el Nicolás Avellaneda.
El reclamo de los estudiantes
Entre los reclamos de los alumnos que mantienen las tomas en colegios en la ciudad de Buenos Aires están las mejoras edilicias y la consigna “con hambre no se puede estudiar”, con el pedido de que se apruebe el proyecto de Ley Integral del Derecho a la Alimentación Adecuada en las Instituciones Educativas. La iniciativa la presentó la legisladora porteña del Frente de Todos Ofelia Fernández. Promueve la universalización y gratuidad de la asistencia alimentaria escolar, que las frutas y verduras sean producidas por cooperativas agroecológicas y la prohibición de que las empresas que fueron multadas por un mal servicio puedan proveer alimentos, entre otros puntos.
Los estudiantes rechazan las prácticas laborales obligatorias en empresas y organizaciones. Advirtieron desde actividades en un frigorífico “con numerosas denuncias por intoxicación” hasta intercambios de idioma en un hotel en el que afirman que los estudiantes terminaron cumpliendo otras tareas como lavado de vajilla.
NB