Una multitud de fieles participó en la tarde del sábado en la basílica de Luján de la ceremonia religiosa para celebrar los primeros 10 años del papado de Francisco y los 15 de la creación de los “Hogares de Cristo”, que impulsa el sacerdote José María “Pepe” Di Paola.
La misa fue presidida por el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Oscar Ojea, y “el padre Pepe” junto a medio centenar de curas villeros y de barrios populares con el lema “en unión y con alegría, junto al Papa Francisco, un argentino mundial”.
Presentado por el sacerdote, salió a las 20.30 al escenario Palito Ortega, de traje blanco y brillos, cantando su hit “Un muchacho como yo” para darle un cierre musical a la extensa jornada. “Bienvenidos hermanos a este encuentro de amor y familia”, pronunció mientras volaban papelitos color blanco y celeste y el público aplaudía al compás de “Bienvenido amor”.
Feligreses de distintas parroquias y organizaciones religiosas del Área Metropolitana de Buenos Aires concentraban en la rotonda del cruce de las avenidas Luján y Pellegrini, desde donde caminaron hasta la plaza frente a la basílica en un clima de fiesta popular en el que las canciones religiosas se mezclaban con las que la hinchada argentina cantaba durante el mundial de Qatar 2022.
En su tránsito hacia la basílica, la alegría de la multitud era acompañada por la música de los bombos y platillos de murgas como la del “Padre Daniel”, compuesta por niñas, niños y adolescentes de la villa 21-24 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que con sus trajes de lentejuelas blancas, azules y doradas animaban a todos a bailar mientras aguardaban el comienzo de la caminata.
La columna fue encabezada por una imagen de la Virgen de Luján que era transportada sobre una camioneta, y detrás de ella numerosos fieles portaban una extensa bandera argentina; cuando la procesión arribó a la Plaza Belgrano el cielo se tiño con el humo celeste de decenas de bengalas.
Eulogio Sosa, integrante del Movimiento Misionero de Francisco e impulsor de diversos merenderos y comedores comunitarios, fue el responsable de cargar sobre sus espaldas la imagen peregrina de la Virgen de Luján durante el ingreso a la basílica, y en diálogo con Télam apuntó: “por la Virgen voy caminando hasta Luján. Siempre me ayudo”. Entre los fieles eran muy comunes las remeras con las imágenes de la Virgen y del papa Francisco, y también camisetas de la selección argentina.
“Pepe” Di Paola afirmó que “el papa Francisco es el líder espiritual del mundo y también es aquel líder que cuando era obispo nuestro nos dio un apoyo muy grande para poder hacer que los 'Hogares de Cristo' sean una realidad; él bendijo el primer Hogar de Cristo que empezó en la villa donde yo estaba y luego fue bendiciendo otros hogares”.
Y agregó: “Hoy en día se replicó por todo el país y tenemos 200 centros barriales haciendo un abordaje en el territorio y en las adicciones, dándoles esperanza a muchos jóvenes y familias; el lema de este año 'Ni un pibe menos por la droga' lo elegimos porque nos pareció muy inclusivo, sirve para el maestro, el catequista, el que dirige el deporte, el que está en un medio de comunicación, nosotros que estamos en la recuperación de los chicos, todos podemos hacer algo en la prevención y la recuperación. También se lo planteamos a la dirigencia política como un desafío que tienen frente a las elecciones, hacer que cada candidato pueda trabajar frente a este tema tan importante”.
“En los sectores más populares que hoy están acá encontramos la esperanza de la Argentina”, subrayó el religioso.
Con una botella de agua en una mano, un termo en la otra y su hábito franciscano a pesar del calor, Martín Casarti viajó desde la localidad salteña de Aguaray para participar de la Celebración y dijo a Télam: “vinimos a celebrar los 15 años de los hogares de cristo y los 10 del papa Francisco; venimos a celebrar la vida y que somos muchos los que queremos sacar a los pibes del consumo”. “Francisco va a venir a la Argentina, lo esperamos”, concluyó.
Los fieles fueron recibidos por bandas musicales que interpretaron temas populares y religiosos, y por la banda del Regimiento de Patricios que interpretó el Himno Nacional Argentino.
Luego, una joven dio lectura al mensaje que el para Francisco envió para esta celebración en el que afirma: “hace un año empezaron una peregrinación que fue una caravana de esperanza, un camino que sólo se puede recorrer si lo hacemos juntos; con sus voces nos recordaron que todos somos responsables de que nuestros chicos y chicas le digan no a la droga. Los aliento a no dejar de ser una Iglesia en salida, misionera, que lleva el evangelio a cada lugar que lo necesite; sigan en este camino, que Jesús los bendiga y la Virgen santa los cuide. Fraternalmente Francisco”.
Cerca de las 19, antes de comenzar la misa el padre “Pepe” dijo a los presentes que “en el hogar de Cristo aquel que estaba descartado hoy está de pie y está ayudando a otro”, y tras largos aplausos de los fieles completó: “en el caminar del hogar de cristo despertamos la esperanza, acá en el santuario de la Virgen, y queremos que otros se contagien de este espíritu”.
Durante la celebración religiosa, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, afirmó: “hemos cumplido 15 años, descubrimos que el verdadero poder es el servicio. Y el sentido de nuestra vida”.
“Una costumbre de Jesús era el lavar los pies de los amigos y discípulos; él se arrodilla delante de cada uno porque sabe que tenemos dignidad, por eso queremos poner nuestros pies delante de cada hermano”, expresó Ojea antes de lavar los pies de fieles que se encontraban arriba del escenario.
Luego de la misa, en la plaza Belgrano frente a la Basílica tuvo lugar un cierre musical con las actuaciones de los artistas Ramón “Palito” Ortega y Nahuel Pennisi.
La marcha hacia la basílica fue la finalización la Peregrinación de la Virgen de Luján, Patrona de la Argentina, que bajo el lema #NiUnPibeMenosPorLaDroga fue organizada por la Familia Grande Hogar de Cristo, Cáritas Argentina y la Unión de Clubes Parroquiales.
La peregrinación culminó una caminata que se había iniciado el 7 de agosto, fiesta de San Cayetano, y celebra su final en coincidencia con los 15 años del nacimiento del Hogar de Cristo y los 10 años de pontificado del Papa Francisco.
La federación de Hogares de Cristo agrupa a centros barriales que asisten a poblaciones vulnerables y con consumos problemáticos, y coordinó la marcha que recorrió más de 15.200 kilómetros del país, visitando escuelas, cárceles, clubes, comunidades originarias, hospitales, centros barriales, granjas, hogares de abuelos y cotolengos.
En la actualidad, hay más de 190 centros barriales en 19 provincias argentinas, por los que ya pasaron y fueron asistidas más de 20.000 personas, según informaron desde la federación.
MB con información de agencia de noticias Télam