El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha convocado para este miércoles a los presidentes y las presidentas de las comunidades autónomas para analizar “la evolución de la pandemia”, con los contagios disparados en los últimos días y una incidencia por encima de los 500 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, y estudiar “medidas compartidas” para hacerle frente a 48 horas de Nochebuena.
“Vamos a compartir, como siempre, las medidas con los presidentes autonómicos”, dijo este domingo Sánchez. Una unidad que ya habían reclamado el presidente vasco Iñigo Urkullu, que había pedido al Ejecutivo “medidas comunes” para afrontar el aumento de contagios a las puertas de navidad. O el gallego Alberto Núñez Feijóo, que este fin de semana reclamó “una misma posición común a toda España” sobre las cuarentenas de contactos estrechos, algo en lo que esperaba que avanzase el Consejo Interterritorial de Salud esta semana, pero que presumiblemente se abordará en la Conferencia de Presidentes. Tras el anuncio de Sánchez, el barón 'popular' ha pedido “avanzar” antes del encuentro para que de la cita del miércoles salga “alguna propuesta para los ciudadanos”, en forma de recomendación o como medida obligatoria.
En la cita del miércoles, el presidente valenciano Ximo Puig defenderá una acción “lo más coordinada posible”, mientras su homóloga balear, Francia Armengol defenderá las medidas de las islas “dispuesta a escuchar” otras propuestas. El presidente cántabro Miguel Ángel Revilla ha valorado que “todo lo que sea actuar de manera coordinada para buscar soluciones es bienvenido” y que las medidas contra esta sexta ola deben ser comunes. “Que no haya ninguna autonomía que se las salte”, ha dicho. Y el canario Ángel Víctor Torres ha abogado por “una unidad de acción de todas las comunidades” en una convocatoria que “era necesaria”.
El murciano Fernando López Miras ha pedido también una “propuesta de coordinación”, a la vez que ha acusado a Sánchez de realizar este domingo “una intervención de palabras vacías” y se ha preguntado si “va a proponer algo” en la Cumbre de presidentes. Por su parte, la madrileña Isabel Díaz Ayuso ha advertido que no ordenará “cierres ni más prohibiciones”.
Con todo, en las últimas semanas muchas comunidades han ido solicitando el aval de la justicia para imponer el certificado COVID para acceder a determinados espacios, como la hostelería, el ocio nocturno o hospitales y residencias, entre otros. Con diferentes matices y duraciones, doce comunidades lo han implementado ya. Son todas salvo Asturias, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid. Más allá de eso, pocas han propuesto medidas más restrictivas. Baleares exige tres pruebas diagnósticas negativas a la semana a los profesionales sanitarios que no estén vacunados y Catalunya ha rescatado el aislamiento de contactos estrechos, pero salvo las, por el momento, recomendaciones de Canarias, Euskadi, Galicia y Navarra de limitar los grupos en casas durante las comidas de navidad, no hay más atisbo de restricciones.
Andalucía: con certificado COVID, salvo para trabajadores
Andalucía ha recibido el aval de su tribunal superior de Justicia para exigir el certificado COVID o una prueba diagnóstica negativa para acceder a la hostelería y a otros recintos culturales o recreativos. Esta medida, que lleva implantada desde el 7 de diciembre en residencias y hospitales, estará vigente hasta el 15 de enero, y no incluye a los trabajadores de esos espacios. Precisamente, el tribunal había echado atrás inicialmente la medida porque incluía a los empleados. Al quedar excluidos de este requisito, ya entiende que se da el criterio de proporcionalidad, porque los usuarios no están obligados a acudir a esos lugares. La Junta de Andalucía pidió a mediados de la semana pasada al Gobierno que recuperase la mascarilla obligatoria en exteriores.
Aragón, con cabalgatas más cortas en Huesca y Teruel
El Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha tumbado este jueves la pretensión del Ejecutivo regional de implantar el pasaporte COVID en hostelería, recintos deportivos, cines, espectáculos y eventos similares, aunque lo mantiene en bares y restaurantes para celebraciones con más de diez personas y para el ocio nocturno, los salones de juego y visitas a hospitales y centros sociales, así como para grandes eventos de más de 500 personas en espacios cerrados y de 1000 al aire libre. Por el momento, ya se ha previsto recortar el recorrido de las cabalgatas de Reyes de Teruel y Huesca y la consejería de Sanidad no descarta adoptar otras restricciones de movilidad y horarios.
Baleares exige tres pruebas a los sanitarios sin vacuna
En Baleares es necesario el certificado COVID para acceder a residencias de mayores, discotecas, bares, cafeterías y restaurantes con aforos de más de 50 personas y terrazas cubiertas hasta el 24 de enero y en Menorca también en cines, gimnasios y habitaciones compartidas. Además, el Ejecutivo balear ha recibido el visto bueno de la justicia para solicitar este documento también al personal sanitario. El 8% de estos profesionales que se niegan a inyectarse la vacuna deberán presentar tres pruebas diagnósticas negativas a la semana, de las que dos deberán ser PCR. En cualquier caso, no puede quedar ningún registro de esta situación ni emplearse la información para otros fines.
Canarias decide este lunes
El Consejo de Gobierno canario anunció este jueves su intención de pedir el aval judicial para que el certificado COVID sea obligatorio (hasta ahora era voluntario) y el viernes su pretensión de endurecer las restricciones de cara a las reuniones navideñas. Como viene siendo habitual en Canarias, las medidas, que se debatirán este lunes, responden al nivel de alerta de cada isla. Así, en Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura, las que presentan peor situación epidemiológica, las reuniones de no convivientes quedarían reducidas a un máximo de seis, aunque tengan el certificado COVID; el aforo en hostelería está limitado al 75% al aire libre y al 40% en interior y las mesas no pueden tener más de sis personas; no está permitido realizar fiestas; y está prohibida la venta y el consumo de bebidas alcohólicas en la calle. Puedes consultar todas las medidas aquí.
Cantabria, con las “mínimas” restricciones
Cantabria cuenta con el pasaporte COVID obligatorio para acceder a espacios donde se pueda consumir comida y bebida desde el viernes 10 de diciembre. Por el momento, el ejecutivo autonómico es “partidario” de mantener las “mínimas” restricciones, mientras apuesta por apurar la vacunación, a la que esta semana se han incorporado los niños de 5 a 9 años, y seguir manteniendo la “máxima precaución” frente al coronavirus. Además, este viernes la justicia tumbó el cierre anticipado del ocio nocturno en la región.
Catalunya confina a los contactos estrechos
En Catalunya es obligatorio presentar el pasaporte COVID para acceder a bares, restaurantes, discotecas, celebraciones, centros deportivos y residencias de mayores. La novedad aquí es que la Generalitat ha recuperado el confinamiento obligatorio, durante diez días, para quien sea contacto estrecho de alguna persona que haya dado positivo en una prueba diagnóstica. Esta medida, que había decaído con el avance de la vacunación, vuelve a estar en vigor desde este lunes.
La Comunitat Valenciana mantiene el certificado covid
Más allá del certificado COVID para acceder a locales de hostelería y de ocio de más de 50 personas, a eventos de más de 500 y a residencias, la Comunitat Valenciana, que cerró la semana con una incidencia de 565 casos, no ha implantado, por el momento, medidas adicionales de cara a la navidad. El número de clientes en mesas de ocio nocturno ya estaba limitado a una decena.
Euskadi pide medidas comunes
Con una incidencia por encima de los 1000 casos y la curva de contagios en ascenso durante las últimas once semanas, Euskadi ha optado por las recomendaciones. El Gobierno vasco ha pedido formalmente a los ayuntamientos que no organicen cabalgatas y a los ciudadanos que reduzcan al máximo la movilidad y las interacciones con grupos de no convivientes y que eviten reuniones en espacios cerrados. Lo que sí ha quedado por escrito, y con el aval de la justicia, es la ampliación desde el pasado miércoles del certificado COVID. Si ya era necesario para acceder a restaurantes de más de 50 personas y ocio nocturno, ahora lo es también para gimnasios, recintos deportivos, bares, hospitales, residencias y prisiones. El lehendakari Iñigo Urkullu ha pedido a Sánchez que se adopten medidas comunes.
Galicia, a la espera de comprobar el impacto del puente
Galicia ya contaba con el certificado COVID para acceder a hospitales, restaurantes y al ocio nocturno y a bares y cafeterías desde las 21 horas. Desde este viernes, este requisito se ha ampliado a gimnasios, instalaciones deportivas cerradas, piscinas cubiertas, grandes eventos y residencias. Además, desde finales de noviembre están limitados el número de personas en grupos en restauración y permanecen limitados los horarios del ocio nocturno. Aunque no es una obligación, la Xunta ha recomendado reducir el número de comensales en las comidas navideñas a un máximo de 10. En cualquier caso, Feijóo emplazó a principios de esta semana para comprobar el impacto de las interacciones durante el puente de la Constitución para analizar nuevas medidas.
Certificado voluntario para ampliar aforos en Murcia
El certificado es un requisito indispensable para acceder a los locales de ocio nocturno murcianos, mientras bares y restaurantes pueden decidir si lo piden, a cambio de contar con el aforo interior al 100%. En esta región, la incidencia es de 538 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.
Navarra recomienda unas navidades como las de 2020
La consejería de Sanidad navarra recomienda celebrar las navidades con las mismas restricciones que en 2020: diez personas de dos unidades de convivencia. Pero esto es una recomendación, porque las medidas implantadas por la comunidad foral, una de las que registra peores datos de incidencia, con 1367 casos, están lejos de asemejarse a las de las navidades pasadas. En concreto, ha puesto en vigor, desde el 27 de noviembre y hasta el 6 de enero, el certificado COVID que, en este caso, permite acceder a aquellos restaurantes y discotecas de más de 60 personas de aforo.
La Rioja
La Rioja ha optado finalmente por solicitar el aval de la justicia para implantar el pasaporte COVID. Con el visto bueno de su tribunal superior, la comunidad ya lo exige para acceder a locales de ocio nocturno, restaurantes, hospitales y residencias y grandes eventos al aire libre.
Sin pasaporte Covid ni otras medidas
Sin pasaporte COVID y, por el momento, sin ninguna otra medida adicional de cara a las navidades se encuentran Extremadura (333 casos de incidencia), Asturias (661), Castilla y León (822), Castilla-La Mancha (210) y Madrid (484). Castilla-La Mancha es la que registra la tasa más baja, pero Castilla y León supera con mucho los 511 casos del conjunto del país. El Principado baraja ahora solicitar el aval para exigir el pasaporte COVID para acceder a algunos lugares. En Madrid, donde vienen “semanas de muchos contagios”, según ha explicado su presidenta Isabel Díaz Ayuso, que ha ofrecido un test de antígeno a cada madrileño antes de los días previos a Nochebuena, no prevé “cierres ni más prohibiciones”
Con información de elDiario.es