Tras 22 días de ofensiva rusa, continúan las conversaciones en busca de un alto el fuego. Mientras el diálogo avanza, las tropas rusas se estancan y los bombardeos no cesan. Ambas partes reconocen que el acuerdo está más cerca, pero también se hace evidente qué les distancia en las negociaciones.
Además de la cuestión de la neutralidad de Ucrania y cuál será el modelo que se seguirá al margen de la OTAN, desde Kiev los esfuerzos se concentran en lograr el compromiso de varias potencias para que, en caso de una futura invasión, intervengan.
El asesor de Zelenski, Mikhail Podoliak, ha ahondado este jueves en cómo sería la alianza de países que reclamó Volodímir Zelenski en su discurso en el Congreso de EEUU. “Queremos poner fin a esta guerra construyendo una nueva alianza que sea lo suficientemente fuerte como para detener a Rusia si quiere atacar a alguien nuevamente”, ha dicho en una entrevista a un programa de noticias polaco.
Según el asesor, en las negociaciones buscan plasmar que el acuerdo sea lo bastante específico para recoger los mecanismos que se pondrían en marcha en caso de otro ataque contra Ucrania.
Queremos asegurarnos de que no vamos a quedarnos solos otra vez en el campo de batalla
“Queremos asegurarnos de que no vamos a quedarnos solos otra vez en el campo de batalla”. ha dicho sin querer desgranar quiénes serían los países participantes.
En otra entrevista concedida al medio independiente ruso Meduza, Podoliak ha dado más detalles sobre la implicación de varias potencias: “No será un acuerdo bilateral entre Rusia y Ucrania, será multilateral, un acuerdo en el que participarán varios países, cinco o siete, el número se está discutiendo”.
Según el Financial Times, esta propuesta ha pillado por sorpresa a los aliados occidentales, que cuestionan cómo funcionaría. “¿Cuál es la razón detrás de esto? ¿De qué estamos hablando? ¿Cuál es el punto en el que podrían estar de acuerdo?”, se pregunta un alto diplomático europeo citado por el diario británico, que cita también el testimonio de un alto cargo de Defensa estadounidense que asegura que su país no está involucrado en las negociaciones.
Según una fuente familiarizada con las conversaciones, Ucrania pide medidas comparables al artículo 5 del tratado de la OTAN, que establece que un ataque a cualquiera de los miembros de la alianza hará que el resto de países salga en su defensa, ya que será visto como un ataque a todos ellos.
El FT asegura que el objetivo de Kiev es que los cinco miembros permanentes del consejo de seguridad de la ONU (Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China y la propia Rusia) actúen como garantes junto con Alemania y Turquía. Esto daría la suma de siete países que Podoliak llegaba a mencionar en la entrevista al diario Meduza.
Una fuente gubernamental occidental reconoce al FT que esta materia ha sido “tema de conversación entre los socios internacionales”, pero asegura que hasta que no se “establezcan los términos” será difícil decir “sí o no”, saber cómo funcionaría y qué países formarían parte.
Podoliak ha aprovechado la entrevista al medio polaco para cuestionar la capacidad real de la OTAN, una vez que Ucrania ha admitido que no entrará en la Alianza. Ha asegurado que es una organización “sin fuerza” y “cuyo funcionamiento se limita a hacer cumbres en las que los generales ponen caras de peligro”.
La OTAN hoy no tiene fuerza. Es una organización que se limita a hacer cumbres en las que los generales ponen caras de peligro
Un tema a resolver “cara a cara”
El otro punto clave para Ucrania son los territorios ocupados por Rusia antes de la invasión. Rusia mantiene como condición que se reconozca la anexión de Crimea que llevó a cabo en 2014 y que se acepte la independencia de las “repúblicas populares” de Donetsk y Lugansk, que se rebelaron contra Kiev, situadas en la región oriental ucraniana del Donbás y reconocidas por Rusia antes de lanzar sus ataques.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha recordado este jueves que sus prioridades en las negociaciones “son absolutamente claras: fin de la guerra, garantías de seguridad, soberanía, restauración de la integridad territorial, garantías reales para nuestro país y protección real para nuestro país”.
El asesor presidencial Oleksi Arestovich ha especificado, en declaraciones a Reuters, que esto significaría que no se alteren las fronteras que se marcaron en 1991, año en el que cayó la URSS y se independizó Ucrania.
Tanto las regiones del Donbás como Crimea formaban parte de Ucrania en aquel entonces y siguen siendo reconocidas por las Naciones Unidas como parte de su territorio.
Mikhail Podoliak ha reconocido que este es uno de los temas claves en las “duras” conversaciones que se siguen manteniendo telemáticamente.
“Con respecto a los territorios ocupados, la posición de Ucrania permanece sin cambios: las fronteras del país no se pueden cambiar. Sin embargo, creo que debemos ser comedidos en nuestros juicios. Por derecho, Crimea, Donetsk y Lugansk siguen siendo parte de Ucrania, pero no los controlamos de facto, la administración rusa trabaja allí”, ha declarado a la cadena polaca.
Ha añadido que se están haciendo esfuerzos para encontrar una fórmula sobre “cómo deben gestionarse esos territorios” . Sin embargo, no ha dado más detalles sobre cuál sería y qué implicaría. “No puedo entrar en detalles porque eso podría frenar las negociaciones”, ha dicho.
Podoliak afirma que el acuerdo respecto a los territorios será discutido en última instancia por Putin y Zelenski en un encuentro “cara a cara”. Sobre la fecha de esta posible reunión entre los dos mandatarios, el asesor ucraniano explica que tendrá lugar cuando se redacten los términos y que esto será “en las próximas semanas”. En cuanto al lugar de la reunión, ha dicho que puede ser en cualquier parte “menos en Rusia”.
A este respecto, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha trasladado este jueves a Vladimir Putin una oferta para que se reúna en Turquía con el presidente de Ucrania con vistas a que ambos líderes acerquen posturas y puedan acordar un alto el fuego.
El negociador ucraniano también ha reiterado que ven “signos de predisposición” por parte de Rusia a alcanzar un acuerdo: “Puedo decir que la delegación rusa ha rebajado mucho el tono. Ahora son más objetivos y se comportan correctamente, aunque su visión del mundo sigue distorsionada por su propia propaganda”, ha declarado al medio polaco.
Podoliak también se ha atrevido a dar una previsión sobre cuándo podría estar listo un acuerdo de paz. “Por ahora ambas delegaciones mantienen sus posturas. Llegar a un acuerdo puede llevar desde unos pocos días hasta una semana y media. Durante este tiempo, deberíamos estar más cerca de la elaboración de un acuerdo de paz”, ha dicho.
Un ejército a la suiza
Durante la jornada del miércoles Rusia apuntó como una opción aceptable el modelo de neutralidad austriaco o sueco. Podoliak ha puesto como ejemplo en su entrevista a Meduza el modelo suizo “Este es el modelo óptimo para un país como Ucrania con un estatus neutral” y un ejército con “cierta cantidad de reservistas, con entrenamiento constante”. En Suiza, el servicio militar es obligatorio y los reservistas reciben entrenamiento militar periódicamente.
Por su parte, la delegación rusa afirma que está haciendo “grandes esfuerzos” en las negociaciones y acusa a Kiev de llevar un ritmo “pausado”.
“Veo que nuestra delegación está haciendo grandes esfuerzos y demostrando una disposición mucho mayor que la de nuestros homólogos ucranianos para llevar a cabo una negociación urgente. Nuestras condiciones son extremadamente claras, extremadamente detalladas y son comunicadas por completo a los negociadores ucranianos. Al mismo tiempo, sabemos que el estilo de negociación ucraniano es muy, muy pausado”, ha dicho el portavoz del Kremlin Dimitri Peskov en declaraciones recogidas por la agencia estatal RIA Novosti.