A nueve meses de la llegada de Javier Milei a la Presidencia de la Nación, la última encuesta de Satisfacción Política y Opinión Pública de la Universidad de San Andrés (Udesa) revela un panorama de descontento generalizado. Según el estudio, sólo el 35% de los encuestados está satisfecho con la marcha general del país, mientras que el 65% expresa su insatisfacción. Los bajos salarios, la pobreza y la inseguridad continúan siendo las principales preocupaciones de los argentinos.
La encuesta, realizada entre el 13 y 20 de septiembre de 2024, destaca que la percepción negativa se mantuvo constante en los últimos meses. El porcentaje de insatisfechos aumentó diez puntos desde la medición anterior, lo que refleja un crecimiento en el malestar de la población, en especial entre los votantes de Sergio Massa, donde el 93% se mostró insatisfecho. Por otro lado, los votantes de Milei son los más satisfechos, con un 62% aprobando la situación actual.
En cuanto a la segmentación por nivel socioeconómico, las clases más bajas presentan los mayores niveles de insatisfacción (71%), mientras que los sectores de mayores ingresos (ABC1) son los más conformes, con un 48% de satisfacción. A nivel generacional, los millennials (las personas nacidas aproximadamente entre 1981 y 1996) se destacan como los más descontentos, con un 72% de insatisfacción, una cifra que refleja la preocupación de los sectores más jóvenes ante la crisis económica.
El presidente Milei mantiene una aprobación del 46%, con un 51% de desaprobación, una tendencia que muestra estabilidad respecto a los meses anteriores. La brecha entre los sectores ideológicos es clara: entre los votantes de derecha, la aprobación se dispara al 84%, mientras que en la centroizquierda la desaprobación alcanza el 90%. Los votantes de Sergio Massa y Patricia Bullrich son los más críticos con la gestión, con un 92% y 80% de desaprobación, respectivamente.
El informe revela que los bajos salarios (37%) y la pobreza (36%) lideran la lista de preocupaciones de los argentinos. La delincuencia, el desempleo y la falta de confianza en los políticos completan el cuadro de angustias que atraviesan a la población. La inflación, que en julio se destacaba como uno de los principales problemas, ha perdido peso en la percepción pública, descendiendo al 27%.
Esta segmentación también muestra diferencias según la orientación política de los encuestados. Mientras los votantes de Unión por la Patria señalan los salarios bajos y la pobreza como los principales problemas, los votantes de La Libertad Avanza y Juntos por el Cambio priorizan la delincuencia y la corrupción.
La encuesta también mide la satisfacción con el desempeño de los distintos poderes del Estado. El Poder Ejecutivo, encabezado por Milei, lidera con un 31% de satisfacción, muy por encima de la Cámara de Diputados (13%) y el Senado (12%). No obstante, los niveles de insatisfacción con el Ejecutivo siguen siendo altos, con un 63%, aunque son considerablemente menores que los del Poder Legislativo, donde el descontento supera el 80%.
De cara al futuro, el informe arroja un dato preocupante: solo el 38% de los encuestados cree que la situación del país mejorará en el próximo año, una caída de cinco puntos respecto de la medición anterior.
JJD