Los casos de gripe aviar detectados en la Argentina son traídos por aves silvestres migratorias que llegan desde el hemisferio norte, donde es invierno. Así lo explicó Ximena Melón, directora nacional de Sanidad del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Cuando bajan a comer donde hay aves de corral, muchas veces criadas para consumo personal, es donde ocurre el contagio al compartir el mismo espacio, señaló Melón.
Por eso, el Senasa recomienda que cuando dan estas alertas, esas aves de corral sean encerradas y así evitar que circulen a campo abierto.
Los síntomas son de fácil reconocimiento: plumas erizadas y cuadros diarreicos.
La gripe aviar es una zoonosis, la cual puede transmitirse a los seres humanos pero de manera excepcional cuando son tocadas o manipuladas sin protección un ave enferma.
Melón explicó, en declaraciones a LT3 de Rosario, que la gripe aviar no puede contagiarse por el consumo de huevos de aves enfermas.
MB con información de agencia de noticias NA