Desfinanciamiento estructural, científicos que ponen plata de sus bolsillos para sostener laboratorios, investigaciones en riesgo y un organismo clave en crisis. Así es el contexto en el que los investigadores intentan seguir haciendo ciencia en el Estado que gobierna Javier Milei, muy lejos del ideario del Presidente, que cree que las arcas públicas financian la “vocación” de los científicos. En el país de “no hay plata”, la plata para financiar ciencia está y ni siquiera proviene de las arcas públicas nacionales. Aun así, no se ejecuta. Existen al menos US$53.050.938.64 aportados por organismos internacionales para financiar programas científicos que están paralizados desde diciembre de 2023, según pudo establecer la Unidad de Investigación (UDI) de elDiarioAR, con apoyo de CAPIR.
Al contexto de becas canceladas, despidos, universidades que no llegaban a pagar la electricidad y un Presidente que niega el cambio climático, denosta a la ciencia y al ambientalismo, se sumó en las últimas semanas la confirmación oficial de que los científicos dejarán de recibir financiamiento de la Agencia de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (I+D+I). Sin embargo, por cada dólar invertido en ciencia por la Agencia durante 2024, hay otros US$3,93 que permanecen en los bancos sin aportar al desarrollo científico y tecnológico argentino.
El organismo estatal, que en su mayoría se nutre de préstamos de organismos multilaterales, se dedica a financiar y auditar proyectos de investigación científica y tecnológica estratégicos para el país. Con uno de sus instrumentos estrella, los Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica (PICTs), los científicos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) podían presentarse a concursos para impulsar líneas de investigación. También contemplaban la compra de insumos, equipos y becas doctorales para profundizar investigaciones. La Agencia I+D+I impulsó, además, programas de desarrollo productivo y de crecimiento tecnológico mediante el uso de Inteligencia Artificial (IA).
En 2024, la Agencia I+D+i tuvo una reducción drástica de su presupuesto anual real, que cayó un 65,1%, según el Análisis Presupuestario del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación de Agosto de 2024, realizado por el Centro de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación. Sin embargo, los fondos que le corresponden están, pero no aparecen.
El monto de US$53.050.938,64 surge de las cuentas bancarias de dos programas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial (BM) al 31 de diciembre de 2023 (US$14.396.855,68 y US$36.251.203,96, respectivamente). A esos números, se sumaron los últimos desembolsos recibidos por esos programas (US$15.900.000). Luego, se restó lo ejecutado durante 2024, US$13.497.121. Las cifras fueron obtenidas de las consultas a la Agencia I+D+I y los informes de auditorías a los programas efectuados por la Auditoría General de la Nación (AGN) y la empresa auditora Crowe.
“No hay plata”
Tras nueve meses de incertidumbre ante la falta de información sobre el desembolso de fondos, el 20 de agosto último, Alicia Caballero, ex presidenta de la Agencia I+D+I – renunció luego de la publicación de esta investigación–, se presentó en una reunión de la Comisión de Ciencia y Tecnología del Consejo Interuniversitario Nacional. La funcionaria terminaría presentando su renuncia horas después de la publicación de esta investigación periodística, el 30 de septiembre de 2024.
Antes de responder las preguntas de los presentes, Caballero expuso durante 20 minutos —PowerPoint mediante— sobre la historia de la Agencia, el crecimiento logrado a lo largo de los años y las publicaciones en redes internacionales alcanzadas gracias al apoyo institucional. Los miembros de la comisión ya conocían estos hechos y esperaban respuestas concretas ante la asfixiante situación que atraviesa el sistema científico argentino.
Sebastián Civallero, secretario de Ciencia y Técnica de la Universidad de Buenos Aires (UBA), lo describió en diálogo con la UDI de elDiarioAR: “De todas las preguntas que teníamos, no quedó respondida ninguna”. Los integrantes de la comisión enumeraron sus preocupaciones. “Cuando le preguntamos (a Caballero) si iban a cerrar la convocatoria (a nuevos proyectos de investigación) que hoy está abierta y si la someterían a evaluación, nos dijo que no. Cuando le consultamos si iban a financiar la convocatoria del año pasado, que ya fue evaluada y con proyectos seleccionados, nos dijo que no”.
Ante las respuestas negativas, las consultas continuaron: “Cuando le preguntamos si respetarían la actualización del presupuesto que figura en los contratos firmados con las universidades, nos dijo que sabía que había una cláusula de actualización de presupuesto, pero que no la cumplirán porque no hay plata. Y cuando le preguntamos qué convocatoria abrirán, nos dijo que todavía están evaluando la situación”, concluyó.
La reunión finalizó y una frase de Caballero resonó entre los presentes. Así lo relató Civallero: “Ella termina diciendo que lo que están buscando es que la ciencia esté al servicio del desarrollo productivo”.
La decisión de no financiar a los científicos es política, no financiera o económica. “El desembolso de los fondos se encuentra en un proceso de auditoría”, respondió la Agencia ante la consulta de la UDI de elDiarioAR. “Durante los últimos años se había ampliado la cantidad de proyectos financiados, lo que resultaba ineficiente para los fines del desarrollo de la ciencia y tecnología nacional. Por ese motivo se encuentra en análisis la modalidad de financiamiento para que esta sea de mejor calidad y más eficiente para el desarrollo de nuestro país. Una vez finalizado este proceso se comunicarán las determinaciones que tomará la cartera”, sostuvo el organismo.
Hay plata
La Agencia I+D+I se nutre mayormente de préstamos de organismos multilaterales. Actualmente, se encuentra ejecutando fondos de tres programas.
- Préstamo BCIE 2161: Alicia Caballero confirmó ante la consulta de la UDI de elDiarioAR que recibió fondos de un programa del Banco Centroamericano de Integración Económica. Según la página oficial del Banco, los fondos del Programa de Fortalecimiento de las Capacidades de I+D llegarían a US$65.500.000. La Agencia I+D+I sostuvo que el último desembolso recibido por parte del proyecto fue de US$8.500.000, en agosto de 2023, y que durante 2024 ejecutó US$532.548. Las cifras de este préstamos no forman parte del cálculo de los US$53.050.938,64 debido a que no se pudo establecer cuánto fue ejecutado durante 2023 y cuánto resta ejecutar. Por eso, es posible que haya todavía más dinero disponible en las cuentas.
- Préstamo BIRF-Banco Mundial Nº 9434: aprobado en 2022 con finalización en 2028 por US$200.000.000 de aporte del BIRF-BM y US$80.000.000 de aporte local. Según un informe de la AGN, los saldos encontrados en las cuentas bancarias del programa al 31 de diciembre de 2023 ascendían a US$36.251.202,96. La Agencia I+D+I confirmó haber ejecutado durante 2024 US$1.595.503. Por lo tanto, quedarían disponibles en las cuentas bancarias US$34.655.700,96.
¿Cuál es el objetivo del préstamo? Según la página oficial del Banco Mundial, el programa “busca fortalecer el sistema nacional de innovación y fomentar el crecimiento del sector privado hacia una frontera más productiva” y para ello busca generar “alianzas público-privadas” y financiar “el desarrollo, la transferencia y la adopción de tecnología para las pequeñas y medianas empresas, y el apoyo a emprendedores”. Sin embargo, tampoco habrá más financiamiento para este objetivo cercano a las ideas del Gobierno.
La UDI de elDiarioAR consultó al BIRF-Banco Mundial acerca de la evaluación del desempeño de la Agencia y la respuesta fue que el organismo ha actuado de manera “satisfactoria”. También confirmaron que ya desembolsaron US$40,5 millones (20%) durante 2023, “superando las proyecciones iniciales”. Además sostuvieron: “Los equipos de la Agencia I+D+i continúan preparando propuestas, términos de referencia y otros documentos del proyecto para acelerar la implementación”.
El organismo internacional agregó que la Agencia I+D+I “ha logrado avances significativos en la adjudicación de proyectos dentro de los programas de consorcios público-privados”, incluyendo “la inauguración de la primera Tecnoteca dentro del complejo Tecnópolis”.
Según una fuente cercana a la Agencia I+D+I, los dólares de los préstamos se desembolsan en etapas a partir del cumplimiento de los objetivos de la etapa anterior. Para poder utilizarlos, los dólares se venden al valor oficial y el Banco Central envía pesos a una cuenta bancaria del país.
A partir de ese momento, los dólares pasan a formar parte de las reservas nacionales. Si bien el presupuesto disponible de cada organismo estatal es aprobado por el Congreso cuando se aprueba el Presupuesto Nacional, hay dos actores fundamentales que intervienen luego en la administración de ese presupuesto disponible: el ministro de Economía, Luis Caputo, quien decide el ritmo en el que se administra el dinero; y el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien interviene en la reasignación de las partidas presupuestarias.
Por tanto, la Agencia I+D+I solo puede usar el dinero de los desembolsos de los organismos multilaterales según habilite el ministro de Economía. Mientras tanto, el dinero en las cuentas bancarias sigue engrosando el Tesoro Nacional.
3. Préstamo BID 5293, aprobado en 2021 con finalización en 2026. Se deben ejecutar US$128.200.000 del BID y US$32.125.000 de aporte local. Según un informe de la AGN, los saldos encontrados en las cuentas al 31 de diciembre de 2023 ascendían a US$14.396.855. La Agencia I+D+I confirmó haber ejecutado durante 2024 US$11.901.618.
Sin embargo, un informe de la agencia Crowe sobre el préstamo, disponible en la página oficial del BID advirtió en sus hallazgos un problema con una solicitud de desembolso por US$15.900.000 realizada el 6 de diciembre de 2023 y enviada por el BID al día siguiente. Según relata la empresa auditora, los dólares se encontrarían en el Banco Central, pero aclara que “no tienen ninguna documentación de respaldo que asegure dicha información”. El efecto que advierte Crowe es el “devengamiento y pago de intereses sobre fondos que no están a disposición del programa para su utilización”.
Ese desembolso es el mismo que declara la Agencia I+D+I como el último recibido en diciembre del año pasado. Sin embargo, al ser consultados por el auditor, la respuesta del programa fue la siguiente: los fondos se solicitaron recién el 24 de mayo último a Economía, “debido al cambio de gestión producido el 10 de diciembre y la consecuente reestructuración de la Administración Pública Nacional, la cual trajo aparejada la designación de nuevos funcionarios y/o firmantes”.
Según una fuente cercana a la Agencia, los reglamentos de los organismos multilaterales son muy estrictos e impiden el desvío de los fondos a otras partes del Estado. Por tanto, el dinero sólo puede utilizarse para los fines del proyecto o mantenerse en las cuentas del Banco Central.
En conclusión, al saldo reportado por la AGN en las cuentas bancarias de US$14.396.855, deben sumarse los US$15.900.000 recibidos en mayo de 2024, y a eso restarle la ejecución comunicada por la Agencia I+D+I de US$11.901.618. Lo cual da un total disponible en las cuentas bancarias del programa de US$18.395.237.68.
Si la Agencia cumpliera con los hitos estipulados en el contrato del préstamo, para lo cual deberían pagar los contratos y proyectos científicos, se habilitaría la posibilidad de solicitar un nuevo desembolso por US$9.375.000 más, explicó a la UDI una fuente vinculada al organismo.
Otro préstamo
Existe, además, un cuarto préstamo todavía no ejecutado del programa BID 5759/OC-AR del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por US$35 millones para el desarrollo de Inteligencia Artificial (IA) y sin necesidad de aporte local. Según su página oficial, el objetivo del programa es contribuir “al aumento de las exportaciones de los sectores de la Economía del Conocimiento (EDC) a través de la provisión de capital humano especializado, el desarrollo y la adopción de tecnologías basadas en Inteligencia Artificial (IA), y la promoción de su inserción internacional”.
La Agencia I+D+I afirmó que el programa “está declarado elegible para recibir el primer desembolso”. El proyecto, informó el organismo en su sitio, ya se encuentra en etapa de implementación y fue aprobado en junio de 2023. La UDI de elDiarioAR se contactó con un representante del BID, pero al cierre de esta nota, no ha recibido respuestas a los interrogantes enviados.
Además, el organismo obtuvo fondos del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), en la actualidad ejecutados por la Secretaría de Ciencia y Tecnología, aunque no se especificó el monto.
El argumento del gobierno de Milei de un Estado que no tiene dinero para el desarrollo científico y la innovación se desmorona con los desembolsos de los organismos multilaterales paralizados en las cuentas. Si la plata existe, ¿cuál es el verdadero proyecto del Gobierno para la ciencia? ¿Qué sucederá con los proyectos que llevan años de desarrollo? ¿A qué llama el Ejecutivo “estar al servicio del sistema productivo”? Son algunas de las incógnitas que se plantea el sistema científico mientras el Estado libertario hace borrón y cuenta nueva.
Esta investigación fue realizada gracias al soporte del Consorcio para Apoyar el Periodismo Independiente en la Región de América Latina (CAPIR), un proyecto liderado por el Institute for War and Peace Reporting (IWPR).
Nota: este artículo se actualizó el 30 de septiembre de 2024 a las 19:41 para informar la renuncia presentada por Alicia Caballero a la presidencia de la Agencia I+D+I horas después de la publicación de esta investigación.
LG/ED