El Gobierno abrió un nuevo plan de retiros voluntarios para Aerolíneas Argentinas con el que busca reducir 500 puestos de trabajo hasta el 2 de agosto, plazo en que cierra el período para aceptar la propuesta.
Como en la etapa anterior de retiros –a la que adhirieron unos 300 empleados–, el plan vuelve a llamarse “Retiro Gratificado” y es parte de la estrategia del Gobierno para poder privatizar la línea de bandera.
Según anticiparon desde la empresa, la propuesta de retiro será en base al salario y la antigüedad y se abonará en un solo pago. Además, aclararon que este será “el último plan” de retiros que se ofrecerá.
De acuerdo a lo que señalaron desde Aerolíneas, esta propuesta está abierta a todos los empleados y que esperan captar a mayor de cantidad de empleados ya que la anterior oferta era menor que una indemnización y no resultaba atractiva para los trabajadores de mas antigüedad. En ese sentido, buscan replicar un esquema similar al que se hizo en el Correo y Ausa con ofertas más atractivas para los trabajadores.
El anuncio se da en medio de la decisión del Gobierno por la denominada apertura de los cielos, para permitir el ingreso de otras empresas.
En otro orden, las fuentes indicaron que se está trabajando para reducir el déficit operativo en el 2024, a 150 millones de dólares, la mitad de lo que se registró en el 2023, que fue de 390 millones.
De acuerdo a los datos parciales, entre enero y mayo se logró mejorar los costos operativos en un 67 por ciento, respecto al mismo período del 2023.
Aerolíneas tiene unos 11.500 empleados y en el plan anterior se establecieron pagos mensuales, por un monto equivalente al 50% de antigüedad en años al momento de la firma.
Desde la llegada al gobierno de Javier Milei, el futuro de Aerolíneas es incierto. En un primer momento se intentó incluirla dentro de las empresas a privatizar. Pero en el marco de los acuerdos para alcanzar el número en la votación particular de la ley Bases, el Gobierno aceptó la eliminación de Aerolíneas Argentinas de la lista de empresas públicas a privatizar. A la lista se sumaron el Correo Argentino y los medios públicos de Radio y Televisión Argentina (RTA).
Sin embargo, el Ejecutivo nunca desistió de su intención. “Todas las empresas del Estado son pasibles de privatización. En este impulso legislativo o más adelante, eso lo definirá la Cámara de Diputados”, dijo a fines de junio el vocero presidencial, Manuel Adorni.
La decisión de abrir los retiros se conoce también en medio del comienzo de las vacaciones de invierno y cuando está latente un conflicto gremial solo apaciguado por la conciliación obligatoria dictada la semana pasada por el Ministerio de Trabajo, luego de que la empresa y los gremios de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes no llegaran a un acuerdo por las paritarias.
El pasado 12 de junio fue el Papa Francisco quien salió en defensa de Aerolíneas y posó con una bandera luego de recibir en el Vaticano al secretario general de la Asociación Argentina de Aeronavegantes, Juan Pablo Brey, uno de los principales dirigentes del sector.
Con información de Noticias Argentinas