La liquidación de los bonos en dólares del Fondo de Garantía y Sustentabilidad (FGS) de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) y otros organismos públicos despertó el debate sobre la plata de los jubilados. Veamos entonces con quién les fue mejor a los trabajadores retirados, tanto a los haberes mínimos y medios como en la evolución del fondo que debería garantizarlos, el FGS; y su antecesor, el sistema privado de administradoras de fondos de jubilados y pensiones (AFJP), vigente entre 1994 y 2008.
El sistema de AFJPs tiene algunos nostálgicos como el empresario más millonario de la Argentina, Marcos Galperin. “Qué lindas épocas cuando cada uno de nosotros tenía nuestros ahorros jubilatorios en nuestras propias cuentas privadas y podíamos ver la evolución de nuestros ahorros todos los meses”, reaccionó Galperin cuando el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que la Anses se deshacía de sus títulos públicos en dólares y la oposición respondió con una demanda judicial que ya recibió un fallo contrario.
A pedido de elDiarioAR, el economista e investigador del sistema previsional Carlos Martínez, de la Universidad de General Sarmiento, elaboró el cálculo de la evolución de las jubilaciones mínimas y medias y del fondo de las AFJP y su sucesor, el FGS, según pasaron los años y los gobiernos.
En el segundo mandato de Carlos Menem (1995-1999), el haber medio subió 19,6% en términos reales
En el segundo mandato de Carlos Menem (1995-1999), cuando ya estaba vigente el régimen de las AFJP en las que cada trabajador en blanco aportaba a un fondo de ahorro para su futura prestación, el haber medio subió 19,6% en términos reales, es decir, medido en pesos ajustados por inflación. En el de Fernando de la Rúa (1999-2001), pese al ajuste del 13% nominal que les impuso a los trabajadores pasivos, la jubilación media se incrementó en términos reales el 4,4%, en medio de una deflación por el contexto recesivo.
En el gobierno de Fernando de la Rúa (1999-2001), pese al ajuste del 13% nominal que les impuso a los trabajadores pasivos, la jubilación media se incrementó en términos reales el 4,4%
“Durante la convertibilidad el haber medio previsional aumentó casi un 25% en poder de compra, pero ello fue efecto del achicamiento en la cobertura, que hizo que, a medida que se iban muriendo los jubilados más pobres, no fuesen reemplazados por otros del mismo estrato social”, analiza Martínez. “Esto hacía que el haber de las jubilaciones bajas resultase siempre muy inferior al de las altas, las de los nuevos jubilados, de sectores medios y altos. Ello se verifica en el hecho de que el haber mínimo en ese período apenas creció un 3% en su poder de compra de 1995 a 2001 y ello fue porque, pese a estar congelado nominalmente en 150 pesos, hubo deflación tres años seguidos (1999-2001) por la recesión”, continúa el economista.
En 2002 saltó por los aires la ilusión de la convertibilidad, el esquema creado por Menem y sostenido por De la Rúa por el que un peso equivalía a un dólar, y entonces se disparó la inflación y la jubilación media derrapó 27,7%. Gobernaba Eduardo Duhalde. En la administración de Néstor Kirchner (2003-2007), la media se recuperó 14,4%, al tiempo que la cobertura previsional, es decir, la cantidad de mayores con jubilación, se elevó del 65% a casi universalizarse a más del 90% por la primera moratoria del kirchnerismo.
En 2002 saltó por los aires la ilusión de la convertibilidad y se disparó la inflación: la jubilación media derrapó 27,7%
En el primer gobierno de Cristina Fernández de Kirchner la prestación media se incrementó un 7,8% y en el segundo, otro 8,2%. En su primer año de gestión, en 2008, se reestatizó el sistema previsional, se eliminaron las AFJP y se creó el FGS. Para entonces, menos del 10% de los jubilados cobraba parte de su haber de las AFJP, dado que estas recién habían sido creadas 14 años antes y para retirarse se necesitan 30 años de aportes. Incluso la mayoría con jubilación privada sólo recibía la prestación básica universal que otorgaba el Estado y nada de las AFJP porque se habían diluido sus ahorros al invertirse en activos financieros que derraparon en el colapso de 2001/2002 y en la crisis mundial de 2008. Por fuera de esa minoría, más del 90% de los jubilados cobraba ya entonces del Estado.
En la administración de Néstor Kirchner (2003-2007), la jubilación media se recuperó 14,4%
El gobierno de Mauricio Macri se inició con la salida del cepo que sinceró otra vez el valor del dólar, pero en esta oportunidad regía la fórmula de movilidad jubilatoria que había creado el kirchnerismo y además en 2016 se hizo la reparación histórica para elevar las prestaciones medias y altas de acuerdo con lo que habían aportado los trabajadores. Entonces la jubilación media incluso creció ese año 0,9% pese al salto inflacionario. Sin embargo, entre el cambio de la movilidad que votó el Congreso a fines de 2017 y la nueva disparada de los precios en 2018 y 2019, el balance de la gestión de Macri arrojó una caída del 10,5% en las jubilaciones.
En el primer gobierno de Cristina Fernández de Kirchner la prestación media se incrementó un 7,8% y en el segundo, otro 8,2%
Con la actual administración del Frente de Todos de Alberto Fernández y Cristina Kirchner volvió a cambiarse la fórmula de actualización jubilatoria y la inflación alcanzó picos aún más altos. ¿El resultado de ambos factores? El haber medio lleva cayendo un 21,7% hasta el primer trimestre de 2023. La conclusión que es que a las jubilaciones medias nunca les fue mejor que con Menem, pero un tercio de las personas mayores no cobraban nada. El peor momento ocurrió con Duhalde, pero la pregunta radica hasta qué punto fue su responsabilidad la explosión de un régimen monetario que comenzó a mostrarse insostenible desde finales del menemismo.
“Desde la salida de la convertibilidad y hasta marzo de 2023 inclusive, el haber medio de las jubilaciones y pensiones perdió casi un tercio de su poder de compra (-32%), con una fuerte caída en 2002 (-28%) y una recuperación paulatina a lo largo del kirchnerismo que lo ubicaba en 2015 apenas un 3% por debajo del valor de 2001, pero con una cobertura mucho más amplia, que incorporó a dos millones y medio de adultos mayores que antes estaban fuera del sistema”, señala Martínez.
“Durante el macrismo, en 2016 y 2017, siguió aumentando, acorde a lo establecido en la ley de movilidad de 2008, hasta llegar a ser, en 2017 un 7% más alto que en 2001. Pero ante el cambio en la ley de movilidad se desmorona, con un recorte real de 13% en 2018 y 7% en 2019, que lo ubica, en ese año, un 10% por debajo del de 2015. En el actual gobierno, creció un 5% en 2020 y cayó un 8% en 2021, estando, tras dos años, un 3% abajo de 2019, pero en 2022 el haber perdió un 16% de su poder de compra y en el primer trimestre de 2023 otro 4%. Así, respecto a 1995, hoy el haber previsional promedio es un 12% más bajo”, prosigue el investigador de la Universidad de General Sarmiento.
El balance de la gestión de Mauricio Macri arrojó una caída del 10,5% en las jubilaciones
En cuanto a las jubilaciones mínimas, apenas conservaron su valor en el segundo gobierno de Menem: subieron 0,8% en términos reales. Eran los tiempos en que protestaba la jubilada Norma Plá. Con De la Rúa se incrementaron 2,3%. En 2002, con la salida de la convertibilidad instrumentada por Duhalde, se derrumbaron 29,1%.Con Néstor Kirchner saltaron 70,4%. En el primer periodo de Cristina Kirchner se elevaron 7,5% y en el segundo, sólo 1%. Con Macri se pincharon 12,2% y con Alberto Fernández, 14,5%. El gobierno actual compensó la merma del poder de compra complementando la prestación con varios bonos.
¿Conclusión? A los que ganan la mínima, les fue mejor con el ex presidente Kirchner y peor, en 2002. Pese a la inflación actual, las jubilaciones mínimas todavía son 43,9% mayores que las de 1995, cuando Menem logró su reelección y cuando un tercio de los mayores pasaban su vejez sin nada.
“Con respecto al haber mínimo, cayó 29% en 2002, pero se recuperó rápidamente, y en diciembre de 2003 ya era mayor al de diciembre de 2001”, recuerda Martínez. “Así, al concluir el kirchnerismo, en diciembre de 2015, la jubilación mínima compraba casi el doble que durante la convertibilidad (+86%). Durante el macrismo cae un 12% (principalmente durante 2018, con un recorte del 13% en su poder de compra). Durante los primeros dos años del actual gobierno se le logró empatar a la inflación: en diciembre de 2020 el haber mínimo era un 1% más bajo que un año antes, pero en diciembre de 2021 un 1% mayor que el de diciembre de 2019, con una fuerte caída del 11% en 2022 y del 4% en el primer trimestre de 2023. Así, a marzo de 2023, se encuentra un 14% por debajo de diciembre de 2019, es un 25% inferior al de diciembre de 2015 y, todavía, permite comprar un 40% más que en diciembre de 2001”.
Con la actual administración del Frente de Todos de Alberto Fernández y Cristina Kirchner el haber medio lleva cayendo un 21,7% hasta el primer trimestre de 2023
Otro cantar ocurrió con la rentabilidad del llamado ahorro de los jubilados, que antes estaba en manos de las AFJP para ir pagando a los que se iban retirando, y que ahora controla la Anses a través del FGS, aunque no lo usa para abonar haberes. En la actualidad, las jubilaciones se financian con los aportes de los actuales trabajadores y empleadores y con contribuciones del Tesoro. En 2008, cuando se dio por terminado el sistema privado de capitalización para volver al público de reparto, las AFJP invertían el 60% en títulos públicos, el 20% en dinero disponible porque estaba en cuentas bancarias o en fondos comunes de inversión, el 10% en plazos fijos, el 8% en acciones y el 2% en proyectos productivos de infraestructura. A junio de 2022, último periodo informado por la Anses, que lleva cierto retraso a la hora de difundir los datos, el FGS estaba compuesto en un 78% por bonos estatales, sólo 2% por dinero disponible, un 1% por plazos fijos, el 10% en acciones, el 4% en proyectos productivos de infraestructura y el 5% en préstamos a jubilados, otros beneficiarios de la Seguridad Social y provincias.
Las jubilaciones mínimas tuvieron una evolución similar a las medias, salvo que con el menemismo estuvieron congeladas y ahora se compensan con bonos
En el segundo gobierno de Menem, la rentabilidad anual de las AFJP creció 11,4% en dólares. Con De la Rúa cayó 10,5%. En 2002, cuando Duhalde rompe con la ficción del uno a uno, los fondos de pensiones perdieron 46,6%. En la gestión de Néstor Kirchner, las AFJP recuperaron renta anual: 18,3%. En la primera administración de Cristina Kirchner, en 2008 el sistema privado perdió 20%, lo que constituyó el detonante de la decisión de reformar el sistema previsional. Entre ese ruinoso 2008, con las AFJP, y el periodo 2009-2011, con el naciente FGS, en el primer gobierno de CFK el fondo de los jubilados terminó ganando 6,3%. En el segundo mandato, medida en dólares oficiales, el FGS mejoró un 3%.
En el periodo de Cambiemos, que liberó y después reinstaló el cepo cambiario, el FGS perdió 6% y en el de Alberto Fernández se recuperó el 7%. ¿Pero qué pasaría si se lo midiese en dólares blue? Sería otro cantar. Claro que el economista Carlos Martínez considera que no tiene sentido hacerlo: “Los jubilados no compran fideos guiseros, Lotrial (antihipertensivo) o Metrogas en dólar blue”, responde.
El experto de la Universidad de General Sarmiento señala que en la era de las AFJP, que cobraban elevadas comisiones equivalentes a un tercio del aporte de los afiliados, la rentabilidad anual del fondo de los jubilados fue del 3,6%. En la etapa del FGS ha sido mayor: 3,9%. “Los fondos de las AFJP tuvieron una rentabilidad razonable durante la convertibilidad (7,5% anual) aunque muy sesgada por lo que pasó en los primeros años (1995-1997 con una rentabilidad anual del 17,1%) respecto al rendimiento mucho más modesto en sus últimos años (1998-2001, con un 0,9% anual) y un rendimiento negativo tras la salida de ella (-0,1% en promedio anual en 2002-2008), totalizando una rentabilidad promedio anual de 3,6% (pero que se reduce a 0,3% si se cuenta el rendimiento en 1998-2008)”, analiza Martínez.
Las AFJP tuvieron menos rentabilidad que el fondo FGS de la Anses, que perdió con Cambiemos
“Mientras que el FGS acumuló, entre fines de 2008 y mediados de 2022, una rentabilidad anual de 3,9%. En ese período fue muy elevada durante el kirchnerismo (9,7% anual, con una rentabilidad muy baja en 2011 y 2013 y un valor negativo de 7,5% en 2015), negativa durante el macrismo (-6% anual, con una rentabilidad de -31,9% en 2018 y -8,5% en 2019) y elevada durante el actual gobierno (7% en los primeros dos años y medio, con un 13,3% anual en 2020-2021 y una caída de 4,6% en el primer semestre de 2022)”, completa el profesor de la universidad del conurbano bonaerense.
AR