Empresarios, economistas y analistas bursátiles se preguntan por estas horas cuál será el impacto económico de un intento de magnicidio que casi por unanimidad todos repudian -salvo el libertario Javier Milei, entre otros pocos- y consideran gravísimo en términos políticos e institucionales. Sin embargo, muchos de ellos consideran que el efecto será nulo en un corto plazo con numerosos problemas inflacionarios, sociales, fiscales y cambiarios y que, en todo caso, refuerza la centralidad política que estaba ganando la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner a partir del pedido de condena judicial, tapa el ajuste que está implementando el ministro de Economía, Sergio Massa, pero siembra dudas sobre impactos de mediano plazo, con un clima callejero enrarecido y con una oposición obligada a repensarse.
El presidente de una de las grandes cámaras empresarias descarta en privado que el atentado vaya a impactar en lo económico. Uno de los dueños de las grandes fortunas de la Argentina coincide: “No tengo idea qué pasará, pero quizás pasa como en Chile y Perú, donde la economía va por un lado y la política, por otro. Por eso pienso que esto no va a afectar, aunque Chile y Perú tienen, a diferencia nuestra, instituciones y reglas de juego estables en la economía”.
El presidente de una de las grandes cámaras empresarias descarta en privado que el atentado vaya a impactar en lo económico
Otro de los principales millonarios del país evalúa que este “tema grave distrae y pone en segundo plano otros que eran urgentes”. “Esto va a cambiar el tablero político: obliga a la oposición a un reagrupamiento ante un oficialismo realineado. Pero el problema de las divisas va por otro lado: en los próximos dos meses se resolverá cerrando grifos y buscando divisas adicionales, pero estamos marcando los tiempos de un ajuste cambiario, que tampoco va a resolverlo todo”, vaticina el empresario.
“Lo que pasó es muy grave desde lo político, pero todavía es muy reciente para opinar sobre el impacto en la economía, que tiene su lógica en sí misma, estamos en un momento difícil por la falta de divisas, que esperamos se vaya resolviendo de acá a fin de año”, opina Martín Rappallini, presidente de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (Uipba). “El impacto depende mucho de cómo reaccionen las fuerzas políticas. Todas deben trabajar en conjunto para que no vuelva la violencia a nuestro país. No habrá impacto económico, salvo que esto derive en una crisis política”, agrega Rappallini.
Uno de los integrantes de la variopinta junta directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA), también desestima repercusiones, pero... “Si vamos a repartir culpas y acusarnos entre todos y el Gobierno se victimiza, vamos en el camino equivocado y los problemas económicos, que son muchos, se van a agudizar porque incrementamos las incertidumbres que ya teníamos y lo vamos a pagar con más pobreza”, evalúa el empresario manufacturero.
“Es un escenario que suma mayor incertidumbre, más desconfianza entre nosotros, hasta en la manera de repudiar o defender, y no creo que económicamente repercuta bien”, evalúa Carlos Achetoni, el presidente de la Federación Agraria Argentina, la primera entidad de la Mesa de Enlace y una de las primeras cámaras empresariales que rechazó el atentado en la misma noche en que se produjo. “Somos sectarios, no estamos defendiendo las mismas cosas. Desde afuera también nos ven así”, lamenta Achetoni.
'A juzgar por cómo estuvieron las acciones argentinas en Wall Street este viernes, parece que no tuvo impacto', sostiene el director de uno de los grandes grupos argentinos
“A juzgar por cómo estuvieron las acciones argentinas en Wall Street este viernes, parece que no tuvo impacto”, sostiene el director de uno de los grandes grupos argentinos. Hubo más subas que caídas en un día feriado en el mercado doméstico. Transportadora Gas del Sur (TGS, de Marcelo Mindlin), la filial local del banco español BBVA y la petrolera estatal YPF lideraron las alzas con hasta 4,3% arriba, mientras que IRSA, Cresud (ambas empresas de Eduardo Elsztain) y Telecom (de los dueños del Grupo Clarín) encabezaron las bajas, de hasta el 3%. A la vez, cayeron los bonos que cotizan en el exterior y por eso subió el riesgo país a 2.424 puntos básicos.
Entre los economistas, Hernán del Villar, de la consultora Alpha, observa un “bajo impacto”. “Mayor efecto tendrán los posibles avances y anuncios cambiarios de los próximos días”, vaticina Del Villar. Su colega Hernán Hirsch, de FyE Consult, también vaticina que “de corto plazo, poco impacto, pero habrá que ver cómo impacta en la capacidad del Gobierno de ordenar la economía”. Otro consultor de los más consultados también puso paños fríos: “No va a tener mucho impacto en la economía, aunque algo sí. Lo que pasa en la economía mucho depende de los ajustes que se hagan en ella, no si un brasileño quiere matar a la vicepresidenta pero no lo logra”.
“No veo un impacto directo sobre la economía, más bien sobre la política”, opina Ignacio Labaqui, politólogo profesor en las universidades Católica Argentina (UCA) y del Centro de Estudios Macroeconómicos (Ucema). “En principio creería que este hecho no modifica los planes de Massa en materia económica, ni tampoco va a afectar la dinámica de los precios o del mercado financiero. Sí veo impacto en la política en la medida que el atentado fallido refuerza la centralidad de Cristina en el Frente de Todos, hecho que ya venía dándose desde el alegato del fiscal (Diego) Luciani y el incidente de las vallas, y quita momentáneamente del centro de la agenda pública los problemas económicos. Habrá que ver cómo reacciona el mercado financiero el lunes, pero me cuesta pensar que sea algo que conmueve a la paz cambiaria del último mes”, completa Labaqui.
Desconfianza
En un banco extranjero, su economista maneja encuestas que indican que supuestamente la mayoría descree de la veracidad del atentado: “Eso es malo porque muestra el grado de desconfianza de los argentinos. Si no lográs la confianza endógena, difícilmente podés buscarla en el exterior. Pero esto además va a empoderar a Cristina en el peronismo, va a recuperar sus propios votos perdidos, había caído su popularidad del 35% al 20%, y va a tener poder de fuego para obstruir cualquier decisión nacional. Aunque a Massa le vaya bien, ella no va a permitirle crecer. Además, el atentado divide más a la oposición. Los mercados lo van a ver mal”.
En otra entidad financiera foránea, otro economista evalúa que si bien el conflicto judicial de Cristina Kirchner “entretenía y le daba espacio a Massa para avanzar, también implicaba una movilización de la calle que es riesgosa porque después no es tan fácil evitar que la gente también salga cuando sube la luz o le impacta el ajuste”. “El atentando refuerza eso porque ahora hay más preocupación por poner gente en la calle. Además, ella gana una centralidad en la escena política, que había ocupado Massa, aunque no cambia el hecho de que ella acepte que hay que hacer ajustes”, completa el analista. Horas antes del intento de magnicidio, el diputado Máximo Kirchner justificó las medidas del ministro al sostener que está arreglando lo que él considera “desastres” que dejó Martín Guzmán, más allá de que ahora estén recortando los subsidios energéticos que la vicepresidenta no le había permitido subir al ex ministro de Economía desde principios de 2021.
Uno de los economistas que más acierta en sus pronósticos, dice: 'Esto puede ayudar a ocultar transitoriamente el descontento causado por el avance del programa de Massa o si Massa vuelve de su próxima gira a Estados Unidos con las manos vacías'
En el mundo académico, uno de los economistas que más acierta en sus pronósticos, prefiere esta vez guardar el anonimato para soltar sus proyecciones: “Esto puede ayudar a ocultar transitoriamente el descontento causado por el avance del programa de Massa o si Massa vuelve de su próxima gira a Estados Unidos con las manos vacías. Pero la gente, cuando va al supermercado, tiene que pagar las cosas. Por eso, si a Massa le va bien, mejorará el Gobierno y si le va mal y la gente se calienta, le irá mal. La macroeconomía se va a terminar imponiendo, más allá de que no hay que descartar que aparezcan eventos políticos nuevos”.
En el ámbito bursátil, un analista de una de las grandes sociedades de bolsa desestima impactos de corto plazo: “Lo importante es cuánto reducen el déficit fiscal”. No obstante, también pone en duda la veracidad del ataque y de ahí concluye que se trata de “una señal de fin de ciclo”, exactamente lo contrario a lo que sostienen otros de sus colegas. El desconcierto de opiniones no es más que otra prueba de lo que le cuesta al mercado financiero la elaboración de análisis político. Otro economista del mundo financiero pronostica que el atentando “sumará incertidumbre a la situación de calma cambiaria que se había logrado, podría haber mayor tensión en los mercados, aunque en el exterior este viernes las acciones operaban bastante bien”.
Santiago Abdala, director de Portfolio Personal Inversiones (PPI), califica el atentado como “gravísimo, pero no debería tener una correlación en lo económico, salvo que veamos alguna reacción política extraña”. Su colega Mauro Mazza, de Bull Market Brokers, aclara que “el mercado tarda en deglutir estas noticias”: “Vamos a esperar qué pasa con las encuestas, pero el ambiente se ha caldeado un poco más en medio de que Massa debe ir a buscar dólares. Imagínate el FMI (Fondo Monetario Internacional) mirando esto. Pero nosotros les decimos a nuestros clientes que miren lo que pasó cuando (Jair) Bolsonaro sufrió un atentado en 2018: es verdad que estaba en plena campaña electoral, pero con eso finalmente se transformó en presidente. Esto quizá consolida a Cristina. En general, el que sufre un atentado se fortalece. En ese caso, podríamos estar ante un techo del mercado de acciones y bonos. Habrá que ver qué trae Massa de Estados Unidos, pero no creo que traiga nada. Es más relevante qué anunciarán con el dólar soja”.
AR