El año 2022 estuvo signado por dos hechos históricos que se sucedieron de manera casi simultánea, la conquista del Mundial de Qatar logrado por la Selección Argentina, y la presencia de la película Argentina, 1985 en lo distintos festivales del mundo.
Hubo dos frases que se volvieron icónicas en momentos del evento deportivo: “Quiero ganar la tercera” y “Elijo creer”. Esas dos expresiones también fueron tomadas para el próximo evento de la industria cinematográfica, los premios Oscar 2023. Es que el país cosecha dos estatuillas hasta ahora, por lo que podría darse lo de “ganar la tercera”.
El 24 de enero, y luego de siete años de ausencia, se confirmó que el cine nacional volvería a ser parte de la ceremonia de la Academia de Hollywood, al anunciarse que Argentina, 1985 competirá en la categoría mejor película internacional. De esta forma, el filme dirigido por Santiago Mitre, que pocos días antes ganó un Globo de Oro en la misma categoría, suma una nueva presencia en una competencia extranjera, esta vez la más importante de la industria.
Peter Lanzani ya está en Los Ángeles junto al director Santiago Mitre, que aprovecharon a graficar cada paso por ese país con diferentes instantáneas en cada una de sus redes sociales. En ellas se los puede ver tanto en modo turista como en modo fanático y con la ilusión a cuestas. Por caso, en una de esas tomas se los ve con la camiseta de la Selección, haciendo el número tres con sus dedos y de fondo el cartel promocional de la película que tantas satisfacciones dio al cine argentino.
En otra de esas imágenes se lo puede ver al actor besándose la camiseta que se confeccionó tras la obtención del título del mundo, esa que incluye la tercera estrella, esa estrella que guía a un futuro próximo que se espera sea de satisfacciones que no cesen.
La gran duda aún es respecto de la presencia de Ricardo Darín en la ceremonia, ya que, como él mismo afirmó, no estuvo presente en la jornada histórica en la que El secreto de sus ojos ganó el segundo Oscar para la Argentina: “Y sí estuve en El hijo de la novia, que volvimos con el rabo entre las patas”.
NB