Celebradas y concluidas en el fin de semana las elecciones internas de la ex Concertación de centro izquierda que gobernó Chile gran parte de los 30 años seguidos a la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), quedaron definidas el lunes las nueve candidaturas que rivalizarán en las presidenciales del 21 de noviembre. Resultó victoriosa Yasna Provoste, senadora del Partido Demócrata Cristiano (DC) y profesora de Educación Física. La entonces presidenta del Senado se impuso con un poco más del 60% de los votos, sobre el candidato del Partido Radical (PR), Carlos Maldonado y la candidata del Partido Socialista (PS), Paula Narváez, que había contado con el apoyo de las dos veces presidenta Michelle Bachelet, hoy principal funcionaria de DDHH en la ONU. Es la única mujer que figurará en las boletas generales chilenas de noviembre, donde además de la Presidencia se disputarán las bancas del Senado y de la Cámara de Diputados y Diputadas, como la Cámara baja se llama oficial y binariamente en Chile.
De 51 años, Provoste se medirá en esa primera vuelta electoral del 21 de noviembre con los otros dos jóvenes rivales, que, como ella, son quienes tienen mayores posibilidades de llegar al balotaje presidencial. Antes del voto, competirán en la campaña electoral más breve e intensa de la historia chilena. A la derecha, Sebastián Sichel (de 44 años), ex presidente del Banco Estado y ex ministro de Desarrollo Social del actual presidente Sebastián Piñera, por la coalición oficialista Chile Vamos. A la izquierda, Gabriel Boric (de 35 años ), diputado por Magallanes , del polo Apruebo Dignidad, que incluye al Partido Comunista. Los dos candidatos, que cuentan con fuerte aprobación en las encuestas, movilizaron más electores de lo previsto en las primarias del 18 de julio. Seis candidatos más se anotaron ante el Servicio Electoral (Servel), en un total de nueve, para competir por el más alto cargo del país: Eduardo Artés por Unión Patriótica Chile (UPA), José Antonio Kast por el Partido Republicano (PLR), Franco Parisi y Gino Lorenzini por el Partido de la Gente (PDG), Marcos Enríquez Ominami -salvado in extremis por la Justicia de las acciones de lawfare en su contra instigadas, aparentemente, desde el gobierno, para inhabilitarlo políticamente- por el Partido Progresista (PRO) y Diego Ancalao por La Lista del Pueblo (LdP).
Yasna Provoste, nació en la ciudad de Vallenar, capital de la provincia de Huasco en Atacama, la rica región de minerales metálicos. De ascendencia diaguita, una de las culturas ancestrales del Norte Chico de Chile, según suele destacar en sus intervenciones. Así en su discurso del 17 de marzo cuando asumió la Presidencia del Senado: “se inaugura la etapa en que el Senado de la República es presidido por una mujer de ascendencia diaguita. Asumo este deber como lo que soy: mujer, profesora, madre y esposa, humanista y cristiana, nacida en Vallenar, descendiente diaguita e hija de una familia trabajadora de clase media”. A esa familia trabajadora, donde descolló su madre, quien fundó Agrobus, una empresa de buses de turismo, con el tiempo la más grande de Vallenar, Provoste suma, en toda ocasión que considera oportuna, la referencia a su educación en instituciones públicas. En la Escuela Número 2 y en el Liceo San Francisco de Vallenar. Luego, Pedagogía en Educación Física y un magister de Administración Educacional en la Universidad de Playa Ancha (UPLA), en Valparaíso. Solo una, en institución privada, el diplomado sobre Descentralización y Gobiernos Locales en la Universidad Javieriana de Colombia, dirigida por los jesuitas. El curso de estos estudios favoreció antes que obstaculizó su participación en la vida política. Desde los 14 años, cuando los partidos políticos todavía estaban proscritos bajo la dictadura de Pinochet, militó en la DC. La práctica de los deportes fue tan importante para ella como su didáctica, y anterior incluso a esta pedagogía. En la entrevista “La imparable Yasna”, publicada por La Tercera, se demoró con gusto en recordar que fue una de las 10 preseleccionadas en los Juegos Panamericanos de Caracas en 1983, y vicepresidenta de la Red de Estudiantes de Educación Física.
La actual candidata presidencial de la República de Chile cuenta en su haber una trayectoria jalonada por cargos obtenidos en las administraciones de la ex Concertación y la ex Nueva Mayoría, como este frente se llamó después. Fue directora regional (1996-1997) del Servicio Nacional de la Mujer (Serman) en Atacama, durante el mandato de Eduardo Frei Ruiz Tagle (DC); gobernadora de la Provincia del Huasco, situada más al sur de la región de Atacama (1997 y marzo de 2000), y ratificada en este cargo por Ricardo Lagos (PS) hasta un año después, cuando fue designada intendenta de Atacama. En 2004, Lagos la nombró ministra de Planificación y Cooperación (Mideplan), hoy Ministerio de Desarrollo Social. Un año antes, en diciembre de 2003, el entonces presidente Lagos acudió a bañarse en el sector de Playa Grande del Chañaral en la Región de Atacama, para demostrar que la costa de la zona ya no estaba contaminada. Lo acompañó Provoste, quien había relativizado las denuncias de organizaciones ambientalistas y científicas de los efectos de los enclaves mineros en la zona; a diferencia del presidente, quien se sumergió en las aguas, la entonces gobernadora regional solo se mojó los pies.
Durante la gestión de Michelle Bachelet, fue nombrada Ministra de Educación en plena movilización estudiantil del 2006 , la llamada “Revolución Pinguina”. Debido a la importancia del Ministerio a su cargo ganó una alta visibilidad pública. No menor fue la que tuvo por su destitución del Senado, el 16 de abril de 2008, después de la acusación constitucional en su contra por el llamado “caso subvenciones” . La Contraloría detectó desórdenes financieros en la Secretaría Regionales Ministeriales (Seremi) de Región Metropolitana de Educación por $262 mil millones. El 16 de abril de 2008, el Senado confirmó su destitución e inhabilitación para el ejercicio de cargos públicos durante cinco años. Yasna Provoste estaba en la Sala esperando su destino, vestida con un traje de dos piezas color marfil. Cuando supo que su expulsión fue aprobada, agitó un pañuelo blanco de un lado a otro. Un gesto que cobró un cierto sentido 13 años después, cuando retomó la agenda pública al regreso de Canadá, donde estuvo el tiempo de su veto político.
En 2013, como candidata a diputada por el entonces Distrito 4 (Vallenar, Huasco, Tierra Amarilla, Caldera), en la Región de Atacama, obtuvo la primera mayoría (46,3% de los votos) . Luego, en el Senado para el período 2018-2026, nuevamente obtuvo la primera mayoría en su circunscripción de la Región de Atacama (34,24%) y fue nombrada presidenta del Senado, el 17 de marzo de 2021, convirtiéndose en la tercera mujer en ocupar ese cargo. Ese día, Yasna Provoste volvió a levantar un pañuelo blanco ante sus pares. No quedó claro si fue un gesto de celebración o de reivindicación por su pasado en esa misma Sala. Ese día, también, pronunció varias definiciones militantes : “Soy opositora al gobierno del Presidente Piñera. Creo que nuestro país merece más de lo realizado por su Gobierno. Haré todos los esfuerzos que estén en nuestras manos para contribuir a lograr la más amplia unidad de la oposición para recuperar la confianza de la gente y construir un gobierno de mayoría a la altura de las necesidades del país y de sus aspiraciones de paz y estabilidad”. Y afirmó al cierre de su discurso: “Cuando las mujeres hablamos fuerte y claro, muchos varones entienden eso como una actitud belicosa. Yo seguiré siendo lo que soy, una mujer de carácter y de decir las cosas como son”.
A la izquierda de un partido que se corrió a la izquierda
La posición de Provoste está a la izquierda de la DC, un partido que a su vez se ha corrido cada vez más a la izquierda desde la última vez que ocupó la presidencia con Eduardo Frei Ruiz-Tagle. Se reivindica como admiradora de Radomiro Tomic, uno de los fundadores del Partido al que el Chile llaman “la Falange”. Esta militancia expresó en el Senado, principalmente, cuando apoyó y aun impulsó dos polémicos proyectos de ley. Uno, el indulto a los detenidos del estallido social de octubre de 2019. La ola de protestas callejeras que sacudió a Chile desde fines de 2018 por el alto costo de vida, las bajas jubilaciones y oneroso acceso a la salud en uno de los países más desiguales de la región. En esas turbulentas manifestaciones, se reclamó la reforma de la Constitución y, consecuentemente, la elección de una Convención Constitucional para redactar una nueva Carta Magna. Elisa Loncón, docente, lingüista y activista mapuche de 58 años fue la primera constitucional elegida. El otro proyecto propuso la eliminación del sistema de AFP y el establecimiento de un sistema de pensiones básicas solidarias y una básica universal. El debate y la crisis que generaron los retiros del 10% desde las AFP, que Piñera intentó frenar incluso en el Tribunal Constitucional (TC), posicionaron a Yasna Provoste, inesperadamente o acaso no tanto, como una figura presidencial. En los conciliábulos negociadores entre el Gobierno y la oposición estuvo bien actuante la presidenta del Senado. Cuando avanzó un tercer retiro de las AFP, Provoste sostuvo la detención de los mismos, para que “las familias no deban recurrir nuevamente a sus propios ahorros”, a la vez que propuso un aumento sustantivo del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
La resonancia pública que alcanzó Provoste – que eclipsó a la de la senadora Ximena Rincón, candidata presidencial de DC ganadora en las primarias frente a Alberto Undurraga- se testimonió en las encuestas que la favorecieron. La primera vez que le preguntaron sobre la idea de una posible candidatura presidencial, respondió: “A esta tarea [la presidencia del Senado] me comprometí, y junto al vicepresidente Jorge Pizarro estamos dedicados 100% a la tarea que nuestros pares nos han dado. Nuestra candidata presidencial para las primarias de la oposición es la senadora Ximena Rincón”. Sin embargo, después de los duros números de la mega elección para la ex-Concertación en general, y para las pretensiones de la DC en la Convención Constitucional en particular (obtuvo dos escaños, uno de un militante y otro de un independiente), la situación se tensó. Las autoridades del PS y Partido por la Democracia (PPD) plantearon que no participarían con la DC en una primaria amplia de la oposición con Rincón, pero sí con Provoste. Rincón triunfó en las primarias de su partido con un 57% de apoyo, y su nombre representaría a DC en las papeletas de las primarias presidenciales. En medio de las críticas, el 19 de mayo Rincón bajó su candidatura, mientras que Provoste mantuvo el misterio hasta el viernes 23 de julio, cuando finalmente la oficializó.
Aun si fuera elegida presidenta, su mandato en un sistema presidencialista como el de Chile, será diferente por la presencia actuante de la Convención Constitucional. Entretanto, Yasna Provoste ya renunció a la presidencia del Senado para ocuparse de su campaña. El jueves fue elegida nueva presidenta de la Cámara alta con 24 votos a favor, y 15 en contra, Ximena Rincón. Hoy dos mujeres políticas democristianas quedan así muy cerca del poder y de la presidencia: Provoste como candidata para las elecciones de noviembre y Rincón primera en la línea de sucesión presidencial.
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