El asesinato de tres personas de la comunidad, entre ellos una autoridad de gobierno, en una zona rural del departamento colombiano de Nariño, fronterizo con Ecuador, fue denunciada por los indígenas awá del suroeste de Colombia.
La Fiscalía General de Colombia (FGC)“dispuso un equipo de fiscales, investigadores y criminalísticos para adelantar investigación por homicidio del gobernador suplente Orlando Moreano y dos escoltas de UNP, así como otros miembros de comunidad AWA que resultaron heridos en resguardo Inda Sabaleta, Nariño”, informó el ente acusador.
La masacre ocurrió durante la tarde del domingo en el Resguardo Awá Inda Sabaleta, que pertenece al municipio de Tumaco, conocido como la “Perla del Pacífico” de Colombia, mientras los indígenas, que integran la organización Unidad Indígena del pueblo Awá (UNIPA), se encontraban realizando una reunión para analizar la situación derechos humanos de su comunidad.
El documento detalla que “fueron asesinados por grupos armados ilegales que operan en la zona tres compañeros de nuestra organización, entre ellos el suplente gobernador del Resguardo Awá Inda Sabaleta, Juan Orlando Moreno”.
De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo de la Paz (Indepaz), los grupos armados organizados que interactúan en la zona son el Frente Oliver Sinisterra que tiene el mayor acceso a los recursos que genera el narcotráfico, el Bloque Occidental Alfonso Cano, una de las siete unidades de las desmovilizadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia- Ejército del Pueblo (FARC-EP) y Los Contadores vinculados al narcotráfico en el Pacífico, cuya presencia ya había sido advertida por la Defensoría del Pueblo a través de una alerta temprana, en la que destacaban la afectación particular para la población Awá.
El coordinador de Indepaz, Leonardo González, precisó que los grupos armados se encargan de prestar servicios de seguridad al narcotráfico y disputan las diferentes rentas de la economía ilegal.“Seguimos insistiendo en la necesidad de una presencia del Estado integral en el territorio y no solamente por parte de la fuerza pública, la cual es insuficiente sino va a acompañada de la garantía de los derechos esenciales”, señaló González.
La UNIPA asegura que hay otras personas heridas que están graves y que necesitan atención médica urgente, aunque no dan más detalles del asunto.
Debido a losasesinatos y otros hechos violentos los indígenas habían solicitado de manera “inmediata y urgente” la presencia de la Defensoría del Pueblo, la Gobernación de Nariño, la FGC y la Consejería Presidencial para los Derechos Humanos para que se investigue lo ocurrido.
Según datos proporcionados por Indepaz, la masacre ocurrida es el número 49 durante 2022 y con la muerte de Orlando Moreano ya son 96 los líderes asesinados este año, así como 1.323 desde la firma del Acuerdo de Paz despuésde 50 años de conflicto armado entre el gobierno del expresidente Juan ManuelSantos y las FARC-EP en 2016.
AGB con información de agencias y medios