Bienvenido, Bob
¿Qué tienen en común la protesta de la muchedumbre derechista que el miércoles 6 de enero de 2021 interrumpió a la Asamblea Legislativa en el Congreso de Washington, la protesta de otros militantes derechistas que tampoco halló más obstáculo que su albedrío cuando el domingo 8 de enero de 2023 vandalizó Brasilia, y el espectáculo del deterioro psicofísico irreversible del presidente y candidato oficialista de EEUU que 70 millones de televisores encendidos pudieron presenciar durante una hora y media en el debate presidencial del jueves 27 de junio? Que el perjuicio más dañino y duradero causado por estos hechos deriva del solo hecho de haber ocurrido. El caso del senador Bob Menendez es más sórdido, menesteroso, doméstico, conyugal, siniestro y apabullante. Los hechos por los que el político demócrata fue procesado por la Justicia federal no ocurrieron en un día sino a lo largo de años.
Hechos todos que podrían haber sido previstos, y desde luego impedidos, dada la inconmensurable asimetría de recursos entre los perpetradores y sus mayores perjudicados. Que son el gobierno en el poder y la vida institucional y el prestigio internacional del Estado. Causan un daño a la reputación de EEUU y de Brasil tan lesivo como sólo puede causarlo una genuina revelación. La virulencia de la guerra de Israel en la Franja de Gaza se prolonga para contrarrestar el acontecimiento del ataque de Hamas del sábado 7 de octubre.
El martes 16 de julio el veredicto unánime de un jurado federal de Nueva York encontró culpable a Bob Menendez, de 70 años de edad, demócrata, senador senior del estado de Nueva Jersey, de 16 delitos de corrupción cometidos en forma continua entre 2018 y 2022.
Durante cuatro años, la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU, primera potencia económica y militar mundial, estuvo presidida por un político cubano-americano cuya más visible guía para la acción habría sido el interés propio, el de su señora Nadine, el de tres empresarios amigos, y el de la República Árabe de Egipto. En este orden. Sin que sus 99 colegas en las restantes bancas de la cámara alta, demócratas y republicanas, se percataran, o se preocuparan, o se interesaran.
Por detrás de la noticia judicial se entrevé el abismo político: durante cuatro años, la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU, primera potencia económica y militar mundial, estuvo presidida por un político cubano-americano cuya más visible guía para la acción habría sido el interés propio, el de su señora Nadine, el de tres empresarios amigos, y el de la República Árabe de Egipto. En este orden. Sin que sus 99 colegas en las restantes bancas de la cámara alta, demócratas y republicanas, se percataran, o se preocuparan, o se interesaran.
Ojeada retrospectiva
Que el poder corrompe y que el poder absoluto corrompe absolutamente son circunstancias de las cuales las ciudadanías democráticas no se consideran libres por el solo hecho de que sus representantes hayan sido elegidos por ellas. La corrupción de un político enriquecido por abuso de la posición que ocupa es anécdota de otra narrativa: la de los años que el Senado pasó ignorante, inerme o distraído del obrar del presidente que la misma cámara alta votó y colocó al frente de la Comisión de Relaciones Exteriores.
Bob Menendez inició su carrera en 1986. Fue alcalde de Union City y legislador estadual en Nueva Jersey hasta ganar en 1993 una banca en la Cámara de Representantes. Fue elegido senador en 2006 y reelegido en 2012 y 2018. En cuatro decenios de político profesional, Menendez fue consecuente en la ferocidad de su repudio a la normalización de las relaciones con Cuba, en las rutina de sus denuncias de la República Bolivariana de Venezuela y la República Popular de China y en la confiabilidad de su defensa del Estado de Israel.
Por qué es más fácil olvidarse que hacer olvidar
En octubre, Menéndez renunció a la presidencia de la Comisión de Relaciones Exteriores, después del alegato y las pruebas presentadas por la Fiscalía en el proceso abierto en su contra. Después de conocido el veredicto de culpabilidad pronunciado por el jurado en los tribunales federales de Nueva York, unánime, y veloz, el senador escribió una carta formal a Phil Murphy, gobernador demócrata de Nueva Jersey, comunicándole una renuncia a su banca en la cámara alta del Congreso que hará efectiva a partir del 20 de agosto. Menendez se reclama inocente y anuncia que llevará su defensa hasta la Corte Suprema: “Nunca he violado mi juramento público. Nunca he sido otra cosa que un patriota de mi país y para mi país”.
Aún antes de su consumación, la dimisión ya firmada por el senador Menéndez aportó una dosis de alivio homeopático a la campaña electoral oficialista que ha sustituido al presidente Joe Biden por la presidenta del Senado Kamala Harris como titular de la candidatura presidencial demócrata que desafiará al ex presidente y candidato presidencial republicano Donald Trump el martes 5 de noviembre. De invocar el principio constitucional de presunción de inocencia, habría invocado en su nombre Menendez el derecho de demorar su renuncia hasta que fuera dictada una sentencia definitiva en un proceso judicial todavía no concluido. (De acuerdo con las reglas internas de la bancada demócrata, ya debía renunciar llegado su caso a este punto procesal, sin embargo).
Renuncias renuentes, expulsiones excluidas
Dada la gravedad de las acusaciones y la contundencia del veredicto por delitos cometidos no sólo en el ejercicio de sus funciones como senador, sino posibles sólo en virtud de su investidura senatorial, el caucus demócrata se habría visto obligado a iniciar procedimientos de expulsión de la Cámara alta. Como ya había voces republicanas que se lo exigían. Y con la consiguiente visibilidad acrecida de un escándalo de corrupción del partido desaventajado en las encuestas de intención de voto para las presidenciales de noviembre. A principios de año, ya renunciada la presidencia a la Comisión de Exteriores, pero aún en la Cámara, Menéndez se había anotado como candidato no partidario para renovar su banca de senador por New Jersey en las elecciones de noviembre. Los demócratas esperan todavía esta última renuncia. De abandonar la carrera electoral, significaría el triunfo sin contrincante de Andy Kim, el candidato demócrata oficial que hasta ahora compite en ese estado demócrata contra la candidatura independiente de Menendez.
En las 39 páginas de su acusación presentada el 23 de septiembre, la Fiscalía General del Distrito Sur de New York informa que a policía encontró durante un allanamiento de junio de 2022 en la residencia familiar de Menéndez 480 mil dólares en efectivo distribuidos en ropas, zapatos, sobres con huellas digitales de empresarios acusados de pagar sobornos y el nombre Menendez anotado fuera, otros 70 mil dólares en una caja fuerte de Nadine, 13 lingotes de oro valorados en más 100 mil dólares, y un Mercedes Benz descapotable estacionado en el garage tasado en 60 mil dólares. El dinero egipcio también facilitó in extremis 23 mil dólares que pusieron al día las cuotas de una hipoteca y así salvaron a la deudora morosa Nadine de un desalojo anunciado. El dinero, en metálico o en papel moneda, en la forma abstracta de órdenes de pago o metafórica de objetos de lujo, retribuía por las jornadas laborables y la atención sin días feriados que el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU dedicaba al servicio de los intereses del gobierno de Egipto. Así Menendez trasladó a militares y funcionarios egipcios información reservada sobre número y conformación del personal de la representación diplomática de EEUU en el país del Nilo –poniendo en riesgo la seguridad de la Embajada de Washington en El Cairo- y aceleró un paquete de ayuda de 300 millones de dólares al país árabe. Estos dos delitos se cuentan entre los más destacados en la cobertura periodística norteamericana. Son diferentes y de gravedad creciente: para el primero le bastaba con ser legislador, pero el segundo sólo un integrante de la Comisión de RREE del Senado podía cometerlo (y con más facilidad quien la presidía). Una vez transmitida clandestinamente la información reservada y sancionada la millonaria ayuda por el Congreso, uno y otro crimen estaban consumados. Con independencia del pago o promesa de sobornos.
Nuestro hombre de El Cairo
La foja de servicios prestados a la República Árabe de Egipto por el presidente de la Comisión de RREE del Senado de EEUU es larga, variada, desequilibrada. La amplitud de rango que distancia entre sí las tareas desempeñadas por Menendez, que enumera más que cataloga la Fiscalía federal neoyorquina, desafía toda comparación significativa.
Ya sea la aprobación de una ley que cambie la doctrina estratégica de Wasghington para bien de El Cairo o completar un trámite burocrático del que los propios funcionarios egipcios nativos podrían encargarse, los servicios tienen en común la facultad de fortalecer la posición de los militares que, tras derrocar al presidente Mohammed Morsi del partido islámico Hermanos Musulmanes, gobiernan Egipto desde junio de 2013. Esta facultad no es la finalidad de Bob, que es el beneficio propio y de los suyos, de la cual Egipto es su instrumento. Nada más lejos de espionaje por motivos ideológicos, como Julius Rosenberg, condenado en 1953 a morir en la silla eléctrica junto a su esposa Ethel por alta traición. Este ciudadano estadounidense judío nacido en Nueva York en 1918 entregaba secretos aeronáuticos y nucleares a la Unión Soviética de Stalin: tal conducta era emanación para él ineludible de su razonada convicción y su organizada militancia comunista en la Guerra Fría.
El general golpista Abdelfatah El-Sisi es hoy presidente. La precaución de desalentar candidaturas rivales competitivas hizo que el ex comandante en jefe de las FFAA y ex jefe de los servicios de inteligencia ganara las elecciones de marzo de 2018 con el 97% de los votos. Todos los votos válidos restantes fueron para el único contrincante inscrito, el centrista liberal Moussa Mostafa Moussa. Su partido al-Ghad fue fundado en 2004: su plataforma establece que toda oposición al oficialismo debe ser pacífica y respetuosa.
Algunas faenas cumplidas por Menendez no constituirían delito ninguno, y serían actividades plenamente legales si el senador hubiera ya cumplido su mandato. Pero las llevó a cabo antes de ese fin, que es el 20 de agosto según la fecha de su renuncia. Por ejemplo, un funcionario egipcio no sabe cómo redactar una carta a un senador (que no es Bob) para pedirle que el Congreso de EEUU reconsidere la venta de armas y la financiación de la compra de esas armas, retaceadas e interrumpidas desde 2016 por alegadas violaciones a los DDHH y pedirle que tenga en cuenta que ahora Sisi es presidente constitucional aclamado en elecciones democráticas. Nadine le pide a Bob que le escriba la carta al egipcio y el senador demócrata hace de ghost-writer para que un funcionario extranjero pueda convencer, o confundir, o crasamente engañar a otro senador de EEUU. Bob envía el texto que redactó desde su dirección de correo electrónico a la dirección de Nadine, Nadine reenvía el correo de Bob al empresario egipcio-americano Wael Hana (su amigo de años y su empleador reciente, antes de conocer a Bob en febrero de 2018 ella estaba sin trabajo), el empresario reenvía el correo de Nadne a la dirección del funcionario egipcio, Bob y Nadine borran los correos, pero el empresario no borra nada y fue en su computadora donde el FBI encontró completa la cadena de mails.
Todas estas tareas desglosadas redundan en un consumo voraz del tiempo de trabajo útil del senador Menendez. De la cantidad y la calidad de las horas que declara dedicar en el Capitolio a las funciones para las que había sido elegido por el estado de Nueva Jersey. De las horas que demanda la máxima responsabilidad que le había sido encomendada por sus colegas del Senado de orientar y cuidar la política internacional de EEEU.
Vaquita para comprar un senador gauchito
Aparentemente, el enriquecimiento de Menendez, según el proceso concluido en veredicto unánime del jurado de Nueva York, no habría excedido esos valores en dólares billete, barras de oro, un automóvil de semi-lujo, un rescate hipotecario de urgencia, un sueldo regular para Nadine en un empresa de certificación de la carne halal exportada de EEUU a Egipto (devenida monopólica por disposición arbitraria de El Cairo en perjuicio de otras aseguradoras norteamericanas). Lejos de parecer obsceno, el volumen de los sobornos admira por su pequeñez. Los favores de un presidente de la Comisión de Relaciones del Senado de EEUU parecen asequibles a quien los requiera: democrático demócrata, el senador de Nueva Jersey.
AGB
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