El Comité Central Confederal (CCC) de la CGT convocó hoy a un paro general nacional a partir de las 11 horas del próximo 24 de enero, que incluirá una movilización al Congreso nacional, en rechazo del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de desregulación económica dictado por el Gobierno.
Se trata del primer paro general que enfrentará el gobierno de Javier Milei , anunciado a solo 18 días de haber asumido la presidencia. También el primero que lanza la central obrera desde 2019. El último fue el 29 de mayo de ese año, cuando todavía gobernaba Mauricio Macri. Desde el retorno de la democracia, Alberto Fernández fue el único presidente que no tuvo medidas de fuerza tan extremas.
La elección de la fecha no es casual: al día siguiente es la fecha en que el Congreso fue convocado para tratar la llamada ley ómnibus con la que el Gobierno busca implantar una amplia reforma del Estado.
De forma previa, la central obrera realizará el 10 de enero en el Salón Felipe Vallese de la sede de la CGT de la calle Azopardo un plenario nacional de sus delegaciones regionales, informaron los voceros gremiales.
“Esto es respuesta a un DNU de características ilegales, no constitucionales. No hay ni necesidad ni urgencia para aparecer con tantos artículos que dan vuelta la matriz administrativa de nuestro país llegando a la situación tan absurda de autorizarse a sí mismo para regalar Aerolíneas Argentinas que es patrimonio de todos y todas”, dijo en conferencia de prensa Héctor Daer, secretario general de la CGT. Y agregó: “Esto, no cabe dudas, es una transferencia real de los sectores trabajadores que pierden capacidad de acción ante derechos que están plasmados en la Constitución y en los tratados internacionales. Apunta contra los derechos individuales de los trabajadores y trabajadoras, apunta contra los derechos colectivos, contra un sistema universal y solidario de salud y apunta a una cantidad innumerable de cuestiones que hacen a nuestro país”.
El sindicalista también señaló: “mientras estábamos movilizando nos encontramos con que aparece una ley ómnibus que contempla el tratamiento del DNU y que pone eje la propiedad privada y pone como bandera la libertad muy mal usada cuando la libertad de los individuos pierde sentido en la construcción de una sociedad (...) esto no es casual ni inocente, es una transferencia clara a que un sector pequeño de la sociedad que más tiene y más gana”.
Esta tarde la CGT sesionó con el objetivo de analizar la instrumentación de un plan de lucha en rechazo al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de desregulación económica enviado por el Gobierno al Congreso, así resolvió la medida de acción.
El encuentro de las organizaciones obreras confederadas comenzó a las 14 en la sede sindical de Azopardo al 800 en la ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo, al ingresar a la sede de la CGT, dijo que el “paro general tiene que ver con que obviamente se buscará el momento, el tiempo, la circunstancia, pero por sobre todo porque tiene consecuencias nocivas este decreto si empieza a regir a partir de este fin de semana”.
Para el gremialista, tanto el decreto 70/2023 –con el que el Gobierno establece la desregulación de la economía– como el proyecto de “Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos” presentado ayer al Congreso “tienen características nocivas para la República”.
Sobre el decreto, Palazzo advirtió que “ya el día lunes pueden tomar medidas que atentan contra la situación de muchos trabajadores” y pidió a la Justicia que “mire con mucho detenimiento” la iniciativa del presidente Javier Milei.
“Lo que ha hecho el Presidente es cambiar el orden jurídico de la Argentina y si la justicia convalidara eso va a tener que convalidar cada cuatro años cuando venga un Presidente que se cambie el orden jurídico de la Argentina e inclusive hasta pueden sacarle una reforma del Poder Judicial por decreto”, explicó.
Anoche, en una entrevista en la señal de cable TN, Héctor Daer, que, “con la incorporación del DNU a la ley ómnibus, aumentaron la maldad en forma exponencial” y sostuvo que las normas propuestas “no tienen una mirada clara ni de proyección de país”.
“El Presidente pide facultades amplísimas hasta declarar una guerra, por dos años”, dijo Daer en esa oportunidad, al tiempo que insistió en que las iniciativas “van en contra de toda la sociedad”.
“Uno puede transformar un país pero debe hacerse con un gran acuerdo con base de sustentación política, proponiendo debate. Acá estamos deshaciendo la administración del Estado, convirtiéndola en la nada misma y a partir de eso alguien nos dice que vamos a estar mejor pero las consecuencias que son tarifazo y devaluación”, argumentó.
El Confederal, que se realiza en el histórico Salón Felipe Vallese de la sede cegetista de Azopardo 802, es el máximo órgano ejecutivo de la CGT y el encuentro político más importante de la central obrera, y participan las organizaciones confederadas y afiliadas con cotizantes y aportes al día.
Según el Estatuto de la central obrera, el CCC debe ser convocado cada seis meses, pero en los últimos años debió ser postergado ante la grave pandemia de coronavirus.
El último encuentro se realizó el 22 de octubre de 2021 para convocar al Congreso Nacional que eligió el 11 de noviembre de ese año en Parque Norte y por un período de cuatro años a la conducción que integran Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano.
El Confederal cegetista, entre otras funciones, determina los reglamentos de los órganos internos, inclusive de la comisión directiva; fija la línea política; designa a la Comisión Arbitral que analiza y procura resolver los conflictos intrasindicales entre gremios y de encuadramiento y aprueba las órdenes del día de los Congresos ordinarios.
MM
Con información de Agencia Télam