La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner visitó hoy un centro de jubilados en La Matanza, donde instó a sus seguidores a involucrarse “para que no siga avanzando el narco, como sigue avanzando en todos nuestros barrios, producto de que el Estado se retira”.
“Yo quiero decirles que siempre voy a estar con ustedes. Siempre”, dijo la expresidenta y, añadió que venía de mantener un encuentro “en el otro extremo de la vida, los pibes”.
“Nosotros ya estamos en este extremo ya. Vengo de los pibitos en la pileta, que estaban aprendiendo a nadar, disfrutando del agua de la pileta como cualquier chico tiene derecho. Y acá estamos con los que, como yo, ya estamos en la segunda mitad de la vida, pero con mucho para ofrecer a todos y a todas. Así que, nada, yo les pido que sigan trabajando y organizándose, porque es fundamental que el pueblo, que la sociedad se organice en torno a la iglesia, en torno al club, en torno a la cooperativa de la escuela”, dijo.
En el final de su mensaje marcó con claridad una visión opuesta a la que pregona Javier Milei, al señalar que “la única fuerza que tenemos está en lo colectivo” porque a su criterio “en lo individual no se va a salvar absolutamente nadie”.
“Y que Dios, estoy absolutamente convencida, finalmente va a terminar ayudando a todo el pueblo argentino”, concluyó.
Fernández de Kirchner estuvo en La Matanza junto al cura villero Nicolás Angelotti, conocido como Padre Tano. Fue una visita sorpresa y no participó en ella ningún dirigente. La exmandataria saludó a vecinos y recorrió un club, un centro de jubilados y una iglesia.