La media sanción de la ley Bases y el paquete fiscal en la Cámara de Diputados le dio a Javier Milei su primer logro legislativo en sus casi cinco meses de gobierno. “Un primer paso fundamental para sacar a Argentina del pantano”, escribió el Presidente en su cuenta de X. Sin embargo, lejos de la euforia, lo que se palpaba este martes en los pasillos de la Casa Rosada era una sensación de alivio: primaba la consciencia de que el partido todavía no terminó y que la victoria pírrica de hoy deberá ser refrendada en el recinto del Senado en las próximas semanas. “Hay que seguir trabajando”, deslizaban en los despachos del Ministerio del Interior que comanda Guillermo Francos, figura clave en las negociaciones que lograron destrabar los apoyos de los gobernadores a la iniciativa.
“Quiero agradecer la enorme tarea de todos los Diputados que, entendiendo el momento histórico, decidieron acompañar nuestro proyecto”, se expresó Milei esta tarde, en un llamativo mensaje conciliador que incluyó un nuevo llamado a su mentado Pacto de Mayo que buscará firmar el 25 del mes que viene. Suspendida la reunión de gabinete, el Presidente recién se acercó a Balcarce 50 este martes al mediodía. Durante todo el lunes siguió los acontecimientos en el Congreso desde la residencia de Olivos, de donde salió únicamente ayer por la tarde para recibir un buque estadounidense junto a su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
A partir de ahora, todas las miradas se posan en lo que vaya a ocurrir en el Senado. La expectativa de los funcionarios de Javier Milei es que los expedientes se traten en comisiones en la semana del 8, para que lleguen al recinto el miércoles 15.
Cerca del ministro Francos saben que no deben confiarse y, ante la consulta de elDiarioAR, adelantaron que no descartan “nuevas reuniones” con mandatarios provinciales. Sin embargo, en la cartera de Interior niegan la existencia de una dinámica de “látigo y chequera” en la relación con esos referentes locales. “No hay toma y daca, simplemente contemplamos los intereses de las provincias”, deslizaron, suspicaces, en referencia a la promesa de reactivar la obra pública suspendida que le realizara el oficialismo a varios gobernadores en las últimas semanas.
La media sanción de la ley Bases y del paquete fiscal fue interpretada por el Gobierno como una “reivindicación” de la imagen caótica dada en febrero, cuando el proyecto original naufragó en medio de diferencias con la oposición. “Se priorizó el diálogo y todo fue mucho más puntilloso”, indicaron a modo de autocrítica, pese a que Milei utilizó aquel fracaso del tratamiento de la iniciativa como una oportunidad para inaugurar al artilugio discursivo del “principio de revelación”. Sus palabras del 1° de marzo ante la asamblea legislativa y el llamado a un “pacto” alrededor de premisas liberales, empoderó a Francos en la interlocución con los mandatarios provinciales. El rol de espada política del ministro llevó a que la ley, a diferencia de lo ocurrido en enero, se haya discutido sin sobresaltos en Diputados.
En las filas de La Libertad Avanza apuestan que la probable aprobación definitiva de la ley no solo le otorgue a Milei las “herramientas” que necesita para llevar a cabo su ambicioso plan de reformas, con las facultades para reestructurar organismos del Estado y privatizar empresas públicas entre sus puntos principales. En Balcarce 50 saben además que deben demostrarle al Fondo Monetario Internacional (FMI) que su programa de ajuste es lo suficientemente sustentable, al menos en el mediano plazo.
“Los representantes de las provincias tienen ahora la responsabilidad histórica de instaurar un verdadero régimen federal que devuelva la dignidad y la libertad a sus pueblos”, sostuvo la Oficina del Presidente en un comunicado que se difundió luego de la votación en general de la ley Bases, que obtuvo 142 votos a favor y 106 en contra. ¿Podrá Milei, ahora sí, lograr encolumnar a la “casta” política detrás de sus anhelos refundacionales? El gran cónclave que planea escenificar el economista libertario en Córdoba el próximo 25 de mayo será una prueba de fuego en su capacidad de trazar un horizonte.
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