El arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, brindó una misa especial por la muerte del papa Francisco y expresó que “el mejor homenaje que le podemos hacer es dejar de enfrentarnos todo el tiempo”.
En la Catedral Metropolitana, García Cuerva sostuvo que se “nos murió el Papa de todos, el Papa de los pobres aquel que muchos excluyeron”.
“El mejor homenaje que le podemos hacer es unirnos, dialogar, dejar de enfrentarnos todo el tiempo”, reflexionó.
Como primer gesto oficial de la Iglesia local tras el fallecimiento del sumo Pontífice, el arzobispo manifestó: “Que se vaya tranquilo al cielo con la tranquilidad de que sus hijos van a vivir esa unidad nacional”.
Tras la misa y frente a la prensa, García Cuerva evitó hablar sobre quién será el sucesor del papa Francisco: “Se nos murió el viejo, no es momento”, manifestó.
A horas de la muerte de Jorge Bergoglio, el Arzobispo porteño afirmó que no quiere “hacer especulaciones” y sólo se centró en el adiós a Francisco.
Asimismo, reveló que “el Papa era muy reservado con su salud” y, si bien “no le gustaba hablar” del tema, “se fue con la mayor de las alegrías” luego de la última aparición durante la celebración por las Pascuas en el balcón de la basílica de San Pedro.
Por su parte, contó que se enteró del fallecimiento de Jorge Bergoglio por teléfono, durante la madrugada del lunes y especificó que hay siete cardenales electores argentinos.
“El enorme desafío es nuestro. Todos tenemos que ser un poco Francisco. Me decían que el Papa no vino a la Argentina, pero siempre estuvo”, definió García Cuerva, y agregó: “Ha sido un Papa cercano, humano, comprometido con la realidad de los migrantes, con el tema ecológico y nos dejó una iglesia que dialoga con el mundo y muy austera”.
En otro pasaje de la conferencia, contó que funcionarios del Poder Ejecutivo y representantes del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se comunicaron para expresar sus condolencias, aunque aclaró que el presidente Javier Milei en primera persona no lo hizo.
Consultado por la ausencia de su visita al país, García Cuerva aclaró que si bien “no hubo presencia física, estuvo presente en todos los argentinos”, y destacó las preferencias por “la periferia” que marcaban la ideología del Sumo Pontífice. “Aunque sea para discutirlo, lo tuvimos siempre presente”, celebró.
Por último, visiblemente emocionado, García Cuerva recordó cuando, en el marco de su designación al arzobispado de Buenos Aires, el papa Francisco lo llamaba para darle aliento en medio de las críticas.
“Mis padres, mis amigos y la gente de las comunidades sabían quién era, pero es duro cuando a uno lo tratan mal y hay crueldades que hieren. Él me llamaba todos los días”, contó con lágrimas en los ojos, y concluyó: “Y todos los días me decía: ‘No pierdas el buen humor y acordarte que Dios es más grande’”.
Mensaje de la Conferencia Episcopal Argentina
Por su parte, la cúpula de la iglesia en la Argentina emitió un mensaje para despedir al papa Francisco:
“Con profundo dolor y con la esperanza cierta de la Pascua, la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina, en nombre de todos los obispos del país, expresamos la enorme tristeza por el fallecimiento del Santo Padre Francisco, ocurrido esta mañana del lunes de Pascua. Damos gracias a Dios por la vida, el ministerio y el testimonio de fe de quien supo guiar a la Iglesia universal con humildad, firmeza evangélica y amor incondicional por los pobres, los descartados y los que sufren”.
“Su magisterio deja una huella imborrable en el camino de la Iglesia en su testimonio de Jesucristo. Los obispos argentinos, unidos a todo el Pueblo de Dios, elevamos nuestras oraciones por su eterno descanso. Lo despedimos con emoción filial y encomendamos su descanso eterno al Padre de la Vida”.
“Invitamos a todas las comunidades a celebrar la Eucaristía en su memoria, dando gracias por su vida entregada al servicio del Evangelio, y a renovar, en este tiempo pascual y en el año jubilar de la esperanza”, expresa el escrito que difundió la Conferencia Episcopal Argentina.
Con información de agencias.
IG