Se multiplican las fiestas clandestinas en la Costa Atlántica y evalúan endurecer medidas
Mientras los casos positivos de coronavirus siguen en aumento, principalmente en el Área Metropolitana de Buenos Aires, y las autoridades ya evalúan un posible cierre nocturno de actividades como antídoto ante el rebrote de casos, durante el primer fin de semana de 2021 se desactivaron numerosas fiestas clandestinas en algunas de las ciudades de la Costa Atlántica con mayor afluencia de turistas.
Una de las localidades donde se desactivó anoche un encuentro clandestino con alrededor de 600 asistentes es Pinamar.
Personal del Ministerio de Seguridad bonaerense se acercó hasta una zona comúnmente denominada como “El Bosquecito” donde se desalojó a un grupo numerosos, en su mayoría adolescentes, que participaba de una fiesta clandestina.
Según se informó, se logró desalojar a los concurrentes sin ningún tipo de desmanes y se incautaron equipos de sonido y tomas de material fotográfico que daba muestras del evento que se estaba llevando a cabo.
También se labró un acta por infracción al artículo 205 del Código Penal a los organizadores (quienes fueron trasladados a la dependencia policial), por indicación de Juzgado Federal de Dolores y también el municipio por infracción a la ordenanza 1307/93.
La ciudad Pinamar fue foco de atención en las últimas horas por una reunión de cientos de jóvenes que tuvo lugar en la playa y dispersó la policía local.
Las imágenes del encuentro numeroso, una suerte de fiesta al lado del mar a pleno día, se viralizaron en las redes sociales y generaron preocupación por la falta de distancia social y de tapabocas entre los presentes, además del uso de cuatriciclos por parte de los policías locales.
En Mar del Plata, en tanto, las autoridades locales señalaron que fueron desarticuladas 30 fiestas clandestinas durante la noche del sábado y la madrugada del domingo. En una de ellas participaban más de cien personas en una playa, informó el Municipio de General Pueyrredón.
Con intervención de la Secretaría de Seguridad y la Subsecretaría de Inspección General de la localidad, a partir de denuncias de vecinos se pudo verificar que durante estos encuentros no se cumplían los protocolos y las restricciones vigentes por la pandemia.
En estas fiestas, que se suman a otras 26 desarticuladas desde los festejos de Año Nuevo, participaban en total más de 1.000 personas, informó la municipalidad.
Nuevas medidas
Ante el aumento de casos y la preocupación por este tipo de encuentros nocturnos en las principales ciudades balnearias bonaerenses, desde el gobierno provincial anticiparon que se están evaluando distintas medidas con el fin de controlar un rebrote masivo de contagios.
En una entrevista en Radio Con Vos, Nicolás Kreplak, viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, aseguró que entre otras opciones, se evalúa “la posibilidad de un toque de queda sanitario”, aunque destacó que no sería la única opción que se está analizando por estas horas.
“Cuando uno ve lo que sucede en las playas, no alcanza con controlar o reducir los movimientos de la noche, sino que también hay que tomar decisiones durante el día, viendo que hay una total falta de apego a los cuidados que todos conocemos”, afirmó.
Nicolás Kreplak, viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, aseguró que entre otras opciones, se evalúa "la posibilidad de un toque de queda sanitario", aunque destacó que no sería la única opción que se está analizando por estas horas
“Creo que hay que tomar decisiones bien fuertes; y eso es parte del trabajo que vamos a hacer esta semana, porque no se pueden decidir desde una oficina, sino que deben haber acuerdos muy grandes, en los que venimos trabajando pero que habrá que apurar esta semana”, adelantó el funcionario bonaerense.
Por su parte, Guillermo Montenegro, intendente de General Pueyrredón, cuyo distrito mayoritario es el de Mar del Plata, remarcó en una entrevista con Radio Continental que desde el municipio se están desarticulando “entre 10 y 15 fiestas clandestinas por noche” desde que empezó la temporada.
“Los jóvenes no se quedan encerrados en su casa. Estamos desarticulando entre 10 o 15 fiestas clandestinas por noche. El rango de edad de los contagiados ahora son los más jóvenes porque se juntan sin ningún tipo de cuidado”, afirmó Montenegro.
Sobre la posibilidad de endurecer medidas, el intendente prefirió la cautela. “No hay que cerrar la temporada, necesitamos más control, actividades al aire libre y con protocolos”, aseguró.
AL
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