“Fue en legítima defensa”. Ese fue el argumento que utilizaron los tres efectivos de la Policía de la Ciudad acusados de asesinar a Lucas González la mañana del 17 de noviembre de 2021cuando el chico de 17 años salía de entrar en las inferiores de Barracas Central.
El inspector Gabriel Alejandro Issasi (41), el oficial mayor Fabián Andrés López (48) y el oficial Juan José Nieva (37) declararon esta mañana ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOCA) 25 donde aseguraron que no habían cometido “ningún delito” y que actuaron “en cumplimiento del deber” . Ninguno aceptó responder preguntas.
Además de los tres policías hay otros once acusados por encubrimiento y torturas. Están acusados de intentar hacer parecer el crimen como un enfrentamiento con delincuentes y por torturar a los amigos de Lucas, quienes viajaban con él en el Volkswagen Suran que fue atacado por los acusados.
Issasi fue el primero en declarar. “Solamente tengo que decir que poseo veinte años de servicio como funcionario público, ejerciéndolo en el ámbito de la policía. Pertenecí a tres fuerzas diferentes, a la Policía de la provincia, a la Policía Metropolitana y de la Ciudad. En todas fui un oficial condecorado y ejercí mi función”.
“Quiero agregar que en este hecho actué en el cumplimento del deber, que ejercí la legitima defensa y que no cometí ningún delito”, agregó el acusado, mientras en la sala se escuchaban gritos de “asesino” y “vas a morir”.
Nievas declaró en segundo lugar. Señaló que se sumó a la fuerza en 2014,
Luego, declaró, quien dijo que ingresó a la policía en 2014 y, que en este caso, ejerció su “legítima defensa” y no cometió “ningún delito”, a lo que siguieron gritos de “sinvergüenza” entre los familiares de las víctimas.
El último fue López: “En este hecho cumplí con mi deber, ejercí legítima defensa y no cometí ningún delito”, aseguró.
“En 40 años de democracia nunca había visto algo igual”
Por su parte, el abogado Gregorio Dalbón, quien representa a la familia de Lucas aseguró este jueves que “en 40 años de democracia nunca había visto algo igual” y dijo que lo que buscan es “justicia” y “no venganza”.
Además, el letrado dijo que cree que hubo más involucrados en el hecho, que están siendo investigados por el fiscal de instrucción: “Nosotros creemos que los que están son pocos, hay más todavía”.
Al llegar cerca de las 9.20 a los tribunales federales de Retiro junto al padre de Lucas, Héctor “Peca” González, y los tres amigos de la víctima que sobrevivieron al ataque policial, Dalbón expresó: “Quiero recordarle a toda la sociedad, con mucha tranquilidad, que primero y principal respetamos el principio de inocencia de todos los imputados. Segundo, este hecho fue una causa que se les armó a los chicos, porque decían que hubo un enfrentamiento armado y los chicos terminaron presos, esposados, tirados en el piso, eran menores de edad”
Al respecto, el abogado agregó: “Esa causa la armaron, es decir, pudieron burlar a la Justicia y ellos estuvieron toda la noche en el (Instituto) Inchausti como imputados. Lucas estuvo como imputado con una herida de muerte en el Hospital Penna mientras los policías quedaron en libertad, así empezó esta causa”.
Dalbón aseguró que “se tuvo que deshacer la causa para entender que los chicos eran inocentes, que eran futbolistas, que habían salido de entrenar del club Barracas Central y los policías los vieron comprar un jugo en un kiosco y, a pesar de eso, que está filmado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, los esperaron, los persiguieron, los encerraron y les tiraron a matar a todos, porque fueron más de 15 tiros”
“Lo que venimos a buscar acá no es revancha, no es perpetua para todos, no es que queremos hacer algo que tenga que ver con algo que sea político, todo lo contrario, lo que venimos a buscar acá con la verdad, es Justicia para que quede jurisprudencia de lo que es el odio racial, porque la pregunta de por qué mataron a Lucas tiene una sola respuesta: por su cara, por su color de piel, no hay otra respuesta”, agregó.
“Nosotros tenemos la verdad y ellos para Lucas tenían balas”
El padre de Lucas González aseguró que confía en que durante el juicio que se inicia hoy “la verdad salga a la luz”. “Hoy es el principio del fin, hoy venimos con la verdad, nosotros tenemos la verdad y ellos para Lucas tenían balas”, aseguró Héctor “Peca” González. Y agregó: “La verdad siempre sale a la luz y vamos a ganar”.
González dijo estar “muy conforme” con la labor de su abogado, Gregorio Dalbón; del fiscal de instrucción, Leonel Gómez Barbella, y del fiscal del juicio, Guillermo Pérez de la Fuente.
“Me quitaron a mi hijo, lo digo siempre, me quitaron a mi hijo y mi señora por el momento no está conmigo, y se me hace muy difícil luchar sin mi compañera al lado”, dijo en referencia a la madre de Lucas, Cintia López, quien por cuestiones médicas no asiste al juicio.
Sin embargo, el hombre afirmó que tiene que “seguir” porque tiene “dos hijos más que esperan en casa la vuelta de mamá”. Y añadió: “Lucas no va a volver, pero acá nosotros venimos por la Justicia y la Verdad, nada más”.
Por último, elogió a los amigos de Lucas que sobrevivieron al ataque y hoy declararán como testigos al afirmar: “Ellos son unos hombrecitos porque hoy están acá presentes y van a decir su verdad, que es la única”.
Qué pasó
El crimen de Lucas ocurrió en la mañana del 17 de noviembre de 2021 y causó gran conmoción en la sociedad, lo que motivó marchas tanto en la zona de Florencio Varela, donde vivía el adolescente, como frente a Tribunales en reclamo de Justicia, y hasta se lanzó una petición por la plataforma Change.org que cuenta con la adhesión de más de 61 mil personas donde piden que se sancione la llamada “Ley Lucas” en la que exigen que se prohíba a la policía porteña a actuar sin uniforme y móviles oficiales.
El asesinato se produjo cuando el joven y tres amigos salieron de entrenar en Barracas y se subieron al Volkswagen Suran del padre de uno de ellos para volver a la localidad bonaerense de Florencio Varela.
Tras detenerse en un kiosco, los chicos comenzaron a ser perseguidos por un Nissan Tiida en el que circulaban tres policías de la Brigada 6 de la Comisaría Vecinal 4D, quienes realizaban tareas de campo en la intersección de las avenidas Iriarte y Vélez Sarsfield y no estaban uniformados ni llevaban baliza en el rodado.
Por ese motivo, pensaron que podían ser ladrones e intentaron escapar, momento en que los efectivos policiales les dispararon y un balazo impactó en la cabeza de Lucas, quien murió al día siguiente en el Hospital El Cruce de Florencio Varela.
De acuerdo con la investigación, tras disparar contra los jóvenes, los policías informaron al servicio de comunicaciones policiales que perseguían un automóvil con “cuatro masculinos con apariencia de menores, jóvenes”, que “estaban armados”, por lo que les cruzaron el Nissan Tiida para detenerlos.
Con información de Télam.
IG