José María Escobar, jubilado argentino en Ucrania: “Con mi familia decidimos que nos vamos todos o no se va ninguno”.

“Nos levantamos porque estaba temblando todo el piso. Salimos afuera, y estaban algunos de nuestros vecinos empacando sus cosas en el auto, otras mujeres gritando que se venía la guerra”, cuenta a elDiarioAr José María Escobar, un argentino jubilado que vive en las afueras de Kiev. “Nosotros acá teníamos una vida feliz, íbamos a pescar, la pasabamos bien. Mi abuelo era polaco, vivió en este lugar hace muchos años y después por la guerra se fue. Y yo volví a sus tierras”. 

José tiene miedo de lo que pueda pasar. “Tengo miedo que a mis nietos no los dejen viajar, porque ellos son polacos, nacieron acá. En mi familia decidimos que o nos vamos todos o no se va ninguno”. 

La familia Escobar no pudo abastecerse con más provisiones porque cuando decidieron hacerlo estaban todos los supermercados llenos de personas. Dice que van a poder arreglarse con lo que tienen. En la casa viven él y su mujer, que hace 6 meses perdió su trabajo en un supermercado. Por la amenaza de la guerra se mudaron con ellos su nuera y sus nietos. Viven en las afueras de Kiev, y por el momento no saben si hay refugios en la zona. Tienen uno el propio y piensan resguardarse ahí, si es que hiciera falta. 

Al mayor de los niños decidieron contarle lo que está pasando. “Mis nietos tienen 10 y 2 años. Al más grande le contamos que estamos en guerra. Él ya entiende todo y preferimos decirle la verdad”.  José se lamenta por la suerte de algunos amigos ucranianos: “Hoy a la mañana me comuniqué con uno que vivía cerca y que estaba intentando pasar las fronteras para irse a Polonia. Aún no había podido: la cola era enorme”. Antes de cortar la comunicación tiene un pedido para los argentinos: que salgan a la calle a repudiar la invasión de Rusia.  

LS