El titular del Banco Central (BCRA), Miguel Pesce, afirmó hoy que las medidas anunciadas ayer para intentar frenar la salida de dólares buscan evitar el riesgo de una “devaluación brusca”. Para el funcionario no se trata de “restricciones” sino “mecanismos de pago”.
En medio de otra fuerte alza del dólar paralelo, que ayer alcanzó los 232 pesos, Pesce responsabilizó a los “movimientos especulativos” de un mercado “pequeño” por el incremento de la divisa norteamericana.
“El Banco Central no establece restricciones a la importación sino mecanismos de pago”, dijo Pesce y aclaró que estas medidas son transitorias hasta el 1 de octubre. Y explicó que fueron provocadas por el impacto que está teniendo en todo el mundo la guerra en Ucrania, además de la necesidad de comprar energía del exterior durante la temporada de invierno. De esa manera, dijo el titular del BCRA, se registra un aumento interanual del 200% y del 80% sólo en el precio de los hidrocarburos.
Al hablar por Urbana Play, Pesce rechazó que la suba del dólar, tanto en el mercado financiero con en el paralelo, esté relacionada con los anuncios del Central. “Evitan que se vaya a una devaluación brusca”, dijo sobre esas medidas.
“Siempre que el Banco Central tomó medidas como estas fue de manera exitosa y pudimos recomponer el balance cambiario y las reservas”, aseguró.
En cambio, culpó a “movimientos especulativos” por la suba del dólar blue y agregó que “no necesariamente tienen que ver con las medidas tomadas ayer”.
“El mercado que fija el precio del dólar a través de los títulos públicos es pequeño, opera 60 millones; el oficial, unos mil millones y el ilegal, algunas estimaciones dicen que sólo algunos millones”, explicó.
Pesce también desmintió que estas medidas sean una reacción a las críticas de Cristina Fernández, quien el lunes 20 habló de un “festival de importaciones”.
“Lo que pidió la vicepresidenta es que hubiera una mayor coordinación entre Producción (por el Ministerio de Desarrollo Productivo), la Aduana y el Banco Central”, señaló y aclaró que desde el BCRA ya vienen trabajando con esos organismos.
“Estas decisiones de ayer llevan semanas de consideración entre todos los organismos, creo que llegamos a la mejor solución posible”, destacó.
Pesce puso de relieve el peso de las importaciones energéticas en el intercambio comercial, con US$ 1.600 millones en mayo y en el orden de los US$ 2.000 millones en junio, además de precisar que “estas obligaciones hay que pagarlas al contado y nos traen dificultades en la balanza cambiaria”.
“En esta coyuntura, estamos pidiendo a las empresas que financien el incremento de sus importaciones en referencia al año pasado o al 2020”, señaló, para agregar que “la forma de salvar esta situación sin generar procesos recesivos es que las empresas consigan financiamiento”.
Asimismo, advirtió que no se apunta a bajar el volumen de importaciones sino a establecer una modalidad de pago en el que las empresas deberán conseguir financiamiento “para una porción de las importaciones, que es el incremento respecto del año pasado”.
“Es algo que se puede conseguir –aseguró- y en eso estamos trabajando con los bancos y los países que son proveedores, para que se amplíe el financiamiento”.
Por otra parte, si bien consideró que “puede ser que haya maniobras especulativas y hay que trabajar para evitarlas”, sostuvo que “no constituyen el grueso del problema”.
Con información de Télam