Hay consultores a los que sus clientes empresarios les pidieron presentaciones sobre cómo será 2023 pero antes del próximo domingo. Hay compañías que celebraron sus eventos de fin de año entre octubre y las primeras semanas de noviembre. Es que en siete días arranca Qatar 2022. No todos puedan hacer como Eduardo Galeano: “Cuando el Mundial comenzó, en la puerta de mi casa colgué un cartel que decía: Cerrado por fútbol. Cuando lo descolgué, un mes después, yo ya había jugado sesenta y cuatro partidos, cerveza en mano, sin moverme de mi sillón preferido. Esa proeza me dejó frito, los músculos dolidos, la garganta rota; pero ya estoy sintiendo nostalgia”. Pero mientras seguirán abiertas las venas de la economía.
¿Adoptará el Gobierno alguna medida mientras muchos millones estemos distraídos con la Copa del Mundo? “El equipo está trabajando en sostener el tipo de cambio, en gestionar las variables económicas de la mejor forma posible, pero no hay nada previsto para el Mundial”, contesta un funcionario del equipo del ministro de Economía, Sergio Massa. “El ministro está con Precios Justos a fondo”, señala otro en referencia al congelamiento de 1.700 productos por cuatro meses.
Un alto funcionario del equipo económico añade: “No va a pasar nada raro. Quizá una rueda especial para soja de nuevo, pero a $ 225”. Ante la fuerte pérdida de reservas que está sufriendo el Banco Central después del colchón que había ganado en septiembre con el dólar soja a $ 200, se analiza la opción de atraer al 30% de cosecha que aún se guarda en silobolsas con otra oferta de tipo de cambio más alto, pero esta vez a $ 225. Pero en el sector financiero ponen en duda que los sojeros vayan a entusiasmarse dado que a la incertidumbre económica persistente ahora se ha sumado el agravamiento de la sequía.
El Banco Central necesita más dólares para proveer a todos los sectores productivos que están al borde de la paralización por falta de insumos importados, desde la industria hasta la minería, desde los servicios de Internet hasta la marina mercante. De no resolverse esta escasez, algunas pymes amenazas incluso con despidos.
Tensiones
“Creo que se van a ver muchas tensiones en este mes del Mundial, pero mientras no se ajuste el tipo de cambio a la realidad de la falta de reservas, podemos tener más noticias de prohibición y control del uso de los dólares, incluso del dólar Qatar, que da $ 335, pero no va a haber una devaluación de una vez”, pronosticó el economista Orlando Ferreres. Su colega Juan Miguel Massot, de la Universidad del Salvador, descarta el anuncio de un plan de estabilización contra la inflación, que vendría antecedida por una depreciación brusca del peso: “En principio no debería esperarse un cambio radical de rumbo o enfoque, sino más bien, si hubiese algún cambio, serían medidas complementarias en la línea que están siguiendo en los últimos meses”. Tampoco Hernán Hirsch, de FyE Consult, prevé batacazos: “No creo que haya nada nuevo, vemos más de lo mismo, excepto que se produzca algún shock no esperado”.
Mientras no se ajuste el tipo de cambio a la realidad de la falta de reservas, podemos tener más noticias de prohibición y control del uso de los dólares, incluso del dólar Qatar, que da $ 335. Pero no va a haber una devaluación de una vez
En un banco internacional considera que hay dos grandes desequilibrios en la coyuntura: el financiamiento del déficit fiscal primario (antes del pago de deuda) del 2,5% del PBI en el mercado doméstico de pesos y el desequilibrio de la balanza de pagos del país, que provoca la caída de reservas por la escasez de dólares. “El más preocupante en el corto plazo es cómo se va a financiar el Tesoro en pesos, sin recurrir a la emisión monetaria, como prometió Massa. Seguramente el Tesoro lo logrará, pero va a tener que forzar algunas cosas para lograrlo porque diciembre cerrará con un déficit importante aun cuando se cumpla la meta del 2,5% con el Fondo Monetario Internacional (FMI). En materia de reservas, si bien las vienen perdiendo muy rápido, todavía tienen colchón para entrar en el primer trimestre de 2023”.
Descompresión
Un alto funcionario del equipo de Massa descarta problemas en el financiamiento por el canje de deuda que vencía a fin de año y cuyo 60% se postergó para 2023 en una operación materializada este jueves. “El canje nos descomprimió bastante, nos dejó bastante tranquilos. Nos quedan alternativas de financiamiento en el mercado para cerrar 2022 con participantes que hasta la fecha no venían participando. Algunos son organismo del Estado nacional y otros son corporativos. Así que no lo veo tan complicado”, observa el integrante del Palacio de Hacienda.
En otro banco extranjero advierte sobre las tensiones en el mercado de la deuda en pesos y en el dólar, pero también en otros órdenes de la economía: “Van a tener que financiar un monto del déficit, pese al canje de este jueves. En junio empezó a enturbiarse el mercado de deuda porque la dinámica fiscal venía mal. Después se mejoró, pero vas a tener que financiar 0,5% del PBI, es mucho, va a ser difícil. Hay que meterle plata al sector público y al privado. Lo pueden financiar con letras cortas para llevar los vencimientos a marzo o abril. En el tema dólares, si bien dinámica de reservas es negativa, te estas comiendo un colchón, no es que no tenés. Cuando arranquen los octavos de final (3 de diciembre), veremos si cumplimos el target de fin de año de las reservas (otra meta con el FMI). Podés ajustar las cantidades de dólares, con torniquete, para bajar demanda, pero hay presión sobre los precios porque no lográs acumular. En su momento llegó el dólar soja. O encontrás un mecanismo similar de corto plazo o le explicás al FMI que no se pudo, o devaluás más, pero el Gobierno quiere evitar un salto devaluatorio. Enero y sobre todo febrero son meses de baja demanda de pesos, baja oferta de dólares, por eso suelen ser algo complicados. Pero en diciembre puede haber lío por otros temas. Llegarán los aumentos de electricidad, en algún momento nos vamos a sorprender con las facturas. También está la dinámica de rondas salariales, con más sectores cruzando barrera del 100%. Si no hay acuerdos, puede haber conflictos. Lo mismo con los planes sociales. Y además el Gobierno intentará cerrar los números fiscales”. Es decir, Massa deberá ajustar las cuentas para alcanzar el 2,5% mientras en la calle puede haber protestas y depende de Lionel Messi y sus compañeros de que haya festejos.
AR