A partir del avance de la campaña de vacunación contra el coronavirus, la Unión Industria Argentina (UIA) planteó que las empresas podrían considerar eliminar la dispensa a los trabajadores que decidan no inocularse y, ante la imposibilidad de incorporarlos al ámbito laboral, evaluar “cesar la remuneración”. Así lo planteó el presidente de la organización industrial, Daniel Funes de Rioja, en una rueda de prensa realizada tras la reunión de Junta Directiva en la que se analizó el contexto sanitario de la actividad productiva.
“Aquel que está con primera dosis ya puede ser convocado, pero se genera el problema con los que no quieren vacunarse. En ese caso nadie puede obligarlos, pero nadie puede obligar a insertarlos en un medio laboral con riesgo para otros trabajadores y sus familias. Por lo tanto entendemos que en esos casos cesa la dispensa y cesa la remuneración”, expresó Funes de Rioja.
Desde abril de 2020 el Gobierno nacional dispuso que los trabajadores alcanzados por el aislamiento social, preventivo y obligatorio quedaban liberados del deber de asistir al lugar de trabajo con el objetivo principal de evitar la propagación del virus, en un marco de buena fe contractual. Ahora, en un nuevo contexto sanitario, la UIA plantea la necesidad de retomar paulatinamente a la normalidad.
La UIA entiende que debe cesar el marco legal que autoriza a las personas a no trabajar, en muchos casos ni siquiera de forma remota, y aun así garantiza que reciban sus haberes u otras asignaciones. “Esta obligación atendía un principio de buena fe por la cual había una contraprestación porque no había vacuna. Ahora existe y esto tiene una contrapartida que es el cese de la obligación del pago respectivo”, dijo Funes de Rioja.
En el encuentro de la conducción de la UIA se destacó que “el punto central es el cuidado recíproco y ante la disponibilidad de la vacuna no se puede imponer, pero no vacunarse tiene consecuencias”. El directivo aseguró que esta postura fue consensuada en la Junta Directiva teniendo en cuenta la experiencia internacional y el alcance de la normativa vigente. Sin embargo, aclaró que esta posición institucional podrá ser trabajada “con los sindicatos sector por sector”; no implica una recomendación o un mandato a las empresas, que analizarán individualmente la situación. “Después, cada una lo aplicará o no”, dijo.
A nadie se le puede ocurrir que alguien pueda ganar un salario sin trabajar
Al ser consultado si la UIA contempla la posibilidad de una ola de juicios por esta postura, el industrial admitió que “en la Argentina todo se puede judicializar, pero la UIA no afirma que se tiene que despedir al trabajador sino que cada empresa sabrá qué hacer en la práctica y los riesgos que asume”.
“Lamentablemente aún con la norma muy clara a nadie se le puede ocurrir que alguien pueda ganar un salario sin trabajar. Este es el marco. Lo deseable es que no se judicialice porque hay suficiente argumentación, pero la decisión la va a tomar cada empleador”, reseñó.
En el encuentro de la Junta Directiva también se analizó el conjunto de temas que se están trabajando y preocupan al sector como los proyectos de ley sobre comités mixtos, jornada reducida y licencias parentales, sobre los cuales realiza gestiones ante el Gobierno nacional, la Cámara de Diputados y el Senado. También se afirmó que, para potenciar la recuperación del empleo formal y avanzar en materia de productividad, resulta prioritario encontrar una salida gradual a las restricciones laborales vigentes.
DT con información de Télam