Brenda Uliarte ha sido declarada “imputable” en un informe psiquiátrico elaborado por el Servicio Penitenciario que implica un importante revés para la estrategia de sus abogados defensores en la causa por el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner.
Actualmente detenida en la cárcel de Ezeiza, Uliarte está siendo juzgada junto a su exnovio Fernando Sabag Montiel, quien intentó disparar contra CFK, y Nicolás Carrizo, apuntado como el jefe de la llamada “banda de los copitos”.
Desde el inicio del juicio en junio, Uliarte estuvo mostrando comportamientos erráticos que se han interpretado como parte de una estrategia para evitar la condena. En julio, durante su turno de declarar, no pudo responder las preguntas y pidió la suspensión de su declaración en cuestión de minutos. No obstante, esta evaluación psiquiátrica, fechada el 23 de agosto, contradice estas acciones.
El informe psiquiátrico concluye que Uliarte “se encuentra vigil, orientada en tiempo y espacio”. Además, el documento señala que el “curso del pensamiento” de la acusada es “normal” y carece de “ideas patológicas delirantes ni depresivas”.
El informe también aclara que no hay indicios de ideación suicida ni riesgo inminente, aunque se observan signos de ansiedad e hipobulia. Como resultado, se recomienda su reintegro al alojamiento común y la suspensión del plan inyectable que estaba recibiendo.
El abogado de Uliarte, Alejandro Cipolla, había solicitado al tribunal un peritaje psicológico y psiquiátrico para evaluar la salud mental de su defendida. Sin embargo, tanto la fiscalía como la querella se opusieron a esta petición. El informe también respalda la capacidad de Uliarte para estar en un entorno común dentro del penal, contraviniendo la estrategia de su defensa.
El informe médico destaca que el estado de salud mental de Uliarte no justifica su declaración de inimputabilidad, y el análisis de su medicación actual también fue incluido en el informe.
DM