Apenas unas 35.000 personas. Esa cifra irrisoria sobrevoló como balance de la marcha universitaria en el comando unificado de la Policía Federal, que conduce Patricia Bullrich desde el Ministerio de Seguridad, cuando las multitudinarias columnas de manifestantes ya conectaban el Congreso con la Plaza de Mayo al caer la tarde de este martes.
Ante la consulta de elDiarioAR, desde muy cerca de la ministra buscaron bajarle el tono a la masiva movilización en un balance extraoficial. El número estimado quedó muy lejos de la cifra aportada por la Policía de la Ciudad, que depende del gobierno porteño de Jorge Macri. En el ministerio de Seguridad local, que dirige Waldo Wolff, apuntaron a este medio que se movilizaron 150.000 personas. Queda más lejos aun del número calculado por organizadores, que sumaron cientos de miles. La UBA estipuló que se movilizaron 500.000 personas.
La marcha universitaria se desarrolló de manera pacífica, sin ningún tipo de incidentes y esa caracterización la compartieron a su modo desde las fuerzas de seguridad. “Por el momento todo se desarrolla con normalidad”, señalaron desde la Ciudad minutos después de las 17. “Todo tranquilo”, fue el parte en la Nación.
La manifestación sobrepasó la capacidad del pomposo protocolo antipiquete que está activo desde el comienzo de la gestión de Javier Milei. Desde temprano Bullrich desplegó a la Federal, Gendarmería y la Prefectura en las inmediaciones del Parlamento y la Casa Rosada. “Nuestra primera responsabilidad es que los edificios federales estén debidamente cuidados”, señaló una fuente del entorno de la ministra.
Frente al Parlamento, la Federal hizo un cerco con agentes ataviados con escudos, escopetas y cachiporras. El objetivo fue evitar que la marcha llegara a ocupar ese tramo de la avenida Entre Ríos. Así, las columnas que llegaron a la plaza del Congreso desde Callao o Rivadavia continuaron su recorrido hacia la avenida de Mayo. “Por favor, suban a la plaza para manifestarse”, llegó a pedir un policía con megáfono. Cuando el acto en la Plaza de Mayo estaba comenzando, aún estaban colmadas las inmediaciones del Congreso.
Bullrich llegó al comando unificado federal cerca de las 18. Por la mañana había estado con el Presidente en la Rosada en una nueva reunión de Gabinete. Milei se retiró de la Casa Rosada cerca de las 14.
“Es una marcha rara. Hay demasiados intereses que se juntan”, había dicho temprano Bullrich para buscar contrarrestar la manifestación universitaria, a la que también se plegaron banderas partidarias, sindicales y de derechos humanos. “Es una marcha compleja, donde muchos intereses se juntan para querer poner en jaque al Gobierno”, acusó la ministra antes de la manifestación. Luego buscó bajarle el tono al afirmar que la convocatoria no superó las 40 mil personas.
MC