Bajo el título “Queremos un cambio en el país y una UCR moderna”, cuatro gobernadores radicales y los titulares de bloque del espacio en ambas cámaras del Congreso firmaron un comunicado en el que se despegaron indirectamente de la decisión del presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Martín Lousteau, de votar en contra del DNU de desregulación económica de Javier Milei que fue rechazado este jueves en el Senado por 42 votos contra 25. En el texto, los dirigentes sostienen que están a favor de impulsar nuevas reformas en el Estado, aunque reparan en que la gestión de La Libertad Avanza debe llamar al consenso y abandonar el tono de la campaña electoral.
“Respetamos el camino que eligieron los argentinos en las elecciones del año pasado con un claro mandato de cambio y vamos a contribuir con las herramientas justas y necesarias que el Gobierno necesita para avanzar en su plan de gestión”, sentenciaron, luego de introducir que la Argentina necesita “acuerdos y consensos” que permitan sacar al país del “estancamiento y la decadencia” que le endilgan al kirchnerismo. La carta que lleva el sello partidario está firmada por los presidentes de bloque en el Senado y Diputados, Eduardo Vischi y Rodrigo de Loredo, y por cuatro de los cinco gobernadores radicales. Gustavo Valdés, de Corrientes; Alfredo Cornejo, de Mendoza; Carlos Sadir, de Jujuy; y Leandro Zdero, de Chaco, estamparon su rúbrica. No lo hizo así el santafesino Maximiliano Pullaro.
“Queremos un cambio en el país y trabajamos para construir un partido moderno, que acompañe las reformas estructurales que necesita hoy la Argentina. Apoyamos el orden de las cuentas públicas para salir de esta debacle y avalamos que esté en el orden de prioridades del Estado nacional la discusión de avanzar para que haya equilibrio fiscal y no vivir con déficit fiscal como ha pasado en los últimos 65 años, lo que achata cada vez más nuestras posibilidades de crecimiento”, sostuvieron los dirigentes radicales.
Con el convencimiento de que se precisan “cambios profundos”, los cuatro gobernadores y los dos legisladores se comprometieron a “contribuir con acciones conducentes” para lograr acuerdos. “Apoyamos la discusión y el impulso de reformas necesarias en el gobierno nacional para sacar a flote a nuestra sociedad, ahogada con la inflación, la presión impositiva y la pobreza a la que nos fue sometiendo el kirchnerismo con un modelo negacionista, discriminador y corrupto”. Sin embargo, señalaron que esas reformas deben ser “fruto del consenso” y que por ese motivo “el Ejecutivo no debe tentarse con prolongar la narrativa electoral”.
“Queremos un cambio cultural, que promueva un Estado inteligente, eficaz y simplificado, que se enfoque en las principales tareas como seguridad, educación, salud, defensa y justicia”, cierra el texto. En la sesión del jueves, a Lousteau se sumó Pablo Blanco en rechazo al mega-DNU de Milei. Fueron los únicos dos senadores de la UCR que lo hicieron. Maximiliano Abad se abstuvo.
PL/MG