Si bien la mayor parte de las vacunas contra el coronavirus disponibles y que siguen en estudio fueron diseñadas para ser administradas en aplicaciones de dos dosis, múltiples factores están empujando a que las autoridades de la salud de varios países evalúen la posibilidad de “combinarlas”; esto quiere decir, cambiar la segunda dosis original por la de otro laboratorio diferente. La semana pasada, el gobierno de Alemania reveló que la canciller Angela Merkel había recibido dosis de dos vacunas distintas.
Merkel recibió una primera inyección de AstraZeneca y una segunda dosis de Moderna a sus 66 años. Steffen Seibert, su vocero, aseguró que la canciller eligió la dosis de AstraZeneca en un momento en que existían preocupaciones sobre posibles efectos secundarios. “Y por eso ahora tal vez ella pueda quitar los temores de las personas que estaban o están preocupadas por esta llamada vacunación cruzada”, agregó Seibert. La estrategia de una pauta mixta de inoculaciones usando dos vectores de vacunas diferentes se denomina vacunación heteróloga.
“Lo que se está viendo en el mundo es que empieza a haber una combinación de vacunas debido a varios motivos: la falta de ciertas vacunas en determinados países para poder aplicar; la aparición de algunos efectos adversos que supuestamente se relacionan con la vacuna (la AstraZeneca, aunque en bajo porcentaje) lo que lleva que países de Europa hayan empezado las investigaciones. Y el tercer motivo, pero en menor porcentaje, es por una equivocación o error al aplicarla, dar una que no corresponde y mezclarlas cuando no había que hacerlo”, explica el Dr. Adrián Rosa, Médico por la Universidad de Buenos Aires, a elDiarioAR.
Países como Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Alemania, Bahrain, Emiratos Árabes, Corea del Sur, España, Rusia, Italia y Suecia, entre otros, ya implementaron medidas similares con respecto a la combinación de vacunas de distintos laboratorios, en cierto grado y excepciones. Es el caso de Canadá, por ejemplo, actualizó sus pautas sobre intercambiabilidad de dosis, autorizando a quienes se dieron una primera de AstraZeneca a recibir la segunda de Pfizer/BioNTech o Moderna. En Reino Unido se comenzó a permitir la mezcla desde los primeros días de la campaña de vacunación. Mientras que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos fue más cauteloso, según explica el The New York Times: las personas que recibieron una dosis de las vacunas de Pfizer o Moderna pueden recibir una segunda dosis de las otras en “situaciones excepcionales”, como cuando la vacuna original no está disponible.
“En situaciones excepcionales en las que el producto de la vacuna de ARNm administrado para la primera dosis no se puede determinar o ya no está disponible, se puede administrar cualquier vacuna de ARNm Covid-19 disponible en un intervalo mínimo de 28 días entre dosis para completar la vacuna de ARNm Covid-19. En situaciones en las que el mismo producto de vacuna de ARNm no está disponible temporalmente, es preferible retrasar la segunda dosis (hasta 6 semanas) para recibir el mismo producto que recibir una serie mixta con un producto diferente”, indican en el escrito sobre recomendaciones.
Uno de los primeros estudios desarrollados sobre la combinación de vacunas es el CombivacS. Puesto en marcha en España, los resultados ya fueron enviados a la revista The Lancet. “Contó con la participación de alrededor de 700 personas menores de 60 años a quienes se les dio AstraZeneca y, como segunda dosis, la vacuna ARN mensajero de Pfizer. Según la información que se difundió, los efectos adversos leves fueron mayores cuando se combinaron las vacunas (dolor, cansancio, fiebre, dificultad para mover el brazo) en relación a los que habían recibido las dos dosis del mismo laboratorio. Pero también lo otro que se vio es que la medición de los niveles de anticuerpos fueron muy importantes y esto habla de que la combinación de vacunas estaría funcionando en la protección”, aseguró el Dr. Rosa. Lo que falta aún es ver los resultados en la práctica: “Hay que ver la circulación viral en cada región. Por ejemplo, en Europa se están observando menos casos de Covid, y para comparar el grado de protección que esta generando esta combinación, habría que comparar los grupos que recibieron Pfizer-Pfizer, AstraZeneca-AstraZeneca y AstraZeneca-Pfizer y cómo interactúan. Pero esto a veces es muy complicado llevar a la practica”, agregó.
Otro ensayo es el Com-CoV, hecho en Reino Unido, se está estudiando la combinación de AstraZeneca y Pfizer en 830 participantes voluntarios. Los resultados del primer análisis también fueron publicados en la revista científica The Lancet, que concluyeron que la combinación aumenta la reactogenicidad. “Arrojó resultados con similares características en lo que tiene que ver con mayores efectos adversos leves en quienes habían recibido la combinación de vacunas en comparación de quienes habían recibo la misma vacuna las dos veces. También hay que tener en cuenta que los niveles de anticuerpos de eficacia están resultando positivos en la combinación de vacunas y lo otro destacable es que no se ven efectos adversos graves o peligrosos poniendo en peligro la seguridad y la vida de las persona”, dijo Rosa.
¿Qué sucede en la Argentina?
Según indica el Ministerio de Salud de la Nación, por los datos disponibles hasta el día de hoy, las vacunas en Argentina no son intercambiables y se debe completar el esquema con la misma vacuna con la que se inició. Igualmente, varias voces del gobierno nacional y porteño se refirieron a esta posibilidad la semana pasada.
Por un lado, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, aseguró que la ciudad de Buenos Aires cuenta con la disponibilidad de aplicar las segundas dosis de las vacunas Sinopharm y Astrazeneca, en tanto que señaló que “en Argentina no están permitidas las campañas de vacunación que crucen diferentes marcas” entre ambos componentes. “Las segundas dosis hay que evaluarlas por cada una de las vacunas”, consideró.
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, reconoció que la posibilidad de combinar vacunas de distintos laboratorios está en estudio “desde siempre”.
“Es una posibilidad que se está evaluando desde el primer momento, no necesariamente por la dificultad en el acceso sino también para ampliar y clarificar la campaña de vacunación; el intercambio de plataforma puede simplificar esto”, aseguró la funcionaria. No obstante, -aclaró en declaraciones a radio Metro- que se implementará cuando exista “un consenso técnico”.
Asimismo, aclaró: “De ninguna manera decimos que esto va a suceder; lo estamos evaluando siempre, no ahora. Y cuando lleguemos al consenso técnico con la evidencia científica, la experiencia de otros países, y lo charlemos con las jurisdicciones, lo iremos definiendo”.
En la misma línea, el Dr. Rosa consideró que lo primero que hay que hacer es “ser muy cautos con toda la información que se difunda porque lo que no esté científicamente comprobado en voluntarios y voluntarias que hayan recibido, ya sea una misma vacuna o una combinación, y se comparen los resultados teniendo que esto es seguro (que no genere daño en el organismo) y que es eficaz (es decir, que va a producir defensas o disminución de la enfermedad grave, hospitalizaciones, aumento de los niveles de inmunidad humoral o celular por lo que va a dar protección) no lo podemos dar como cierto” o una garantía.
Por otro lado, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, indicó este sábado que “la combinación de vacunas es algo que se está estudiando en Argentina pero todavía no fue aprobado por la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CONAIN), que es un organismo de consulta y está formado por expertos y académicos en inmunización. Ellos son los que a partir de estudios y evidencia internacional avanzan en esas cuestiones”, señaló Cafiero.
Pero al ser consultado sobre qué vacuna podría utilizarse como segunda dosis, Cafiero se refirió a la CanSino. “El adenovirus de CanSino es un adenovirus 5, y son vacunas que se pueden combinar”, confirmó, quien además recordó que el gobierno ya tiene firmados los contratos firmados con ese laboratorio y la llegada al país sería inminente.
“Sin haber experiencia clínica con investigación científica que avale esta posibilidad, lo más parecido que uno puede encontrar como reemplazo o posibilidad, es la vacuna de CanSino que es adenovirus 5 y bastante similar al segundo componente de la Sputnik V”, apuntó Rosa. Y agregó: “Entendamos que, que tengan similitudes en el proceso o tipo de vacuna, no significa que sean iguales. Pero uno puede pensar que la vacuna de CanSino que es monodosis de adenovirus 5 podría funcionar si los ensayos que se llevan a cabo lo demuestran”. Igualmente, “son todos presunciones”.
Con respecto a la vacuna china Sinopharm, “no hay ningún estudio ni nada que avale la combinación con las otras vacunas, es bastante diferente y mas complicado pensar en hacerlo con las que tenemos disponibles en nuestro país. Vacunas ARN mensajero como Pfizer o moderna no las tenemos disponibles en la Argentina por lo que no se puede plantear una posible combinación”, cerró.
AB