Luego de una semana que se proyecta récord en la llegada de dosis, que terminaría el viernes con más de 4 millones, el gobierno ordena un esquema de vacunación con dos ejes puntuales: reforzar la provisión del componente dos de la Sputnik V y multiplicar la presencia de dosis de Sinopharm que podría convertirse en la vacuna para aplicar a menores de 18 años.
Junio se confirmó, como esperaba el gobierno, en el mes bisagra sobre el plan de vacunación: se magnificó la llegada de dosis, en buena medida a partir de que la normalización de los envíos de AstraZeneca, y se logró la velocidad crucero con más de 2 millones de aplicaciones por semana, el esquema que se planificó para llegar al inicio del invierno con los grupos prioritarios con al menos una dosis y avanzar hacia el otro objetivo: llegar a septiembre con entre 22 y 25 millones de inmunizados.
Ese ritmo, dicen en el gobierno, está garantizado para las próximas semanas y se reforzará con nuevos acuerdos y la llegada de la cuarta vacuna, la del laboratorio chino-canadiense CanSIno, que comenzaría a partir del mes de julio.
Pero el factor más complejo en el proceso de “inmunización completa” es la Sputnik V que tiene dos componentes distintos. El segundo demanda más tiempo de elaboración lo que explica, indican fuentes oficiales, la demora registrada. Primero, el objetivo fue ampliar el número de vacunados con al menos una dosis y ahora se apunta, luego de empezar a vacunar a los mayores de 40 años sin comorbilidades, a completar los esquemas.
En ese punto, en los próximos días están proyectados dos novedades: la llegada de más de entre 600 mil y un millón de dosis del segundo componente, y el inicio de la formulación del mismo por parte del laboratorio Richmond en la planta de Pilar. A principios de junio, se inició la formulación del componente 1 que deberá atravesar el proceso de control de calidad en el Instituto Gamaleya antes de poder ser utilizado. Hay proyecciones diferentes sobre los tiempos: algunas fuentes dicen que eso es inminente; otras que podría ser en agosto o septiembre.
“De AstraZeneca y Sinopharm está garantizada la cantidad para completar el esquema de inmunización. Lo más complicado es Sputnik V pero se empezó a ordenar”, explicó una fuente oficial involucrada en el Plan de Vacunación. De hecho, se sistematizó la llegada de las dosis desarrolladas por Oxford y cuyo componente activo fabricó mAbxience en Argentina y comenzó el cumplimiento del segundo acuerdo con Sinopharm, que incluye 6 millones de dosis, de las cuales dos millones comenzaron a llegar esos días.
Dosis para menores
Sinopharm se encamina a convertirse en el tercer pilar del plan de vacunación del 2021, al punto de que podría superar a la Sputnik V en cantidad de dosis. A principios de año hubo un acuerdo por 4 millones -ya enviadas-, semanas atrás se firmó el contrato por 6 millones y se negocia un tercer compromiso por entre 5 y 7 millones. Esa vacuna china podría resolver otro de los puntos difíciles del plan: la inmunización de menores de 18 años.
Como ya lo contó elDiarioAR, se empezó a negociar con Pfizer un entendimiento especial, con una ley puntual, porque esa es la única vacuna hasta ahora autorizada para menores de 18 años. La prioridad está orientada a proteger a la población de riesgo menor de edad. Las negociaciones con Pfizer siguen pero en medio de un riguroso sigilo. Salvo que el laboratorio acceda a un plan de contingencia, todo indica que sería necesario reformar la ley de Vacunas o promover una nueva ley, o normativa, para complacer las demandas jurídicas de Pfizer.
En China comenzó una aplicación piloto, todavía en período de ensayo, de la vacuna Sinopharm para menores de entre 12 y 18 años. Por la disponibilidad, esa inmunización podría convertirse en la herramienta para vacunar a ese grupo etario. Hay un dato que suele soslayarse: la dosis de Pfizer requiere una logística de aplicación, sobre todo por el “super frío” de 80 grados bajos cero, que haría difícil su despliegue en todo el país.
PI