Un tramo del Riachuelo, que comprende 200 metros entre su desembocadura y el puente Transbordador Nicolás Avellaneda, volverá a ser navegable para la realización de un proyecto turístico, tras una resolución del Juzgado Federal Nº2 de Morón que hizo lugar a un pedido de los ministerios de Turismo nacional y porteño, se informó oficialmente,
“Habilitar la navegación, incluso en este pequeño tramo, es un paso muy importante para recuperar la relación de la sociedad con el río, visibilizar los avances y generar conciencia para sostener su cuidado”, destacó el presidente de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), Martín Sabbatella.
Además, reconoció que se trata de “una nueva etapa del proceso de saneamiento”.
Luego de un periodo de análisis de la cuenca y una audiencia pública impulsada por Acumar en diciembre del año pasado para conocer la opinión de la ciudadanía, el juzgado competente resolvió el 7 de septiembre pasado otorgar esta concesión para llevar adelante las navegaciones comerciales.
La resolución se dio tras un pedido de las carteras de Turismo de Nación y la Ciudad de Buenos Aires para llevar adelante el proyecto turístico “Paseo náutico Circuito turístico Quilmes Tigre”, informó Acumar a través de un comunicado de prensa.
El circuito pasará por varios puntos de interés, entre los que se incluyen La Boca, con el puente Transbordador Nicolás Avellaneda como epicentro de la actividad.
Desde 2011 se encontraba prohibida la navegación del río, cuando el entonces juzgado de instrucción de la “Causa Mendoza”, radicado en Quilmes, declaró a la cuenca y especialmente al cauce del río como “zona crítica de protección especial con servidumbre de paso ambiental”, mientras suspendió provisoriamente y de manera total su navegación comercial.
La prohibición se hizo en pos de facilitar los trabajos de remoción de embarcaciones y autos hundidos, así como favorecer el libre escurrimiento de las aguas y el trabajo de limpieza del espejo de agua.
El histórico fallo de la denominada Causa Mendoza que la Corte Suprema de Justicia expidió hace 15 años ordenó el saneamiento de la cuenca por parte de Nación, la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia de Buenos Aires, luego de una demanda presentada por vecinos de Villa Inflamable, en el municipio de Avellaneda, y organizaciones ambientalistas.
El reciente fallo del juzgado de Morón señala que “algunas circunstancias han variado” con respecto al 2011 ya que “se han retirado las embarcaciones abandonadas y hundidas, existe un servicio permanente de limpieza del espejo de agua y de la sirga, con el reciente complemento del reperfilado de arroyos que Acumar lleva adelante”.
La medida se propone como una excepción a la prohibición ordenada en marzo de 2011 y comprende la navegación a lo largo de 200 metros, entre la desembocadura del Riachuelo, conocido como Cuatro Bocas, hasta el mismo Puente Transbordador.
En los últimos años, Acumar retiró más de 80 embarcaciones hundidas y/o abandonadas, y 100 autos y partes de carrocería que se hallaban en el lecho del río, mientras se liberó casi en su totalidad el Camino de Sirga y se comenzaron a reforestar y recuperar las riberas para el uso recreativo.
En este sentido, actualmente del lado de provincia de Buenos Aires la liberación del camino ribereño es del 100% y el trabajo que realizan las cooperativas locales pasó de ser de limpieza y recolección de residuos a mantenimiento y parquización.
Además, se retiran todos los meses cerca de 300 toneladas de residuos del espejo de agua y unas 1.500 toneladas de las riberas.
“Acumar acompañó la propuesta de navegabilidad entendiendo su importancia para promover la recuperación territorial, cultural y económica en la Cuenca. La idea es incorporar este proyecto al que ya estamos llevando adelante entre las dos orillas de La Boca – Isla Maciel, para que el Riachuelo no sea un límite, sino un lugar de encuentro”, indicó Sabbatella.
Con información de agencias.
IG