La dirigente social Milagro Sala obtuvo el alta hospitalaria tras haber sido intervenida quirúrgicamente y continuará con tratamiento ambulatorio en La Plata, informaron este lunes allegados a la referente de la organización Tupac Amaru.
“Milagro Sala de alta hospitalaria”, escribió en redes sociales su médico personal, Jorge Rachid, quien agregó que la dirigente seguirá “en tratamiento ambulatorio” en la capital bonaerense. Además, indicó que estará durante este tiempo “bajo supervisión del Patronato (de Liberados) y el juez de instrucción y con informes médicos semanales”.
El médico señaló que durante su internación en el Hospital Italiano de La Plata “cuatro equipos médicos trabajaron con Milagro por la gravedad de su lesión”.
Explicó que está bajo la supervisión del equipo de cirugía vascular periférica, hemodinamia, hemoterapia, diagnóstico por imágenes que colaboró en la cirugía y de salud mental.
“Después de la operación empezó a sentir la pierna un poco mejor por la recanalización venosa que se le hizo y esto llevó a un cierto confort de Milagro”, detalló el médico y agregó: “La expresión más clara que me transmitió a las 36 horas por teléfono fue que ahora tenía ganas de vivir’”.
Recordó que la dirigente social está “presa hace ochos años, pasó por múltiples perdidas familiares y fue sometida a una violencia de la junta médica contra ella brutal”.
Rachid señaló que por estas horas Sala está de “muy bien de ánimo”, alojada en una casa alquilada en el perímetro fijado por el Juzgado de Garantías de La Plata, dado que sigue en situación de prisión domiciliaria bajo el control del Patronato de Liberados.
El médico, en tanto, indicó que dado el cuadro de salud de la dirigente “no se descarta un nuevo abordaje quirúrgico para colocar un stent”, dado que no pudo hacerse una canalización completa.
“Fue una cirugía muy cruenta, duró cuatro horas, endovascular, por vía superior y por vía inferior y se encontraron con un panorama muy difícil desde el punto de vista del sistema venoso, dado el tiempo transcurrido en la trombosis”, señaló Rachid.
Durante la intervención “pudo extraerse parte del trombo, recanalizar el parte el sistema venoso sin colocar los stent porque la vena estaba fibrada y podía romperse por la ampliación del stent”, detalló el médico.
“Habiendo restituido el tránsito por un desfiladero pequeño, se tomó la decisión de esperar la evolución y si se puede hacer otro tipo de tratamiento, además de ir acomodando el perfil anticuagulatorio”, completó.
Sala arribó a la capital bonaerense el miércoles 4 de octubre tras haber viajado desde el aeropuerto Horacio Guzmán, ubicado en la localidad de Perico, en la provincia de Jujuy, hacia Buenos Aires, y después en ambulancia hacia La Plata, acompañada por médicos del Hospital Italiano.
Antes de su intervención, el director del Hospital Italiano, Roberto Martínez, indicó que la dirigente “presenta Síndrome post trombótico, por trombosis venosa profunda crónica del miembro inferior izquierdo, trombosis de la vena iliaca primitiva, Iliaca externa, femoral superficial y poplítea homolateral, con Síndrome de May-Thurner”.
El jueves 28 de septiembre, en una audiencia por Zoom, el juez de Jujuy Carlos Cattan autorizó a la dirigente social a continuar un tratamiento médico en ese hospital, ante la necesidad de someterla a cuidados de alta complejidad.
Cattan resolvió el pedido de traslado de Sala -quien permanece detenida bajo prisión domiciliaria- durante la audiencia requerida de manera “urgente” por “cuestiones humanitarias” por el equipo que integra la defensa de Sala.
A Sala se le detectó una trombosis en junio del 2022 y esa afección “fue menoscabando su estado físico y emocional”, argumentaron los letrados.
El 27 de junio del año pasado, Sala, de 59 años, fue trasladada desde su domicilio hasta una clínica privada de la capital jujeña luego de que los médicos le diagnosticaron una “trombosis venosa profunda” y, desde ese momento, fue desmejorando su estado de salud.
MB con información de agencia de noticias Télam