Las dos CTA convocan a protestar el jueves contra Milei: “Este gobierno tiene el boleto picado y termina en la quiebra de la Argentina”
En vísperas a la movilización a Plaza de Mayo de próximo 5 de diciembre, las dos fracciones de la CTA, nuevamente unidas frente a la gestión libertaria, lanzaron hoy fuertes críticas al Gobierno. “Este gobierno tiene el boleto picado y termina en la quiebra de la Argentina”, lanzó este lunes Hugo “Cachorro” Godoy, titular de la CTA Autónoma, que junto a la CTA Nacional de Hugo Yasky organizan la protesta del jueves.
Las centrales encabezaron este lunes una Jornada de Lucha Federal junto a integrantes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), la Corriente Federal de los Trabajadores que encabeza Pablo Moyano, el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), Territorios en Lucha, Pymes y organizaciones políticas. El encuentro previo a la marcha del jueves tuvo lugar en el Centro Cultural Paco Urondo de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA.
Allí se terminaron de definir los puntos desde los que habrá manifestaciones la mañana del jueves, para confluir a las 13 en Plaza de Mayo. Podría haber concentraciones en el Obelisco, Puente Pueyrredón, Constitución, Once y Retiro. Por la tarde la protesta de las CTA buscará darle volumen a la tradicional Marcha de la Resistencia de los organismos de derechos humanos. “No vamos a acostarnos a dormir la siesta con la gobierno. Hace falta un colectivo social que tome la bandera del pueblo”, reclamó Yasky durante la conferencia.
La consigna de la manifestación es “La patria no se vende”, y busca ser una clara confrontación contra las políticas de Milei. “El Gobierno tiene una lógica de ajuste permanente y construye una Argentina sin industria y caída de consumo populares. La libertad de los sectores populares es la de pasar hambre”, planteó Yasky.
La semana pasada, la CTA publicó un informe sobre la evolución del Salario Mínimo, Vital y Móvil, en el cual se demostró que hubo “una pérdida brutal de poder adquisitivo”, desde diciembre de 2023, “producto del efecto de la devaluación y su impacto en los precios”. En el mismo estudio se señala que la comparación de los sueldos básicos con las líneas de pobreza y de indigencia “revela una situación peor que la del año 2001”. “El salarió mínimo en octubre sólo alcanza para adquirir el 54,3% de la canasta básica de alimentos, que define la línea de indigencia para una familia tipo y poco más de una cuarta parte de la canasta de pobreza”, concluyeron.
“Frente a esta euforia que muestran las corporaciones, crece la indigencia y el hambre. Llegamos a un fin de año donde la caida de consumo de carne no tiene parangón”, ejemplificó Yasky.
“Es violencia cuando el Gobierno reforma el Estado, le quita los medicamentos a los jubilados, congela el salario social complementario y destruye la seguridad social”, sumó Godoy, que lanzó como consigna: “Justicia social frente al hambre y la pobreza. paz frente a la amenaza de discurso del odio y de accion persecutoria”.
DM/MC
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