Se demora la Sputnik V, pero el Gobierno dice que no afectará el plan de vacunación

A la espera de un OK de Moscú, está listo el operativo para ir a buscar la tercera tanda de vacunas Sputnik V a Rusia. Serán 600 mil dosis del primer componente para continuar con el operativo de vacunación que comenzó el 28 de diciembre y que hasta el viernes 22 incluyó casi 300 mil inmunizaciones.

La hoja de ruta inicial era que el vuelo de Aerolíneas Argentinas (AA) salga el viernes y esté de regreso este fin de semana, y que traslade “cerca de un millón de dosis”, lo que requería que sean dos aviones. Eso cambió con las horas: serán 600 mil según la disponibilidad y la capacidad de carga. A media tarde del sábado, fuentes oficiales indicaron que falta la autorización de Rusia para emprender el vuelo que podría salir este lunes.

Con la tercera tanda se llegaría a las 1,2 millones de dosis, un cuarto de los 5 millones acordados por contrato con el centro Gamaleya. En el Gobierno admiten la demora pero aseguran que eso no alterará el plan de vacunación que hasta el viernes pasado, involucró 254.456 dosis del primer componente y 25.146 del segundo componente de la Sputnik V en todo el país.

“Lo importante es que no se corte el flujo y la campaña de vacunación siga”, aseguró a elDiarioAR un funcionario nacional y reconoció que no llegarán los 5 millones acordados. En Salud, el área que comanda Ginés González García, afirman que la campaña de inmunización marcha a buen ritmo y que la demora en las dosis no altera el calendario.

Ritmo

El interrogante es a futuro. En los 24 días corridos de inmunizaciones, se aplicaron en promedio unas 11.200 vacunas por día. La campaña masiva, orientada a cubrir un universo de 25 millones de personas, demandará otra velocidad, a razón de 5 millones semanales, lo que implica unos 200 mil cada 24 horas si los centros de vacunación funcionan, como está previsto, de lunes a sábados.

En el Gobierno dan por hecho que la demora de enero se subsanará en febrero cuando comience, en todo el país, la etapa de vacunación a un universo más grande. En las prioridades que fijó Salud, entre personal de sanidad, de Seguridad, docentes y grupos de riesgo por edad o comorbilidades, el objetivo es llegar a vacunar a 14.492.299 personas.

En cuanto se termine de inocular a los 821.394 trabajadores de salud, el próximo paso será incluir al personal de Seguridad y Fuerzas Armadas -493.727 personas- y a los 7.414.866 mayores de 60 años. Hay otro grupo que supone una demanda importante y clave: según el informe oficial, en educación primaria, secundaria y terciaria, hay un universo de 1.417.310 personas.

En medio del debate sobre el inicio de clases, una de las pautas es que se vacune al personal docente. Aunque en la mayoría de las provincias el inicio de clases está previsto para el 1 de marzo, en CABA, Horacio Rodríguez Larreta quiere comenzar con las primeras asistencias el 17 de febrero. En la provincia de Buenos Aires, algunos grupos de estudiantes también podrían empezar el mismo día.

Hasta ahora, el ritmo de vacunación en las provincias presentó panoramas desiguales. Mientras en Misiones, La Rioja y CABA se aplicaron casi en su totalidad las dosis del primer componente, en otros distritos como San Juan y Corrientes, el porcentaje de aplicación está abajo del 70%, según los datos que las jurisdicciones cargaron al sistema nacional.

De acuerdo a esos registros del Ministerio de Salud, de las 296.100 dosis del primer componente distribuidas entre las 24 jurisdicciones, al último viernes se aplicó el 96%, a la que vez que la semana pasada comenzó a darse el segundo componente que está, todavía, en un número bajo: algo más de 25 mil aplicaciones en todo el país.

Para tener una dimensión del volumen. En la provincia de Buenos Aires, el territorio más poblado, el gobierno de Axel Kicillof proyecta un esquema que apunta a vacunar, avanzado febrero, 140 mil personas por día en cerca de 500 puntos de vacunación de toda la provincia, además de 2 mil geriátricos. Para mantener ese ritmo, el gobierno nacional tendrá que garantizar 1,5 millones de dosis por semana para todo el país.

Aparecerá, además, una dificultad logística: En principio, los vuelos podrán trasladar como máximo 600 mil dosis hasta que haya una adaptación adicional de los Airbus 330 que, sin embargo, requerirá una autorización de la compañía fabricante, lo que podría demandar un tiempo extra.

La otra cuestión está referida a la distribución en territorio. Hasta ahora, Andreani repartió 125 mil dosis por semana, pero para tener ritmo de vacunación masiva, debería multiplicar por once el volumen a distribuir.

PI