24 de marzo: el gobierno nacional adelantó que el operativo de seguridad en CABA será sin “protocolo antipiquetes”

Desde el entorno de la ministra anticiparon que no aplicarán el protocolo antipiquetes, al igual que ocurrió en la última protesta de los jubilados del pasado miércoles, y especificaron que trabajarán en coordinación con la Ciudad de Buenos Aires, en un despliegue que contará con escasa presencial policial.
Este nuevo enfoque se fundamenta en el carácter pacífico de la movilización. A su vez, la funcionaria le trasladó al presidente Javier Milei que se trata de una marcha histórica y conmemorativa que tiene lugar en el marco de un feriado nacional.
“Es un concepto completamente distinto al de piquete”, aclararon desde el Ministerio de Seguridad. “La idea es tener la menor presencia policial. Es una marcha tradicional que se hace un feriado”.
Sin embargo, revelaron que llevarán adelante el monitoreo de la extensa movilización para coordinar los cortes de las calles afectadas por la tradicional procesión que tiene lugar desde la Ex ESMA, punto de concentración, hasta la Plaza de Mayo.
Bullrich trabajará junto a su par de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Giménez, con quien mantiene un aceitado vínculo laboral, a diferencia del que tenía con su antecesor Waldo Wolff, con especial atención en la permanencia de los manifestantes en la Plaza de Mayo, la Casa Rosada y la zona del Congreso.
Si bien el área de Tránsito será la más afectada a la tarea, desde ambos ministerios se mantienen expectantes en la desconcentración de la movilización, momento en el que tienden a aparecen lo que califican como “infiltrados o grupos ajenos a quienes se concentran”.
“No se espera algo en concreto, porque siempre han sido pacíficas, pero vamos a estar atentos sobre todo en lo que será la desconcentración de la Plaza de Mayo y la Casa Rosada, por si hay algún tipo de infiltrados violentos que quieren causar caos”, precisaron desde el Ministerio de Seguridad.
Cabe mencionar que el Poder Ejecutivo resolvió “desincentivar” la violencia durante las protestas producto del tendal de heridos que dejó el ofensivo operativo de seguridad en la manifestación del 12 de marzo, que culminó con el fotoperiodista Pablo Grillo, internado en el Hospital de Ramos Mejía por el golpe de una cápsula metálica de gas lacrimógeno en la cabeza.
Incluso, hay preocupación de algunos miembros del Gabinete por el impacto de los episodios de abuso de las fuerzas de seguridad, que quedaron registrados en aquella concentración, en la imagen de la ministra, que se perfilaba como una de las favoritas en los sondeos de opinión.
MU con información de la agencia NA
0