El Congreso amaneció empapelado con afiches de Villarruel: “Victoria conducción”
El edificio del Congreso amaneció este viernes empapelado con afiches que resaltan la figura de la vicepresidenta Victoria Villarruel, en medio de la tensión abierta con el Poder Ejecutivo. Desde su entorno se despegan de la campaña.
“No tenemos nada que ver. No tenemos tan mal gusto”, aseguraron respecto a los afiches con fondo azul, en los que se la ve en el centro de la escena bajo el lema “Victoria conducción”.
Además, se pueden leer las leyendas “Dios, Patria y Familia”, la firma del Movimiento Justicialista Nacional y las figuras de José de San Martín, Manuel Belgrano, Juan Domingo Perón y José Ignacio Rucci.
Los afiches llegan en un mal momento para la titular del Senado, cuando es mirada con recelo por un sector de Casa Rosada, acusada de impulsar su propia campaña, diferenciada del presidente Javier Milei. Varios sectores asocian a Villarruel más cercana al peronismo de derecha que a La Libertad Avanza, aunque ella se esfuerza por mostrarse en sintonía con la administración libertaria.
Incluso, fue el propio jefe de Estado quien, en los últimos días, aseguró que la abogada “no tiene injerencia en las decisiones del Poder Ejecutivo” y la definió como “cercana a la casta”.
Pese a la escalada de tensión, la agencia Noticias Argentinas señaló que hubo conversaciones entre representantes de la vicepresidenta y el Presidente para atenuar el malestar y convivir en armonía. “Nadie que haya hecho campaña con Victoria puede creer que eso es nuestro”, insistieron. “Si esto perjudica el acercamiento es porque quienes hicieron los carteles lograron su cometido”, sentenciaron.
Villarruel enfrenta una crisis tras declaraciones de Milei, quien marcó distancia política al acusarla de estar cerca de lo que él considera la “casta” y minimizar su rol en el gobierno de La Libertad Avanza, pese a que como vicepresidenta ejerce la Presidencia del Senado pero también forma para del Poder Ejecutivo.
La relación entre ambos, fracturada desde hace meses, salió a la luz pública, sorprendiendo a Villarruel y su equipo. Aunque ha optado por el silencio estratégico, se prepara para una respuesta calculada.
La crisis surge tras meses de tensiones, incluidas diferencias en temas como el homenaje a Isabel Perón y críticas a la postulación de Ariel Lijo a juez de la Corte Suprema de Justicia. Villarruel trabajó en construir un perfil propio, pero su cercanía a líderes internacionales y contactos políticos generaron recelos en la Casa Rosada.
En privado, su equipo interpreta las palabras de Milei como impulsivas y atribuidas a influencias externas. A pesar del conflicto, el objetivo de Villarruel es cerrar el año legislativo sin problemas, mantener institucionalidad y, mientras tanto, seguir construyendo su perfil político propio por si el día de mañana debe salir a ser candidata por fuera de La Libertad Avanza.
JJD, con información de NA
0